La Odisea

LA ODISEA

Esta obra literaria puede resultar fascinante debido a que su contendió muestra mucho de la naturaleza humana; y el ejemplo claro es la mitología. Quien no conoce a los mencionados dioses griegos que habitan “El olimpo”; Zeus como el dios mayor y todos sus hermanos e hijos, eso sin contar a los “semidioses”, fruto de las travesías lujuriosas de uno que otro dios, encantados por la belleza de las mujeres humanas, terminaban concibiendo hijos no legítimos, por decirlo de alguna manera, y por esta razón no tenían el derecho a estar en ese lugar, aunque también tenían su lugar en las historias. Todos estos dioses concebidos por mentes humanas, a imagen y semejanza de humanos, pero no solo es su imagen, al parecer también sus personalidades son muy humanas; vengativos, rencorosos, lujuriosos… otros amorosos y misericordiosos en fin humanos con mucho poder a mi parecer. Aunque que los humanos tengan todos esos sentimientos es culpa de Pandora, como quien dice los griegos se lavaron las manos, la culpa es de los dioses, un poco cómico pero ese no es el tema central de este texto.

Odiseo tarda diez años en regresar a la isla de Ítaca, donde poseía el título de rey, período durante el cual su hijo Telémaco y su esposa Penélope han de tolerar en su palacio a los pretendientes que buscan desposarla (pues ya creían muerto a Odiseo), al mismo tiempo que consumen los bienes de la familia. Esta es la historia que relata una musa al poeta Homero, la travesía de diez años que padeció Odiseo, en la cual perdió todos sus hombres, y el mismo, sintió la muerte acechándolo, contra el enojo de Poseidón y con la ayuda de Atenea, este héroe lucha por regresar a su tierra en busca de su amada y su primogénito.

Preso en una isla, Odiseo luchando para salir y no ser embaucado por la hija de Atlante “de pensamientos perniciosos” que lo único que intenta es hacer que se olvide de su hogar y se quede con ella. Esta parte de la historia pareciera ser muy común, historias de mujeres obsesionadas que dicen amar un hombre con locura y que ven como solución retenerlo por la fuerza, esta diosa utiliza sus poderes divinos, pero los humanos pueden utilizar artimañas más bajas. Como lo mencione al principio pareciera un vivo reflejo de la naturaleza humana. Paralelo a este hecho, Telémaco el hijo del protagonista, lucha por buscar a su padre y acude primero al Rey Néstor de Pilos quien le indica que quien le puede dar información sobre su paradero es el Rey Menelao y así se da cuenta de que su padre aún vive, buena noticia para el príncipe Itancense, ahora debe buscar la forma de traerlo a casa o por lo menos de evitar que su madre sea desposada por unos de los muchos pretendientes que hay en el palacio; mientras tanto ellos lo esperan para darle de baja.

Bueno, afortunadamente Odiseo contaba con la ayuda de nada más que la “hija del jefe”. Atenea suplica a su padre por la libertad de él y consigue convencerlo, así que a Calipso no le queda más que obedecer al padre de los dioses, y entre reproches lo deja ir. Después de partir la balsa de Odiseo se choca en la tierra de los feacios, donde lo ayuda Atenea, quien hace que la princesa se enamore de Odiseo y que convenza a sus padres que le den comida y refugio. A cambio por su ayuda, los feacios le piden que cuente su historia y aquí se empieza el largo cuento de las aventuras de Odiseo durante los años posteriores a la guerra.

Hay que admitir que hasta acá todo le he salido fácil, con la ayuda de atenea se ha librado de situaciones complejas, pero la historia que empieza a contar a los feacios es lo que se torna realmente interesante, el sufrimiento y las pérdidas que tiene Odiseo desde que se acabó la guerra en Troya. Guerra en la que murió Aquiles y donde el mismo Odiseo fue reconocido por sus astucia y dejo tantas glorias para los griegos. Hay que admirar la voluntad de Odiseo, paso diez años en guerra y otros diez regresando a su hogar, y nunca perdió la esperanza de volver a ver a sus seres amados; en este punto hay que ver que no solo la naturaleza oscura de los humanos sale a flote, esta es una muestra de persistencia valor y amor, y esto precisamente es lo que nos mantiene inmersos en la historia. Porque a quién le gustan las historias donde el protagonista es el malo, de alguna manera a todos nos agrada sentirnos buenos, y nos identificamos en estos héroes que luchan contra complicaciones sin fin y que nunca desisten; leer nos transporta a ese mundo ficticio y nos emociona vivir esas aventuras.

Odiseo salió de la Guerra de Troya con una nave llena de itacenses. Primero llegaron a una tierra extranjera y saquearon el pueblo. Unos días de tormentas más tarde, llegaron a la tierra de los lotófagos, donde los hombres comen el loto y se olvidan de sus casas y sus familias. Luego a la isla de los cíclopes, monstruos enormes con un solo ojo. Por desgracia, los itacenses se encuentran en la cueva de uno de estos monstruos, quien bloquea la salida con una piedra grande y se come a algunos de los hombres. Odiseo, sin embargo, mantiene la calma y le dice al cíclope que su nombre es "Nadie", lo emborracha y el monstruo se duerme. En la noche, Ulises y sus compañeros afilan un palo grande y ciegan a Polifemo con él. El monstruo llama a los otros, "¡Nadie me ha arruinado!", lo cual los hace pensar que nadie ha lastimado a su compañero. Tal es la inteligencia y astucia de Odiseo, pero que fantasiosa es la estupidez de Polifemo, supongo que no eran criaturas muy inteligentes, aunque sean procreadas en parte por un dios. Aunque esta no es la única muestra de la audacia de Odiseo y de la estupidez del ciclope, ahora ciego, pues, todavía queda el problema de salir de la cueva. Odiseo ata a sus hombres a los estómagos de las ovejas de Polifemo. Cuando el cíclope mueve la piedra para dejar que salga el rebaño, toca los dorsos de las ovejas para asegurar que no hay nadie escapándose y así lo engañan otra vez. Por desgracia, cuando está huyendo en su nave, Odiseo revela su nombre mientras se mofa del cíclope. Resulta que Polifemo es el hijo de Poseidón y ora a su padre, el dios del mar, y le pide que Odiseo sufra. Y que sufra más y que pierda a sus compañeros y que tal vez muera. Ésta es la razón por la que Poseidón odia a Odiseo.

Mala jugada la de nuestro héroe, supongo que se le subió un poco el ego con la victoria, pero eso le puede pasar a cualquiera. El problema es que todo el esfuerzo para salirse con la suya y termino ganándose a un dios como enemigo. Eso es tener mala suerte; pobre Odiseo, tiene que viajar por mar para volver a casa y ahora tiene en contra al dios del mar.

Odiseo sigue contando su historia a los feacios. Él y sus compañeros llegan a la isla de Eolo, el dios de los vientos. Eolo los ayuda y pone todos los vientos menos el poniente en una bolsa,

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