Reseña Estanislao Zuleta

Zuleta, E (1994). “Elogio de la dificultad”. Elogio de la dificultad y otros ensayos.                      Cali: Fundación Estanislao Zuleta.

Al inicio de este ensayo, extraído del libro Elogio de la dificultad y otros ensayos, el escritor colombiano Estanislao Zuleta establece una fuerte crítica hacia el ideal de felicidad sustentado por la sociedad en la actualidad, el cual está basado esencialmente en el facilismo y en la mediocridad. Es por esta razón que, hoy por hoy, lo que la mayoría de las personas ansía es un mundo mucho más llevadero y simple, en el que la vida esté llena de satisfacciones y no desdichas, en donde todo lo adverso se haga a un lado y, por ende, no haya necesidad de esforzarse para subsistir. De esta manera, Zuleta prosigue este ensayo dando cuenta del problema real que acaece a la sociedad. Más adelante el autor hace énfasis en la concepción paranoide de la verdad, característica de muchos tipos de formaciones colectivas y por último, propone un par de reflexiones.

De acuerdo a lo que plantea Zuleta, el verdadero problema de la humanidad no radica en la incapacidad de cumplir con los objetivos que se propone, sino que, por el contrario, yace en aquello que se desea. A esta idea se le podría agregar que, pese a que es muy cierta, dado que es una situación muy habitual en la actualidad, las personas aspiran a ese ideal de un mundo perfecto debido a que están bajo la creencia errónea de que así se vive mejor. Sin embargo, ellas no se percatan de que, un mundo en donde todo es asequible y no es necesario esforzarse, pronto las convertiría en personas pasivas, sin aspiraciones en la vida. En consecuencia, no se propondrían metas y mucho menos tendrían deseos de luchar por la vida, lo que sería realmente penoso, ya que una vida sin objetivos y sin ambiciones qué cumplir no tendría sentido.

  Teniendo en cuenta lo que propone el autor, muchas congregaciones, ya sean partidos políticos o asociaciones religiosas que están provistos de una misma creencia y un fin último, tienden a caer en lo que se conoce como una “visión paranoide de la verdad”, en la cual todo aquel que objeta contra los argumentos planteados por estos mismos, es visto como el enemigo y de inmediato rechazado. De lo anterior se podría decir que, esta situación es muy frecuente en la actualidad, no obstante, se le puede argumentar que a pesar de que estas personas pertenezcan a una congregación y vivan bajo ciertas ideologías, eso no les da el derecho de menospreciar o de

denigrar de las creencias ajenas, por el simple hecho de que creen poseer la verdad absoluta. Es por tal razón que se hace imperioso por parte de estos individuos, el que se cuestionen ya sea por su comportamiento hacia los demás o por la doctrina a la que apoyan, dado que es necesario darse a la tarea de analizar aquello que se defiende y así ver si vale la pena mantener esa ideología o por el contrario se está en un error.

Luego de plantear lo anterior, Zuleta propone un par de reflexiones. La primera consiste en que, es realmente importante luchar por una sociedad diferente y la segunda en que es necesario cuestionarse acerca de lo que el autor llama “no reciprocidad lógica”, según la cual las personas tienden a juzgarse a sí mismas bajo un circunstancialismo, lo que se fundamenta en la justificación del actuar propio como resultado de las circunstancias y a los demás bajo el concepto de esencialismo, en el que básicamente la otra persona se merece lo que le sucede  debido a su forma de ser. De esta última reflexión, se puede decir que al igual que las demás afirmaciones, este es un hecho innegable del cual se puede dar fe con muchas situaciones del diario vivir. Por ejemplo, cuando asesinan a una persona de clase social bastante acomoda, con lujos y ostentosidades, lo que la mayoría de gente piensa en esos casos, si la persona era en un principio pobre y logro prosperar por las razones que fuesen, es que este era un narcotraficante o algo por el estilo, y que lo mataron sea por sus negocios turbios o por deudas.

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