Los cuatro acuerdos.

LOS CUATRO ACUERDOS

Los cuatro acuerdos es un libro escrito por Miguel Ruiz que está basado en la sabiduría de los antiguos toltecas.

Nos dice la manera de ver el mundo por cada ser humano para tener un equilibrio personal, emocional, mental y social.

Es un libro que su tema principal seria la superación personal, Miguel Ruiz nos dice que llevemos a la práctica los cuatro acuerdos para que nos de el equilibrio en todos los ámbitos de nuestra vida.

Para poder lograr este equilibrio, debemos de entender que el ser humano tiene las creencias que adquirimos por nuestros padres pero estas creencias no son siempre las mejores.

De igual forma podemos cambiar estas creencias y así cambiar o forjar nuestra propia felicidad.

Nos menciona a la conciencia como juez, es la que nos dice lo que está mal o bien y así nos hace reflexionar lo bueno y lo malo de nuestras vidas.

Desde hace mucho tiempo incluso antes de que nuestros abuelos o padres de nuestros abuelos nacieran ya existían reglas y/o conductas que nos van a inculcar.

Nunca se nos preguntó o se nos dio la oportunidad de elegir si eran buenas o si no eran de nuestro agrado,  de creer o no creer en ellas, ni siquiera tuvimos la oportunidad de elegir nuestros nombres, pero ahora ya con conciencia podemos elegir, decidimos que creer  o que es lo mejor para nosotros..

La mayoría de estas conductas las hemos seguido sin saber que sean reales o verdaderas y si estas nos afectan es porque todas estas cosas nos afectan o tratamos de llevarlas a como nos dijeron que eran.  

Si no nos gustan estas conductas o creencias debemos cambiarlas por nuestra voluntad, aquí es donde entran los cuatro acuerdos, forjaremos nuestros criterios en adoptarlos y si es que los convertimos en hábitos fundamentales de nuestras vidas, día a día que cambiaran por completo todo lo que hemos vivido, sabremos qué es lo que amamos, lo que queremos creer y tendremos la libertad de ser quien somos sin temor a equivocarnos y encontrar felicidad en cada cosa que realicemos.

Primer acuerdo.

Lo que somos y lo que sentimos lo demostraremos con palabras. El primer acuerdo que tenemos que volver un habito en nuestra vida es SE IMPECABLE CON TUS PALABRAS.

Tal vez sea el acuerdo más “fácil”  de llevar acabo pero sería con el que más podemos tropezar además de ser el más poderoso de los cuatro.

Las palabras son muy poderosas tanto para bien como para un mal, básicamente son un arma de doble filo, es una magia tan poderosa que puede cambiar vidas o destruirlas.

Durante la domesticación las personas que estaban a nuestro alrededor daban su opiniones sobre nosotros sin pensarlo, esto nos pudo haber afectado y se vive con el miedo que provocan esas opiniones.

Hay que usarlas con mucha razón, dependerá de cómo lo hagamos, cualquier cosa que digamos puede ser perjudicial hacia nosotros, la clave es no caer en este error no darle las razones a nuestro propio juez pero aun así pueden ser perjudiciales hacia otras personas que sería el peor erro dañar a otros con lo que dices.

Una vez que sabemos lo poderosas que pueden ser nuestras palabras debemos enfocarnos en cómo nos expresamos, dado que las palabras tendrán la fuerza para dañar sentimientos o energía  de tal forma que podamos afectar a quien recibe esas palabras.

También nos damos cuenta que somos libres del poder de las palabras de otras personas hacia nosotros. No habrá nada que nos dañe u oportunidad al juez porque sabremos que las palabras son solo eso….. Palabras.

Nuestras palabras siempre tienen que ser apropiadas, debemos emplearlas para compartir amor empezando por nosotros y hacia los demás.

“utiliza las palabras apropiadamente. Empléalas para compartir amor. Usa la magia blanca empezando por ti”.

Segundo acuerdo:

NO TOMARSE NADA PERSONAL.

Tomarnos las cosas de modo personal es ser egoísta el mundo no gira a nuestro alrededor, pase lo que pase  tomarnos las cosas de modo personal es es cuestionarnos a nosotros mismos, pero está mal que hagamos eso, sabemos quiénes somos y aunque la situación  o el entorno nos lleve a algo distinto de lo que somos, nunca será lo real de nosotros porque solo nosotros nos conocemos.

Pero incluso nosotros no nos conocemos a la perfección, por lo que tampoco debemos tomarnos nada personal, nada que surja de nuestro interior, no debemos hacernos la víctima o victimizarnos porque es cuando nuestro juez actúa.

Si nos tomamos algo de forma personal seguramente es porque lo que dicen de nosotros es verdad o estamos de acuerdo y es donde entra la magia negra, nos hará sentir a lo que llama Miguel Ruiz como el sueño del infierno.

Tomarnos las cosas personalmente nos pone en una situación de debilidad donde las demás personas podrán usar su magia negra hacia nosotros y es más fácil sentirnos mal por una simple opinión que se alimenta del veneno y ese comentario lo tomamos como nuestro.

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