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Lectura Y Notas Actividad 4 Comparacion


Enviado por   •  16 de Enero de 2014  •  547 Palabras (3 Páginas)  •  1.396 Visitas

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Lectura y notas unidad 4 actividad 4 “San Antoñito” de Tomás Carrasquillo y “Anacleto Morones” de Juan Rulfo.

En ambas lecturas podemos apreciar en cierta medida el fanatismo religioso, principalmente en pueblos con poca educación y donde la autoridad es la iglesia, combinando la falta de ocupación verdadera de los personajes descritos, aun cuando son de diferentes tiempos las dos narraciones terminan siendo muy parecida en el tema religioso y la devoción y cerrazón de los personajes para ver la realidad de las cosas.

Los valores creo que están un tanto distorsionados ante la exageración de su devoción religiosa, otros están escondidos a la vista de quienes no quieren ver la realidad por ejemplo insinúa una relación no muy normal entre “Aguedita y Damian” “En tales devaneos y campañas llegó a engranarse en íntimas relaciones y compañerismos con Damiancito Rada”

Pero al ser santo este último pues quien imaginaria que se portara de una forma no muy correcta con Aguedita, o con la criada de la señora que más adelante le ofreciera su casa y comida para seguir con sus estudios teológicos. “Por la noche llaman a Candelaria al rezo y no responde; búscala y no aparece: corren a su cuarto, hallan abierto y vacío el baúl... Todo lo entienden”

Despertando algunos ardores entre las mujeres devotas del pueblo. Como la hermana de “Doña Pancha” “Fulgencita se daba a mimarle el cuerpo endeble que aprisionaba aquella alma apenas comparable al cubrecama consabido” Doña Pacha, en su misma adhesión al santico, se alarmaba a menudo con los mimos y ajonjeos de Fulgencia, pareciéndole un tanto sensuales y antiascéticos tales refinamientos y tabaqueos.

El valor falso de la pureza que profesan en nombre de la religión pero que termina siendo solo apriencia como en la que pancha se queda la noche con lucas Lucatero, “Pues vámonos convenciendo los dos. Al cabo qué pierdes. Ya estás revieja, como para que nadie se ocupe de ti, ni te haga el favor.

—Pero luego vienen los dichos de la gente. Luego pensarán mal.

—Qué piensen lo que quieran. Qué más da. De todos modos Pancha te llamas.

—Bueno, me quedaré contigo; pero nomás hasta que amanezca. Y eso si me prometes que llegaremos juntos a Amula, para yo decirles que me pasé la noche ruéguete y ruéguete. Si no, ¿cómo le hago?”

O ven una realidad que no es, un santo que duerme con doncellas y consuela mujeres durmiendo con doncellas, ven lo bueno donde no lo es.” — ¿Sí? Y qué me dicen de las demás. Dejó sin vírgenes esta parte del mundo, valido de que siempre estaba pidiendo que le velara sueño una doncella.

—Eso lo hacía por pureza. Por no ensuciarse con el pecado. Quería rodearse de inocencia para no manchar su alma.

—Eso creen ustedes porque no las llamó.

—A mí sí me llamó

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