Todo contrato es un acuerdo de voluntades de dos o más partes, mediante el cual se crea, regula, modifica o extingue una relación jurídica patrimonial

Todo contrato es un acuerdo de voluntades de dos o más partes, mediante el cual se crea, regula, modifica o extingue una relación jurídica patrimonial.

En lo que respecta a los contratos de trabajo, éstos configuran un negocio jurídico bilateral de cambio, en el cual el trabajador procede voluntariamente a ceder su fuerza de trabajo a cambio de una retribución de contenido patrimonial, a favor de otra parte denominada empleador, que incluye la facultad de éste último de dirigir y fiscalizar la prestación de trabajo, así como la de sancionar su desempeño (1).

De esta forma, podemos observar que el contrato de trabajo no es un producto normativo en cuanto sus efectos alcanzan únicamente a las partes que lo celebran (trabajador y empleador) (2). Así pues, el contrato de trabajo establece derechos y obligaciones para las partes, las cuales pueden originarse a partir de diferentes fuentes del Derecho del Trabajo (normativos y no normativos) (3).

Por lo que, ante un supuesto de incumplimiento de obligaciones o de vulneración de derechos, nuestro ordenamiento otorga a la parte afectada la facultad de accionar frente a las instancias correspondientes. Sin embargo, no resultaría razonable que este accionar tenga un plazo indefinido, de ahí que se establezcan plazos para interponer dichas acciones.

En virtud de ello, nuestro Código Civil contiene dos instituciones que regulan el transcurso del plazo: la caducidad y la prescripción. La primera, a grandes rasgos, es un modo de extinción del derecho a ejercitar; la prescripción, por otro lado, se configura como la extinción del derecho de acción entendido como la capacidad de acudir a los órganos jurisdiccionales, vale decir, el derecho que tiene todo sujeto de acudir al Poder Judicial o sede administrativa en busca de tutela. El presente informe realiza un análisis respecto a esta última institución y su aplicación en el Derecho del Trabajo.

1. La prescripción extintiva

De forma genérica, la prescripción es una institución que se basa en el transitar del tiempo, teniendo como efecto inmediato el hacer perder al titular de un derecho el ejercicio de la acción. En virtud de ello, si el titular de un durante un considerable tiempo no reclama el mismo, se extingue la posibilidad de exigir legalmente el ejercicio de éste.

De esta forma, podemos observar que el fundamento de la prescripción radica en salvaguardar el principio de la seguridad jurídica. Ello, debido a que al permirtise la oposición al ejerciciode una acción, se evita la consolidación de situaciones que, de otro modo, estarían indefinidamente expuestas, con lo cual se facilita el mantenimiento del orden social.

Sin embargo, la naturaleza de la prescripción no se agota en ello; son muchos los autores que han tratado de definir la verdadera naturaleza legal y conceptual de la prescripción, discutiéndose desde conceptos puramente sustantivos

...