EL CABALLERO DE LA ARMADURA OXIDADA

Había en un pueblo un caballero valiente que naturalmente participaba en guerras, luchaba contra dragones y rescataba damiselas. El caballero era fácil de identificar por el brillo de su armadura, similares a los rayos del sol. Él usaba tanto su armadura hasta el punto en que llego a utilizarla para cenar y dormir con ella puesta, la razón era estar listo en caso de una guerra; su amada esposa Julieta e hijo Cristóbal ya no veían al común y corriente esposo y padre a la vez debido al exceso de uso que el padre le daba a su armadura. El hijo comenzó a olvidar el aspecto físico de su padre por lo tanto le pidió a mamá que le hiciera una descripción de papá, la mujer a su vez le mostró un retrato o fotografía.

Un día la esposa perdió la paciencia por el hecho de no poder ver el rostro de su marido y lo incomodo que era dormir y vivir junto a una ruidosa armadura. Ella le reprocho al caballero –no me amas- a lo cual este contestó -si te amo, por ello te rescate del dragón y ahora vives junto a mí en un bello castillo-. Estas palabras no pudieron convencer a su amada. Ella insistió -tu amabas el hecho de rescatarme más nunca me has amado a mí-. Inmediatamente puso a prueba a su marido diciendo: si dejas tu armadura yo me quedo contigo pero si no lo haces yo y mi hijo nos iremos a caballo de este castillo y nunca volverás a vernos.

El caballero tomó la decisión en favor de su familia, entonces decidió quitarse la armadura pero se dio cuenta que no podía hacerlo, incluso la visera estaba atorada cuando antes se podía mover para dejar pasar la comida y el agua que este llevaba a su boca. Inmediatamente fue en busca del herrero para que le ayudase a quitarse la armadura pero fue en vano. La armadura estaba atorada en el cuerpo del caballero y su esposa estaba cada día presionándolo para que se la quitara. La más grande preocupación y lo que más temía era que su esposa cumpliera su palabra de irse con su hijo lejos para siempre.

Imagino otras maneras de quitarse la armadura, por ejemplo: fundir su armadura con fuego, congelar su armadura o romperla con el disparo de un cañón. Hacer esto era peligroso y su vida iba en riesgo. Entonces decidió buscar ayuda en otros reinos y pueblos, tal vez encontraría alguien que pudiera ayudarle aunque le pesaba dejar sola su casa y familia, pues pensaba que Julieta pudiese enamorarse de otro hombre que estuviese verdaderamente dispuesto a amarla y convertirse en un verdadero padre para Cristóbal. Finalmente el caballero emprendió su viaje pero antes fue a despedirse del rey quién se encontraba en batalla y obviamente no encontró. El bufón llamado bolsalegre recomendó que no tenía que esperar al rey pues este -tardara en volver- dijo. Entonces el caballero dando media vuelta con su caballo se dispuso a partir pero se detuvo al oír la voz del bufón decir: todos tienen una armadura o problema que resolver. Bolsalegre le recomendó buscar al mago

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