La Puerta Magica

La Puerta Magica

Recuerdo ese día en el que entre a un bosque en busca de un poco de tranquilidad, aunque conseguí todo lo contrario fue un recuerdo jamás voy a olvidar en mi vida.

Era una tarde totalmente perfecta, el cielo azul, clima perfecto, el sol brillando y quería mejorar esa tarde así que decidí ir durante un rato al bosque que está a unos pocos minutos de mi casa. Lo primero que vi cuando llegue al bosque fue un árbol gigante, así que decidí que me iba a acostar debajo de aquel árbol.

Cuando llegue, quise ver todo el tronco del árbol así que comencé a dar vueltas, pero algo me llamo la atención, fue una pequeña puerta ubicada en la parte de abajo del árbol.

Mirando esa puerta tan pequeña, preguntándome si entrar o no entrar, si esto cambiaria mi futuro o no, la mire por más de 5 minutos hasta que la curiosidad pudo conmigo y entre sin saber lo que me esperaba.

Mire hacia arriba y me di cuenta que era como cualquier otro árbol del bosque, pero al mirar abajo vi un portal que ya estaba absorbiendo mis rodillas, intente salir pero el intento fue en vano.

Estaba inconsciente, sin saber porque estaba ahí. Estaba acostado en una cama, ubicada en una pequeña pieza de color blanco, mire hacia la puerta, era de metal, se veía que estaba cerrada con llave y que yo estaba custodiado por 2 guardias, uno era alto y con una cicatriz que parecía de guerra en la nariz y el otro guardia era un poco más pequeño y tenía una espada en su mano.

Comencé a gritar esperando despertar de este tan loco sueño pero seguía ahí como si fuera la realidad, dos guaridas escucharon mis gritos y vinieron a ver que sucedía, pero al entrar solo me vieron a mi tumbado en la cama gritando por tratar de despertar, uno de los 2 se acercó furioso hacia mí y cuando su espada estaba a punto de llegar a mi cuello, algo en el aire detuvo la espada e hizo que el guardia volara hasta el otro extremo de la habitación, el otro guardia, asustado hecho a correr buscando ayuda.

Durante ese momento no supe cómo actuar, me quede mirando al lugar donde la espada se detuvo y con todo mi cuerpo inmóvil pude verlo, no tenía forma, era muy parecido a un fantasma, reaccione y pude ver al guardia más pequeño, estaba acostado al lado de la puerta abierta, totalmente inmóvil que parecía que el golpe fue justo en la parte más sensible de la cabeza, salí corriendo de la habitación. Lo único que vi al salir fue un pasillo muy largo con varias puertas en la pared, no estaba seguro si avanzar o no pero tome el valor para caminar sin mirar hacia mis lados.

Cada vez que pasaba entre 2 puertas se podía escuchar a personas llorar desde niños hasta ancianos, imagine que todos ellos estaban aquí sufriendo por lo mismo que yo, por entrar en la puerta del árbol.

Cuando me faltaba poco para llegar a la salida, por la puerta entraron más de 10 guardias apuntándome con sus lanzas

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