Las escamas del dragon ANALISIS

Ministerio de educación

Instituto Fermin Naudeau

Nombre:

Laura Londoño, Ana Alvarado

Año:

12° Q

Profesora:

Teresita Nieto

Materia:

Español

Fecha de entrega:

31 de Mayo del 2016

Indice

¿Qué es una obra narrativa?......................................................................3

Análisis del libro “las escamas del dragon”………………………………….4,5,6,7

Función del lenguaje…………………………………………………………..8,9

¿Qué es una obra narrativa?

Las obras narrativas cuentan hechos. Pueden estar escritas en prosa o en verso. La figura más importante es el narrador, quien es el que presenta personajes, hechos, lugares, etc. El narrador puede ser Protagonista, narra hechos que protagoniza. Testigo, narra hechos que presencia o conoce pero no le ocurren a él, y omnisciente, que se encuentra fuera de la historia, conoce todo acerca de los personajes, no sólo lo que hacen sino también lo que piensan o sienten. De acuerdo a lo que el autor quiera provocar en sus lectores, elegirá al narrador que convenga a dicho efecto

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Título: Las escamas del dragón
Autora: Evelyn Lozano Pinzón
Evelyn Lozano Pinzón, nació el 7 de noviembre de 1976, en la ciudad de Panamá.
Es Licenciada en Ingeniería Civil con postgrados en administración de proyectos y maestría en Ingeniería Ambiental.
Estilo del autor: Ha enfocado su experiencia laboral, trabajando como Ingeniera Civil. 
Combina su profesión, con la pasión por el arte y la escritura. Ha desarrollado conocimientos autodidactas de diseño gráfico, con los que alcanza diseñar la portada de su libro

Tipo de narrador: Omnisciente, ya que sabe todo lo que sucede e incluso lo que piensan y sienten los personajes. 
Elementos de la Obra Literaria
Aspectos de Fondo
Tema: Un joven con un destino, el cual lleva a cabo con perseverancia, valentía y el poder del amor.

Personajes: 
Protagonista:
Yeneard: Es valiente y aventurero, y ama a Adbyn. Viaja a través de todo Melineax para destruir los muros que encierran Sienver, su ciudad natal, y rompen su libertad. 
Principales: 
Adbyn: La prometida de Yeneard, tiene visiones que cambiarán la historia de Sienver. Enamorada de Yeneard, es dulce y soñadora. 
Cenixa: Reina de Sienver. Resulta ser una mujer sin misericordia, pero al final se arrepiente de sus pecados. 
Dawlam: Príncipe de Sienver. Es egoísta e inmaduro, pero no con malas intenciones. Ama a Adbyn, aunque esta no le corresponde. 
Loset: Hermano de crianza de Yeneard. Es lo opuesto a su hermano: tranquilo, sereno y piensa las cosas antes de actuar, aunque muy solidario. 
Soamer: El más anciano de Sienver, es también el más sabio. 
Tía Clissa: tía de Adbyn. Es cariñosa y sensible, y apoya mucho a Adbyn. 
Secundarios
Los reyes de cada ciudad: Nísgali, Susmabu, Olausria, Evant e Irimel, Natarniel, Lantabo.
Las personas que ayudan a Yeneard a lo largo de su viaje: Rojem y Macarle, Ycnega, Thulei y Silmerti, Hopner, Pertuzti, etc. 

