Cinema paradiso. Película conmovedora y profunda del director italiano Giuseppe Tornatore;

Cinema Paradiso

Por:  Nicolás Castaño-1ap1

Película conmovedora y profunda del director italiano Giuseppe Tornatore; quien posee una de las más destacadas carreras cinematográficas de su país por dirigir películas como “Pura Formalidad” (1994), “El hombre de las estrellas”  (1995) o “Malena”(2001);  su proyecto más reconocido es , “Cinema Paradiso” (1988), drama nostálgico e iniciático con trazos autobiográficos, consiguió el éxito internacional y ganó el premio Oscar a la mejor película de habla no inglesa (http://www.alohacriticon.com/cine/actores-y-directores/giuseppe-tornatore/, 2016 ).

Cinema Paradiso es una historia de amor por el cine (filmaffinity, 2016), ambientada en el espacio temporal de la postguerra,  esta obra narra la historia de Salvatore un niño de un pueblecito italiano en el que el único pasatiempo es ir al cine. Subyugado por las imágenes en movimiento; el chico cree ciegamente que el cine es magia; pero un día Alfredo, el operador, accede a enseñarle al pequeño los misterios  y secretos que de ocultan detrás de una película. Salvatore va creciendo y llega el momento en el que debe abandonar el pueblo y buscarse la vida. Treinta años después recibe una carta de su madre en el que debe volver a casa.

En este sentido, esta producción cinematográfica es caracterizada por sus temas centrales, tales como lo es el amor, la amistad, la felicidad, el paso el tiempo,  la muerte, y la reminiscencia, los cuales son la base y el fundamento constitutivo de toda la trama; en este sentido Tornatore presenta estos temas en tres diferentes escenarios de la vida del personaje principal, Salvatore: la niñez, la primera juventud, y la madurez.

El director en el transcurso dela obra toca estos temas de manera muy intrépida y sin caer en clichés ni estereotipos vagos; así pues nos presenta la muerte de Alfredo que sirve como elemento detonante para que Salvatore regrese a su pueblo, el sentimiento de amistad entre Toto y Alfredo; el fervoroso en indeleble amor que tiene Salvatore hacia la bella Elena o la férrea pasión de los habitantes del pueblo al cine; sumándole a esto muchos aspectos relativos de la realidad italiana de dicho periodo en el que transcurre la historia.

Respecto a las interpretaciones, cabe destacar a Philippe Noiret, excelente actor, que en su papel de Alfredo consigue con su aspecto cálido y su carácter próximo transmitir una sencillez y serenidad esenciales para la historia. Evoca la figura no solo paterna para el Totò niño, sino también de guía y mentor para el joven Salvatore, y de conciencia y memoria para el Salvatore adulto. En su función de personaje de motor y referente en la transformación de la identidad de otra persona, y con el paisaje del mediterráneo al fondo, recuerda a su interpretación de Pablo Neruda en “El Cartero” (1994). Como señalado anteriormente, el papel de Totò es interpretado por tres actores diferentes correspondientes a la infancia (Salvatore Cascio), juventud (Marco Leonardi), y madurez (Jacques Perrin) del personaje.

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