Helen Keller

Helen Keller nació el 27 de junio de 1880 en Tuscumbia, una pequeña ciudad rural de Alabama, Estados Unidos. Su pérdida de la capacidad para comunicarse (se quedó ciega y sorda) en tan temprana fase de desarrollo, fue muy traumática para ella y su familia, y debido a esto estuvo incontrolable por un tiempo. A pesar de sus discapacidades, muchos años después daba discursos acerca de su vida, e incluso escribió libros sobre sus experiencias. En todo esto tuvo gran influencia su institutriz Anne Sullivan, que le enseñó a leer y comunicarse con los demás y a tener disciplina. Anne observó que la niña se expresaba de distintas formas, de aquí en delante su educación adelantó sorprendentemente. Aprendió no solo a comunicarse sino que también a sentir. Gracias a Anne, Helen comenzó a ser más analítica pues ella casi no tenía mucha cultura, de hecho al principio no sabía que cada cosa tenía su nombre.

No fue hasta años después que Helen pudo finalmente hablar claramente. Su insistencia fue uno de los factores importantes para que sus condiciones cambiaran. Fue a la Universidad de Radcliffe y se graduó con honores. Helen Keller publicó su primer libro en 1902, "La Historia de Mi Vida". Siendo la primera persona sordociega en obtener un título universitario. En cuanto a la relación entre el lenguaje y pensamiento se visualiza que mientras Helen construía su lenguaje, en su mente organizaba sus diferentes pensamientos gracias a la comprensión del significado de las palabras, es decir, el pensamiento de Helen se iba generando y construyendo mediante la interacción con el ambiente y su maestra. En conclusión, el pensamiento depende del lenguaje, sin un lenguaje no habría forma de tener un pensamiento.

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