Aspectos de Forma
Género Literario: Novela; narrativa. 
Medio de Comunicación: escrito en prosa
Recursos expresivos: hipérbole 
Argumento: 
Inicio: En un mundo mágico llamado Melineax, existen siete ciudades: Fempria, Susmabu, Tralmo, Bogars, Casmoia, Lantabo y Sienver, esta última rodeada de un alto muro cuya historia ha quedado en el olvido. 
La historia inicia con la reina de Sienver, Cenixa, quien planea hacer una fiesta al Príncipe Dawlam, heredero a la corona. Más en otro lugar, una chica llamada Adbyn trata de huir de sus extrañas visiones. Corre a través del bosque sin rumbo fijo, hasta que llega a un claro mágico, con un rio y bellos árboles. Al comer de un fruto, se queda inconsciente, y es encontrada posteriormente por un joven llamado Yeneard. Éste la lleva a su casa, donde su hermano Loset reconoce a Adbyn. La muchacha despierta, y les cuenta, a regañadientes, lo sucedido a los hermanos. Yeneard insiste en que deben hablar con el más sabio en Sienver, el anciano Soamer. 
Yeneard y Adbyn llegan al castillo y son recibidos por el Príncipe Dawlam, quien queda profundamente impresionado por Adbyn. A pesar de todo, no permite que vean al sabio, y les dice que regresen al día siguiente. Cuando regresan, Adbyn habla con el sabio. Luego Dawlam le confiesa su amor, pero Adbyn ya está perdidamente enamorada de Yeneard. 
Dawlam le promete a Adbyn que le contará a todos acerca de sus visiones, pero al llegar el día acordado la traiciona. Adbyn enojada trata de rectificar las cosas. Dawlam intenta detenerla pero Yeneard lo golpea. Es entonces cuando Cenixa lo reta a salir de las murallas de Sienver y traer un objeto, el más valioso, de cada reino existente. Pero primero deberá hacer un escudo con las escamas de dragón que se encuentran en la montaña más alta de Sienver. 
Yeneard consigue hacerse con las escamas, con la ayuda de su hermano Loset. El día de su partida es muy triste para Adbyn y su hermano Loset, pero los habitantes de Sienver guardan muchísimas esperanzas con él. 
Nudo: Yeneard parte de Sienver para cumplir la misión encomendada por Cenixa. En su camino se le atraviesa un extraño animal que Yeneard desconoce, por lo que no advierte lo peligrosa que es. El animal ataca a Yeneard, y éste puede morir, pero gracias a la ayuda de Soamer, Yeneard se recupera y sigue adelante. 
El primer reino a donde llega es el reino de Fempria, cuyos habitantes parecen ser hadas. Yeneard pide hablar con su reina, pero esta se encuentra hibernando, por lo que Yeneard debe esperar un mes. Durante su estancia en Fempria conoce a dos niños, Rojem y Macarle, y ayuda a los aldeanos del reino en lo que puede: cargando leña, reparando techos, etc. 
Llega el día de la reunión con la reina fempriense, y Yeneard le pide lo más valioso para su pueblo: una rosa de hielo de su jardín. La reina Nísgali se muestra escéptica al principio, pero ya que las persona de Fempria hablan muy bien de él, decide darle un voto de confianza y le entrega la preciada flor. 
Continúa Yeneard con su viaje, y antes de llegar al siguiente reino, es arrastrado por la corriente de un río que está embrujado. Una mujer de Susmabu llamada Ycnega lo auxilia, y lo lleva a la aldea. Pero aquí no lo tratan bien, y Yeneard termina en un calabozo. Mientras tanto, la mujer se debate internamente entre romper la maldición del río o convertirse en bruja, algo que ella definitivamente no quiere. 
La mujer decide hacer el sacrificio y realiza el desencantamiento. Para mejora de las cosas, Yeneard es sacado de prisión por el vocero del Rey de Susmabu, y llevado ante su corte. Allí, el rey le entrega lo más valioso para ellos, una esfera que proviene del Sol. Además, el rey le da a Yeneard un consejo acerca de su escudo de escamas de dragón.
Más adelante en su camino se encuentra con tres bandidos que lo atacan, pero al ver su escudo, se sorprenden y lo llevan a su ciudad. Así llega a Tralmo, donde al parecer no hay gobernante. Yeneard se dirige al castillo, donde solo se encuentra Olausria, una chica de dieciséis años quien debería ser la reina de Tralmo, pero se rehúsa debido a su inexperiencia y juventud. Yeneard le ayuda a comprender que debe tener valentía y fe para poder sobrellevar la gran responsabilidad de ser un líder. 
