El espectro del puente

tito perikoTERROR.

EL ESPECTRO DEL PUENTE

Esta es una historia real ocurrida en los a￱os 60, cuando en mi ciudad el alumbrado era apenas visible en la noche.

Cuenta mi padre que es una persona enteramente no creyente, que al salir una tarde al colegio llevaba sus libros atados con una cuerda, pensando en c￳mo resolver aquella noche su examen de literatura, an faltaban 20 minutos para caer el sol y caminaba deprisa para no atrasarse a la hora de su entrada.

Obligadamente su camino diario exig￭a que pasara por un antiguo puente de piedra con poca altura en relaci￳n al r￭o.

Esa tarde me dijo que hab￭a crecido el r￭o por una tormenta y resultaba bastante estrepitosa la corriente.

Al terminar la clase por la noche y despu￩s de haber superado el examen de literatura se encamin￳ a casa junto con un amigo para hacer el camino m￡s llevadero, al alcanzar la calle que acerca al rio los dos miraron muy a lo lejos una extra￱a luz que se vislumbraba entre las sombras.

Simplemente siguieron caminando pero poco a poco al acercarse al puente miraron como esa luz tenue danzaba como de lado a lado, haciendo zig-zag en medio del r￭o, sus ojos no daban cr￩dito a la luz que cada vez se iba acercando m￡s a ellos.

Pronto detuvieron su camino y pudieron ver desde la mitad del puente la figura de un espectro que flotaba de pie sobre las turbulentas aguas con un pesado tronco sobre su espalda, su cabello largo y oscuro completamente mojado. Lo ltimo que recuerda mi padre y su amigo antes de quedar por unos largos minutos catat￳nicos del miedo, es que era como un hombre sin rostro.

Aquella noche no llovi￳ pero al volver nuevamente en s￭, tanto el c￳mo su amigo estaban completamente mojados y sus libros hab￭an desaparecido, solamente quedaban las cuerdas.

Al no llegar pronto a casa mi abuelo, que en paz descanse, baj￳ en su bsqueda y encontr￳ a los muchachos an temblando, sin saber que decir y como decirlo...

Mi abuelo pens￳ que les hab￭a escupido el r￭o, no daba cr￩dito a lo que hab￭an visto, entonces los tres escucharon un extra￱o ruido como un lamento al otro lado del rio y el mismo espectro desaparec￭a entre la bruma del rio.

Mi padre no pudo dormir bien en mucho tiempo y su amigo se le encaneci￳ el cabello, mi abuelo decidi￳ que nunca m￡s volver￭an a pasar solos por aquel camino.

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