Ensayo el perfume. LA AMBICION ¿Una virtud o un vicio?

EL PERFUME;  Autor: Patrick Süskind

Librería: Booket

Michael Andretti Guzmán Mesa

LA AMBICION  

¿Una virtud o un vicio?

Podremos ver como la ambición juega un papel crucial y trascendental en el personaje principal (Grenouille), el cual utilizando su mayor destreza “el olfato”; que al pasar de los años había perfeccionado y agudizado, para sacar el mayor provecho y así poder llevar a cabo su plan, dicho plan costaría la vida de muchos incluyendo a su mamá; que sin importar hace lo posible para poder recolectar lo que él consideraba la fragancia más exquisita, que haría que todos lo desearan y no se negaran a estar con él, subyugando de esta manera la voluntad de quien la oliera, consiguiendo así tener a sus pies a las más altas y respetadas clases sociales.

Estos aspectos  comparándolos con estudios y algunos eventos de la vida cotidiana en los que podremos ver como la ambición juega un rol importante en el día a día, de modo que nos vemos afectados en como la utilizamos e interpretamos, además, influyendo en nuestro desarrollo de manera positiva o negativa, dando fruto a lo largo del tiempo.

La ambición (el deseo intenso por conseguir un objetivo, (RAE)), tiene como principal objetivo un impulso para lograr lo que se desea de una manera sana, pero en la actualidad lo llevamos más allá generando varias vertientes y entre ellas ¿ambición como virtud? o ¿ambición como vicio?, buscando conseguir respuesta a  lo que queremos a toda cuesta uniendo la ambición con la avaricia (u otros deseos), y que al hacerlo puede generar grandes daños o beneficios tanto a la persona, como a los que se encuentran directa o indirectamente relacionados.

Lo podemos ver claramente con Grenouille que en un inicio fue  sana su intensión de lo que iba a realizar con  los aromas, pero luego fue transformándose  en un objetivo mal intencionado que llevaría a su propia destrucción; que desde mi punto de vista fue una combinación de ambición con avaricia que no supo controlar sino que simplemente se obstino en lograrlo sin medir consecuencias.

En nuestra cotidianidad la ambición está presente en cada paso que damos, y nos hace o más fuertes o por lo contrario mas débiles

Por ejemplo, para un universitario su ambición u objetivo es graduarse en la carrera que haya escogido, pero…  que pasa si combinamos esa ambición con avaricia, su objetivo ya no sería graduarse viviendo el proceso y lo que el trae consigo, sino lograrlo sin importar quien o quienes se vean afectados; o cómo y qué se hace para lograrlo.

Allí su ambición es sana pero mal intencionada, haciendo que su foco u objetivo tome un “atajo” para lograr lo que quiere y eso conlleva grandes consecuencias  que podrían afectan directamente su futuro dejando de ser virtud y pasar a ser vicio. De modo que podríamos combinar la ambición con otros deseos, y poder encontrar infinitas alternativas que beneficien o dañen a la persona, como también a los que se vean involucrados.

Por otra parte, según un estudio dirigido por el profesor Timothy Judge de la universidad de Notre Dame, y Los resultados del estudio, “On the value of aiming high: The causes and consequences of ambition (Sobre el valor de apuntar alto: Las causas y consecuencias de la ambición)”. decían que la persona ambiciosa no es del todo feliz, pues al comparar la longevidad de un ambicioso con un “vago”; la longevidad y felicidad del ambicioso depende de sus éxitos y aciertos, por ende, llegaría a ser igual o menos feliz y longevo que un “vago”, por esta razón, proponía: “Si tienes las metas más altas del mundo siempre vas a percibirte como incapaz. Es como Sísifo empujando la piedra hacia arriba de la colina, una sed que no puede ser saciada” (Judge), y también”si tienes grandes aspiraciones es mejor que las cumplas” (Judge).

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