EL PAPEL DEL ECOCENTRISMO DENTRO DE LA GEOGRAFÍA POSMODERNA

EL PAPEL DEL ECOCENTRISMO DENTRO DE LA GEOGRAFÍA POSMODERNA

Resumen

El ecocentrismo es una postura de desarrollo busca defender la naturaleza mediante una serie de estrategias que pueden abarcar contextos económicos, políticos y sociales. Por esta razón, el discurso posmoderno dentro de la disciplina geográfica abre un espacio para el debate alrededor de esta alternativa, donde el respeto por las creencias de los habitantes permite pensar en una sociedad futura con una relación sociedad naturaleza lograda finalmente.

Palabras clave:

Ecocentrismo, Desarrollo, Posmodernismo, Naturaleza, Sociedad.

Introducción

En la modernidad se dio un desarrollo científico y tecnológico potenciado. El papel de la medicina, la ingeniería  y la economía consiguieron ubicar al mundo dentro de círculo económico de la producción y acumulación de capital, lo que con el objetivo de mejorar la calidad de vida del ser humano, no fue una estrategia de progreso propiamente dicha.

Si bien puede pensarse que la posmodernidad tiene una concepción fatalista de la realidad, la discusión también se presta para considerar el cambio de época como una alternativa al desarrollo, pasando de un sistema de dominación y control del medio natural, a un equilibrio entre el ser humano y la naturaleza.

Por esta razón, la búsqueda de la reciprocidad entre el hombre y el medio en aras de un crecimiento como especia, da pie para pensar en un desarrollo sostenible que busca cambiar el paradigma de explotación con fines económicos, frenar la destrucción del medio natural y conseguir un bienestar para la humanidad, esta es la perspectiva ecocéntrica. Esta involucra todas las ramas que conforman a la sociedad, buscando una consolidación de una nueva forma de ver el desarrollo, una perspectiva llamada pos-desarrollista que deja atrás los regímenes modernos para encontrar una convivencia con la naturaleza.

Es preciso entender entonces bajo qué condiciones se dio el cambio de época del modernismo al llamado posmodernismo, especialmente en lo que respecta a la disciplina geográfica.  

El fin de la modernidad

La idea de modernidad que surgió en la época de la ilustración, era entendida como una libertad de pensamiento, una búsqueda de progreso de la mano con un crecimiento económico, que eventualmente fue conseguido por la relación de dominación hacia la naturaleza. Se quería llegar al conocimiento para categorizarlo como general, que además debía estar en función absoluta de los deseos del hombre.

Ser modernos es estar en un medio que promete aventura, poder, goce, crecimiento, transformación de nosotros mismos y del mundo. Y, al propio tiempo, que amenaza destruir todo lo que tenemos, todo lo que sabemos, todo lo que somos. Los medios y experiencias modernos atraviesan todas las fronteras geográficas y étnicas, de clase y nacionalidad, religiosas e ideológicas; en este sentido, puede afirmarse que la modernidad une a toda la humanidad [...] Ser modernos es formar parte de un universo en el cual, como dijo Marx, "todo lo sólido se disuelve en el aire (Berman, 1982)

En un primer momento el discurso moderno planeaba construir un futuro mejor para la humanidad, aunque eventualmente el afán por la dominación de la naturaleza evocando a la ilustración da cuenta de una suerte de paradoja encontrada en esta argumentación, donde no se llegó al fin último comprendido como el progreso mediado por la justicia, la razón y la igualdad. Es quizás debido a que nos encontramos inmersos en la posmodernidad que definirla es tan complicado. Usualmente definir un fenómeno mientras ocurre no es el proceso más sencillo de todos.

De igual manera, es Lyotard (1996) quien habla de “Posmodernidad” donde afirma "...el estado de la cultura después de las transformaciones que han afectado a las reglas de juego de la ciencia, de la literatura y de las artes a partir del siglo XIX". Se piensa al discurso posmodernista como aquel que busca replantear los discursos dominantes en la rama de la ciencia social, conseguidos de acuerdo al contexto en que se ubican.

La idea de la posmodernidad aparece a raíz de una crítica a pensamiento moderno, por sus ideales limitados, de progreso lineal e idealización de la producción, la posmodernidad aparece como la reacción a lo anti-moderno, privilegia la heterogeneidad, la diversidad, entre otras características, dejando de lado las ideas totalizadoras y universalistas de la modernidad (Harvey, 1998).

En geografía, el discurso se ubicó en torno a la importancia del espacio, las dinámicas que se haya en la sociedad vistas desde una dinámica espacial. Se opta por abandonar las falacias que imputaban de un carácter banal a la geografía, atribución dada por el historicismo, donde se pensaba el espacio como vacío e inmóvil, atrapado en la voluntad histórica (Soja, 1989).

Las posiciones iniciales del posmodernismo se fundan en un replanteo de los modelos interpretativos dominantes en las ciencias sociales y estarían influidos por efectos de contexto. Se apoyan en la idea de que las últimas décadas del siglo XX habrían conocido una doble ruptura, a la vez epistemológica y socioeconómica (Elissalde, 2001).

Esta suerte de ruptura privilegia la resignificación de discursos entorno al desarrollo. Cuando la manera en la que pensamos cambia de modo que genera un cambio en la sociedad hasta tal punto que logra transformar más bases políticas y económicas de la misma se puede encontrar una nueva forma de ver el mundo, más diversa y heterogénea.

Lo posmoderno implica desde luego una reflexión constante, donde las palabras y discursos encuentran su significado en elementos del contexto donde se llevan a cabo. El conocimiento debe ser local, sin enfocarse en los métodos universalistas que como consecuencia genera un cierto tipo de anarquía epistémica (Delgado, 2003).

Lyotard (1996) define el posmodernismo en 3 momentos importantes. El primero es el rechazo a la modernidad, relacionando todo en ella con un proceso de occidentalización, significando esto que en la posmodernidad se rechaza la occidentalización. El segundo momento es un rescate a la tradición, dejada de lado por la modernización. Y finalmente, un tercer momento es la importancia de la diversidad, la heterogeneidad y el individuo en sí.

Tal y como lo menciona Terry Eagleton, la posmodernidad se afirma en contraposición a lo establecido, resaltando las diferencias. Este discurso ha estado presente en todas las disciplinas, y eventualmente esto ha guiado el cambio de paradigma a una base epistemológica con una perspectiva tolerante, donde hay cabida a una nueva alternativa al desarrollo global.

...