Informe de lecutura el hombre en busca del sentido

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El libro “un hombre en busca del sentido” trata generalmente de las experiencias personales del autor, Viktor Frankl, y de la historia de un campo de concentración contada por un prisionero común como se describe él mismo. En este informe de lectura se irán desarrollando varias pautas empezando por ¿Cómo se puede aplicar esta reflexión en el entorno social ante los indicadores de pobreza en Colombia?

        Para octubre del 2020 la pobreza en Colombia estaba por alcanzar el 50% esto midiendo los efectos de la pandemia por el covid-19, sin embargo, para el 2019 esta cifra en el país seguía siendo alta alcanzando hasta el 37,5% son cifras que como colombianos no podemos evitar que nos abrumen, pasa el tiempo y en muchos lugares no se habla de esta realidad enfermiza en la que estamos inmersos, la pobreza, que la mitad de la población este viviéndola es alarmante. Personas desempleadas, un crecimiento económico nacional lento puede llegar a ser catastrófico.

        Conociendo personas en condición de pobreza, escuchando sus voces decaídas, su debilidad y su depresión, atrapados en esta situación, sin tener a donde ir o que hacer para salir de esa situación, ahora que he leído el libro, reconozco como se llega a una fase de shock y de toma de conciencia donde estas personas se plantean ¿Cuál es la mejor forma de vivir? Eligiendo una actitud de reto y lucha frente a esa realidad, teniendo miedo a ese futuro tal vez incierto para la mayoría.

        Muchos de los que se enfrentan a esto han perdido la tranquilidad, pero no se han permitido dejar de vivir el presente, reconociendo que ya están en este punto han dejado de pensar en ese futuro que los agobia. Vivir el presente es la mejor forma de vivir, con esto no quiero decir la pobreza sea una forma de vida positiva o que debemos dejar de trabajar por un mejor futuro, más bien, que afrontar nuestra realidad (sea, cual sea) nos permite reconocer que el pasado ya no lo podemos cambiar y del futuro a un largo plazo no sabemos nada.

        Centrarse en lo que va a pasar en pocos días, una semana, manteniendo la esperanza en que todo va a cambiar, pero sin ignorar la situación que se vive, tener conciencia de la realidad trae consigo ciertas consecuencias como valorar las pequeñas cosas, reconocer el amor de la familia, convivir con otras personas.

        Vivir el presente, hacer planes a corto plazo, valorar las pequeñas cosas y vivir el amor ayuda enormemente a afrontar el enorme desafío de una vida en la pobreza y darle sentido a cada nuevo día, todo esto como un caparazón como lo mencionaba el autor en su libro, “el prisionero se rodeaba enseguida de un caparazón protector muy necesario”, esto para que su vida fuese menos insufrible.

        Aunque En Colombia se han llevado muchos esfuerzos para reducir la pobreza, la realidad es que seguimos siendo un país pobre un país con desigualdad, sumando qué parte de esa otra mitad de los habitantes del país pueden vivir tranquilamente sin pensar en millones de compatriotas que están inmersos en esta lucha diaria para sobrevivir.

        siempre me he cuestionado el papel que cada 1 de nosotros más como personas que como colombianos es nuestro deber D ejercer una sociedad, ser solidarios con personas que están enfrentando este reto, es conocido como personas víctimas de la pobreza no sólo luchan por cambiar esa realidad, sino que sobreviven a esta, la aceptan y la afrontan para poder seguir con sus vidas.

        Muchas veces todo lo anterior sin ayuda, si alguien que los acompañe en este recorrido que puede ser traumático para estas personas que más que una enfermedad física puede convertirse, la pobreza, bien llamada por el autor “agonía mental” seguida por esta injusticia de que personas tengan que vivir esta situación mientras otros la ignoran.

        Siguiente ha progresado en la lucha contra la pobreza, aún falta mucho por hacer es evidente las personas que viven situaciones de pobreza tienen espera a misa de qué esta situación puede cambiar, muchas dicen que los pobres viven felices, personalmente pienso que los pobres vivan felices, sino que éstos afrontan su situación la aceptan y encuentran cómo pueden vivir mientras luchan contra esta.

        Hablando ya sobre la resiliencia, pero sin ir muy a fondo es esto lo que realmente viven las personas en condición de pobreza, los caracterizó como personas resilientes que ala se adaptan a su situación entereza y positivismo de esta forma salen de su zona de confort y encuentran resultados positivos en su vida y pensamientos.

        Entrando ya en el segundo parámetro y habiendo terminado el anterior con el tema de la resiliencia procedo a contemplar en este informe el ¿Cómo incidía la vida diaria del campo de concentración en el desarrollo de la RESILIENCIA entre los reclusos?

        Viktor Frankl, autor del libro, enseñó la necesidad de transformarnos cuando no podemos cambiar las circunstancias que nos rodean y claramente es un ejemplo de cómo la resiliencia nos concede el poder tener propósitos y fortalezas para transmitir lo mejor en medio de la adversidad.

Mientras se encontraban en el campo desconcentración explica el autor, que se solía hacer un esfuerzo mental donde se imaginaban a sí mismos en un futuro no muy lejano haciendo lo que más deseaban hacer aquello les funcionó y les permitió hallar ese refugio interno que mantuvo a salvo aquellos sobrevivientes. Sí, y se refugió interno salvo su esperanza situó los propósitos en el horizonte de cada 1 de los prisioneros del cual esto se aferraron y unos cuantos alcanzaron a sobrevivir.

        Viktor Frankl explicó cómo logró darle sentido a aquello que era inexplicable, que el horror y el sufrimiento que él vivió tuviera un significado vital, para él, fue el aprendizaje para enseñar a otros a través de llevar el dolor emocional.

        Según el libro en la vida diaria dentro de los campos de concentración los prisioneros trataron cada vez más de aceptar esa realidad, cuenta que la vida allí incluso se reducía a preguntarse si se podría cambiar un cigarrillo por un plato de sopa aguada, también si aquel capo con el que le tocaba trabajar de vez en cuando, lo mataría ese día o al siguiente.

        viviendo dentro de esta angustia permanente, el autor decidió buscar algún mecanismo con el que él se pudiera sentir motivado para sobrevivir hallando un sentido a todo lo que veía sentía incluso lo que sufría, para él y me imagino que para otros prisioneros cada una de estas cosas se convertía en el aprendizaje y esperaban pueden usarlo luego para ayudar a otras personas.

Pienso y resalto, dentro de muchas otras cosas que encontré en el libro, que en medio de toda dificultad esta debería ser también nuestra estrategia encontrar cuáles son nuestros verdaderos propósitos y luchar por ellos Frankl lo explicaba muy bien: “el hombre en última instancia se determinará a sí mismo. El hombre no se limita a existir, sino que siempre decide cuál será su existencia y lo que será al minuto siguiente”

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