OPINIONES Y COMENTARIOS DE UN PISO DE TIERRA

OPINIONES Y COMENTARIOS DE UN PISO DE

TIERRA

La Intolerancia, la Religión y las Elecciones del Próximo 04 de Febrero

En las pasadas elecciones presidenciales en los Estados Unidos, un intolerante y repudiable candidato Republicano uso como su caballo de batalla en la campaña a la presidencia, un ataque indiscriminado contra los inmigrantes centroamericanos y especialmente los mexicanos, proponiendo incluso la construcción de un muro más extenso y más elevado, para impedir nuevos ingresos de los que para el son los causantes de los males, que padece esa nación que fue formada y consolidada por Migrantes. Su repudio llego al extremo de querer expulsar a los que ya residían en ese país.

Sus posiciones extremistas y xenofóbicas calaron en un gran grupo de radicales que lo llevaron al poder.

En nuestro país, desde hace años, con la hipocresía más desleal ante los millones de personas que no nos consideramos ateos, las distintas sectas (NO SON MAS QUE SECTAS, PORQUE CADA DIA LES GANA MAS TERRENO EL ATEISMO) religiosas que conviven con nosotros, como la católica, de la que he sido parte y soy seguidor, las evangélicas y otras a las que no conozco su nombre (como la del tal JUSTO o Zacarías), en forma despiadada vienen atacando, discriminando a los hijos de Dios, quien no es excluyente ni discrimina, que tienen preferencias sexuales distintas a las de cada vez menor  mayoría, de la que se jactan los jerarcas de estas sectas. Desde el surgimiento de la humanidad se conoce del homosexualismo, del adulterio, de los papados, cardenales, obispados comprados. Los que profesamos esta secta, lo hacemos porque no creemos en los humanos que las dirigen, si no, que creemos en un ser supremo quien no discrimina color de piel, condición social, condición física, ni mucho menos preferencias políticas, sexuales, porque tenemos profunda convicción de que el todo lo observa y su perdón ante un arrepentimiento sincero no será negado, de los que lo alabamos y tenemos una fe pura y sincera en su existencia.

En la secta que profeso, qué más quisiera este piso de tierra, que los altos jerarcas de la misma, se dedicaran a combatir abiertamente, pero transparentemente a los miles de pedófilos que han encubierto durante siglos, que incluso bajo el más grande cinismo son los encargados de realizar los más sagrados acontecimientos que tenemos los católicos, como la confesión, el bautismo, la confirmación, el matrimonio, entre otras.

La iglesia somos todos, como miembro. solo le pido a la que pertenezco a realizar una limpieza real a lo interno, a devolverle a la sociedad las riquezas de las que indebidamente se apropiaron, no importa que sea para paliar la miseria en las que viven miles de sus seguidores. Miles de homosexuales y lesbianas son fieles creyentes de la fe católica, asisten a los actos religiosos con más fe y respeto que muchos de nosotros, porque creen en Dios, no en los que realizan esos oficios religiosos, quienes en innumerables ocasiones dedican la homilía a atacar descaradamente a las personas que tienen una distinta pero respetable preferencia sexual.

Ahora resulta que la elite de la secta a la que me congrego, desde el pulpito apadrina a un líder de otra secta evangélica, atacando abiertamente a los homosexuales y lesbianas que quieren convivir como lo han hecho durante años, pero bajo un marco civil y jurídico que reconozca sus derechos, como seres humanos, como hijos de Dios. Porque no se dedican también a educar y contrarrestar el pecado del adulterio, de la fornicación, de la infidelidad, cada vez más frecuentes en nuestras familias, que las dividen, las separan, los alejan unos de otros, personas que ustedes les dan la bendición, la comunión, que son padres, abuelos pero que más desviados sexualmente que ninguna persona que sea abierta y sincera ante los ojos de Dios, comulgan, contraen matrimonio, porque EL QUE DIRAN, pesa más que su verdadera naturaleza  y preferencia sexual.

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