LA ORATORIA Y LA DICCIÓN

LA DICCIÓN

Es la forma de emplear las palabras para formar oraciones, ya sea de manera hablada o escrita. Se habla de buena dicción cuando el empleo de dichas palabras es correcto y acertado en el idioma al que éstas pertenecen, sin atender al contenido o significado de lo expresado por el emisor.

LA ORATORIA

Es descripta en términos generales como la capacidad para hablar y exponer un punto de vista en público de modo claro, atractivo y comprensible. La palabra ‘oratoria’ proviene del término latino orare que significa ‘hablar o exponer en público’. Las habilidades oratorias de una persona son extremadamente importantes cuando de convencer, persuadir o atraer al público se trata, y es por esto que son especialmente trabajadas por políticos, publicistas, líderes empresariales, figuras públicas y del entretenimiento, docentes, etc.

LOS 10 MEJORES CONSEJOS PARA UN ORADOR I

1. Escoger información pertinente: Este es un punto clave para conseguir el éxito al hablar en público, solo si la información es la adecuada para las personas a quien va dirigida conseguiremos captar y retener su atención.

Ejemplo: si hablamos de seguridad vial no podemos decir lo mismo a un grupo de conductores que a un grupo de agentes que controlen el tráfico, para cada uno de los grupos presentaríamos la información desde distinto ángulo de acuerdo a los intereses de ambos.

2. Prepararnos con mucha antelación: Si tienes que dirigirte a una audiencia como orador tiene ventaja aplicando siempre este consejo. Si preparamos con tiempo nuestra presentación todo el tiempo que tengamos hasta el día de presentarla observaremos anécdotas, escucharemos noticias, que en muchos casos podremos incluir en nuestra presentación enriqueciéndola, también nos dará tiempo a repasarla mentalmente muchas veces con lo que la haremos nuestra y eso se notará al exponerla.

3. Ensayar: Nunca debemos minimizar la responsabilidad de hablar en público, no somos robots somos personas, eso implica que pueden haber factores que nos influyan a la hora de exponer nuestra presentación, podemos estar indispuestos, recibir una mala noticia o tener que enfrentar algún problema personal o de otra índole el día que nos toque la presentación, si hemos ensayado concienzudamente eso puede hacer que superemos cualquiera de esos obstáculos que se puedan presentar.

4. Relajarse antes de tu presentación: Si hiciste los deberes no tendrás que estar hasta el último momento dando vueltas a la información. Déjate un espacio para relajarte, despeja tu mente y verás como cuando empieces tu presentación podrás concentrarte y tu mente estará más despierta y ágil

5. Buen porte al presentarte ante tus oyentes: Cuando hables en público este es un consejo que no te puedes permitir pasar por alto si has decidido ser un buen orador, no importa si hablas a un grupo de 1000 personas de 100 ó de 10 te aseguro que la forma en que caminas mientras te diriges a ellos, la sonrisa que les dediques, la calma que trasmitas, todo ello influirá en la atención que prestarán a lo que tienes que decirles.

Si empiezas a aplicar estos consejos en tus presentaciones tus oyentes lo notarán te lo aseguro, en la parte II de este tema podrás ver los siguientes consejos que te debes tener en cuenta si deseas llegar a ser un buen orador y dominar las técnicas para hablar en público.

6. Aprovechar los primeros segundos para captar su atención: Al hablar en público el orador tiene que dar atención especial a la introducción de su discurso, estos son segundos claves en que tienes que decirle a tus oyentes por qué les conviene escuchar lo que tienes que decirles, si no consigues convencerlos en los primeros segundos después te será más difícil y puede ser que no lo consigas.

7. Usar preguntas para hacer razonar: Para conseguir que tu presentación sea un éxito necesitas que tu auditorio siga el razonamiento de tu exposición, para lograrlo usa las preguntas, ellas te pueden ayudar a que tus oyentes reflexionen en los puntos claves que tu desees.

8. El buen orador usa anécdotas, ejemplos, ilustraciones: Los ejemplos y anécdotas e ilustraciones no solo darán vida a tus relatos, también pueden hacer que tus oyentes se identifiquen con ellas y eso les dará razones para seguir tus indicaciones; Al hablar en público no olvides personalizar tus ejemplos o ilustraciones, aunque sean ficticias debes usar un nombre para el protagonista, puede ser ficticio si deseas mantener el anonimato pero no expliques nunca una experiencia o ejemplo o anécdota sin usar un nombre para el protagonista, esto permite al auditorio identificarse con el y te ayudará a conseguir motivar a tus oyentes.

9. Usa el entusiasmo y otros sentimientos para contagiar a tu auditorio y motivarlo: Las grandes firmas de publicidad conocen el poder de las emociones, por eso las usan para que su público compre sus productos, si te fijas lo que las firmas comerciales venden es glamour, felicidad, prestigio, clase, y en esta época con la dichosa crisis cada vez más venden ahorro.

Para llegar a ser un buen orador tienes que lograr conectar con los anhelos

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