Baldomera
Enviado por sandragut • 18 de Marzo de 2013 • 736 Palabras (3 Páginas) • 391 Visitas
Pablo Palacio
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Pablo Palacio
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Nombre Pablo Palacio
Nacimiento 25 de enero de 1906
Bandera de Ecuador Loja
Fallecimiento 7 de enero de 1947
Guayaquil
Nacionalidad Ecuatoriana
Educación Jurisprudencia
Alma máter Universidad Central del Ecuador
Ocupación Abogado, Escritor, Profesor
Cónyuge Carmita Palacios
Pablo Palacio (Loja, 25 de enero de 1906 - Guayaquil 7 de enero de 1947) fue un escritor y abogado ecuatoriano. Fue uno de los fundadores de la vanguardia en el Ecuador y América Latina, por tanto un adelantado en lo que respecta a estructuras y contenidos narrativos por ser su obra casi no correspondida a los escritores del costumbrismo de su época.
Índice
1 Biografía
2 Obras
3 Véase también
4 Referencias
5 Enlaces externos
Biografía
Su infancia transcurre al cuidado de su madre hasta los seis años y de un tío, en su ciudad natal. De este lapso debe señalarse un accidente sufrido a orillas de un río donde sufre una cicatriz de por vida. A los quince años ganó su primer premio por su autobiografía llamada El huerfanito. Durante su época de bachillerato leía libros de romanticismo y modernismo. Luego de graduarse de bachiller se traslada a Quito, en donde ingresa a la Universidad Central de Ecuador, con un excelente promedio, lo que alentó a su tío a pagarle los estudios de Jurisprudencia para más tarde titularse de abogado.1 Durante su estadía en la ciudad capital, se convierte en poco tiempo en uno de los referentes del Partido Socialista Ecuatoriano. Poco después de graduarse publica su libro Débora y Un hombre muerto a puntapiés. Fue Decano de la Facultad de Filosofía y Letras, profesor de Literatura y Filosofía cuando era Ministro de Educación Benjamín Carrión, ejerció la Subsecretaría del ramo; y fue Segundo Secretario de la Asamblea Constituyente convocada por el General Enríquez Gallo. Además fue subsecretario del Ministerio de Educación.2
"Solo los locos experimentan hasta las glándulas de lo absurdo y están en el plano más alto de las categorías intelectuales", escribiría en uno de sus relatos. Solo los locos se esfuerzan por recuperar la lucidez desde la audacia. Mientras la generación de escritores del 30 se dedicaban al realismo social, a él se le ocurrió ser un adelantado a su época, indagar en la psicología del hombre, hablar de seres y casos mórbidos, de antropófagos sádicos o de siamesas celosas, de huerfanitos con miedo, de mujeres que miran las estrellas, de comedias cotidianas, pero inmortales. Por eso, su breve producción literaria, de apenas una década (1921-1932), sufrió hasta los años sesenta de hostilidad e incomprensión por temor, quizá,
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