Leyenda de la sirena

NARRATIVA LITERARIA

Integrantes:

-Juan Molina

-María Rodríguez

-Valeria Cala

-Santiago Martínez

Introducción:

Después de un recorrido a través de la historia de El Socorro nos encontramos con diferentes mitos que al municipio ha caracterizado a través de los años. “La sirena de la catedral” es uno de los mitos más conocidos, asimismo, fue el que más captó nuestra atención. Nuestro objetivo es narrar lo que lo caracteriza, así como incluir distintas versiones que encontramos entrevistando a algunos habitantes del municipio, planteándolo de una forma creativa y con rasgos de narrativa lírica que permiten entender textos de una forma más compleja.

Personajes:

Sirena-Valeria (Valeria Cala): Mujer que cuidaba el pozo de la catedral, quien se convirtió en sirena.

Santiago (Interpretado por Santiago Martínez): Joven negociante y explorador, quien salió de

su casa a la corta edad de 16 años, desde muy pequeño demostró interés por las aventuras y misterios que se oían en las tabernas luego de que los borrachos salieran de estas.

Camila (Malú Rodríguez): Hija de Santiago, al igual que él, amante de la historia.

Juan (Juan Molina): Hijo de Santiago, apasionado por la historia y los mitos.

Origen de la sirena en la Catedral, El pozo que separó un amor joven

Érase una vez, una particular noche, cuando Santiago escuchó a dos borrachos hablar de una encantadora mujer que se encontraba en la catedral, a quien pocas veces se le había visto rondar por el pueblo, pues se le tenía encomendado el cuidado de un pozo en especial. Sin embargo, Santiago, amante de los misterios quedó cautivado y su curiosidad lo llevó a comprobar lo que allí pasaba. Fue así como a la mañana siguiente, antes de que el primer gallo cantara, llegó a la catedral solo para lograr escabullirse y encontrar a tan preciosa mujer. Empezó a dar vueltas y vueltas por la Catedral y así logró encontrar el pozo del cual había oído y junto a este, encontró una preciosa mujer con un cabello largo y sedoso, con una piel que brillaba cual perla en el mar.

Santiago, quedó impresionado, él simplemente no lo podía creer, decidió observar cada detalle y notó en su rostro una inmensa tristeza, lo que para él fue más confuso aún, pues no encontraba explicación a tanta tristeza en un ser tan perfecto. Así, él decide acercarse.

Santiago: Hola, me presento, soy Santiago, disculpa, me has causado curiosidad, noto la tristeza en tu rostro, ¿cuál es la razón?

Sirena: *Confundida por la pregunta* No puedo dejar de cuidar este pozo, pues si lo hago una terrible maldición caerá sobre el pueblo.

Después de esta respuesta Santiago quedó aún más cautivado y es así como nuestro pequeño aventurero decide visitar todos los días a esta mujer quien era llamada Valeria. Después de varias visitas, una hermosa noche deciden salir a dar una vuelta mientras charlaban y disfrutaban la bonita noche fuera de la catedral dejando al pozo sin ningún vigilante, los dos jóvenes quisieron ir a un lago al que solían ir los enamorados, aunque éste, no sería uno de esos casos. Su compañía se hacía muy agradable por lo que iban en risas y felices hasta más no poder, sin embargo, oyeron un ruido cerca de ellos, lo que por lo visto era una crecida de agua que los golpea con tal fuerza que los empujó en direcciones contrarias, luego de unos minutos de desespero y esfuerzo para no dejarse llevar por la fuerza que a los dos separaba, Santiago logra levantarse un tanto confundido por la situación, y de inmediato, sale a buscar a Valeria, a quien encuentra con una rama a través de su pecho.

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