Olausria entiende y la coronan como Reina de Tralmo. Luego entrega a Yeneard lo más preciado para su pueblo: un medallón con un rubí como gema. Yeneard se lo agradece y sigue hacia su próximo destino. 
Llega entonces a Bogars, donde se encuentra más aventuras. Aquí conoce a Ilancia, quien esta hechizada, y tiene un amor casi imposible. Paralelamente, los reyes de Bogars, el rey Evant y la reina Irimel deciden adoptar al pequeño Hopner, un huérfano al que le tienen mucho cariño. Precisamente es Hopner quien les da la noticia de la llegada de Yeneard, y la primera en hablar con él es la reina Irimel. 
Mientras los reyes deciden si creerle o no a Yeneard, éste ayuda a Ilancia a que se dé cuenta que el amor de Balmortvi, su amado, es más fuerte que cualquier embrujo. Una mañana, Ilancia despierta liberada del hechizo, y con su belleza recuperada. Es entonces cuando busca a Balmortvi y se queda con él, esta vez para siempre. Al mismo tiempo los reyes deciden darle a Yeneard su objeto más preciado, una estrella mágica. 
Yeneard sigue con su camino y llega a una especie de cueva. Pero resulta que no es una cueva, sino el nido de un ave gigante que se siente amenazada y ataca a Yeneard. Éste cae del nido, y para empeorar, un felino salvaje lo ataca. Es entonces encontrado por un duende y su dueña, quien también es la única poseedora de un unicornio azul. Cuando encuentran a Yeneard, él está casi muerto, pero las lágrimas del unicornio lo reviven. Yeneard entonces sigue adelante.
La siguiente ciudad, Casmoia, está en ruinas. Todos sus hombres, incluyendo niños y ancianos se encuentran enfermos, víctimas de un grave hechizo. Yeneard hace hasta lo imposible para ayudarlos, y con la ayuda de una bruja y siete guerreros de Bogars logran liberar al rey Natarniel, verdadero rey de Casmoia. Natarniel se debate a duelo con el usurpador Zaviv. Este muere en la pelea, y Casmoia es libre entonces. El rey Natarniel le entrega a Yeneard lo más valioso: una lagrima congelada. 
Yeneard continúa su viaje hacia Lantabo. En Lantabo existe un mar, algo que Yeneard jamás había visto. El castillo se encuentra en una isla que se encuentra conectada a tierra a través de un puente, pero para atravesar el puente se debe contestar un acertijo. Yeneard lo intenta, muy seguro de sí mismo, pero falla. 
Busca ayuda de unos sabios hermanos que controlan los elementos del agua, aire y fuego. Estos le dicen que utilice una barca y atraviese el Mar de Lantabo, pero deberá enfrentarse a un monstruo marino. Yeneard no le toma importancia y se embarca una vez más en la aventura. A mitad del camino, un dragón empieza a emerger del agua, pero Yeneard se mantiene firme. El dragón desaparece misteriosamente, tal como llego. Yeneard llega al castillo y habla con el rey, quien le entrega el objeto más valorado: un espejo mágico.
Desenlace: Yeneard ve prácticamente finalizado su camino, por lo que continua por un sitio desértico para llegar rápidamente a Sienver. En medio del camino se topa con una bruja llamada Koasira, quien le asegura que ella le ayudará a llegar a Sienver. La bruja además le cuenta su verdadero origen: Yeneard es el heredero al trono de Sienver, pero le era desconocido debido a que su madre murió al momento de su nacimiento, y Cenixa, cegada por los celos, mandó a que lo abandonaran en el bosque, para ella entonces casarse con el rey de Sienver. 
A pesar de todas las revelaciones, Yeneard tiene que descifrar el mensaje detrás de todos los objetos mágicos de cada ciudad. Al final descubre que los objetos en conjunto significan Vida y Amor. Satisfecha Koasira, abre un portal y aparecen en medio de la plaza, interrumpiendo la desdichada boda de Dawlam y Adbyn. Por supuesto, Adbyn corre a los brazos de Yeneard, y éste le comunica a todos los habitantes de Sienver lo que averiguo durante su viaje. Todos se sorprenden, pero al ver que Yeneard no guarda rencor alguno hacia Cenixa, la perdonan. 
Koasira y Soamer, antiguos amantes, fueron separados por las murallas. Ambos vuelven a ser jóvenes, y hacen desaparecer el muro. Yeneard es coronado como rey de Sienver. A su coronación acuden los reyes de todas las ciudades, y así Yeneard es proclamado Rey de Melineax. 

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