Canastitas En Serie Bruno Traven

Personajes:

Mr. Whinthrop : Un ciudadano americano, terco y con grandes ambiciones en el tema de los negocios confiteros

Indito: un simple y humilde indio de oaxaca que se dedica a hacer canastitas multicolores con dibujos y diseños únicos y diferentes

Lugar: Un pequeño pueblo multicolor en el estado de Oaxaca habitado por indígenas que viven de sus cosechas y de las manualidades que realizan algunos de los habitantes del pequeño pueblo

Moraleja: En la vida cualquier clase de trabajo necesita esfuerzo y dedicación y ese esfuerzo y dedicación tenemos que aprender a valorarlo, por mas insignificante que haya sido, todo esfuerzo debe ser valorado.

Sinopsis: un dia el señor Whinthrop se aventuro a un viaje en la república mexicana, pero no era cualquier viaje que era ofrecido por una ajencia de viajes, se aventuro en un viaje por si solo, para conocer y explorar cada rincón de la república un dia llego a un pequeño pueblo de Oaxaca, en el se encontro a un indito que fabricaba canastitas canastitas con diferentes diseños, fabricadas de paja u otras fibras y decoradas con tintes extraídos de raíces y chinchillas, el señor Whinthrop, en su curiosidad se acerco al indito y entablaron un platica, al final de esta, el señor Whinthrop habia conseguido regatear las canastitas a sesenta y cinco centavos, siempre y cuando fueran mas de 10, asi pues compro 16 canastas, todas las que le quedaban al indito, y asi pues, despues de tres semanas explorando cada rincón de la república estaba convencido de que ya habia explorado todos los rincones del país y conocía el carácter de sus habitantes, asi el señor Whinthrop regreso a la ciudad de "nuyorg", mientras paseaba por la ciudad paso por una dulcería muy fina de chocolates, en cuanto vio tan finos dulces corrió por las canastas que le quedaban y entro a la dulcería exclamando que tenia la envoltura perfecta, entablo una conversación con el confitero acerca de las canastas y este le dijo que volviera mañana, así lo hizo y despues de una larga charla consiguió vender cada canasta en 1.75 US, pero la condición era que fueran mas de 2 mil docenas, así pues corrió a tomar el cuelo a Oaxaca, ahí hablo con el indito y acordaban un precio de 15 pesos por canasta, el señor Whinthrop intento muchas veces regatear el precio, pero no lo consiguió, ya que el indito argumentaba que entre mas canastas mas tiempo de trabajo, mas materiales y que así no podría cuidar su milpa ni de su cabra, el señor Whinthrop muy molesto regreso a la ciudad de nueva York, una vez ahí entro a la confitería exclamando que los indios eran unos ineptos en un país muy raro y que no sabían reconocer una verdadera oportunidad de trabajo

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