Más desmovilizados y menos desempleo

                          Más desmovilizados y menos desempleo

        Durante los últimos cuatro años en Colombia el presidente Juan Manuel Santos ha estado en búsqueda de la paz, sin embargo esta no ha llegado. A pesar de que Colombia entera depositara la confianza años atrás en la Constitución Política de 1991, la cual prometía que la paz llegaría, “La Constituyente se convirtió así en la esperanza encarnada de la paz…” (Lemaitre Ripoll, 2009) la guerra no llegó a su fin, por esta razón en el 2012 se iniciaron los diálogos con las FARC para ponerle fin a este conflicto, lamentablemente esto desato más controversia que unidad en el país. En el presente año el gobierno Colombiano y las FARC llegaron a un acuerdo en el que se listaban bastantes beneficios para los desmovilizados. Cuando estos acuerdos fueron publicados, gran parte de los colombianos los rechazaron por sentirse en desacuerdo con la cantidad de beneficios que tendrían estas personas; considerándolos injustos. En tanto a la opinión de los empresarios y empleadores, después de que portafolio.com publicara la primera encuesta empresarial de paz, se pudo observar, que un 55 % de los empresarios Colombianos está a favor de las negociaciones por la paz y que el 85 % piensa que un acuerdo impactará positivamente en la inversión extranjera. Así mismo, el 72% piensa que traerá mayor crecimiento económico. Cuando se les pregunto si estaban dispuestos a colaborar con la reinserción laboral, el 52 % de los empresarios dijeron que sí. (Portafolio.com, 2015). Gracias a lo anterior se puede observar que más de la mitad de las compañías en Colombia están dispuestas a dar una segunda oportunidad a estas personas. Teniendo en cuenta lo anterior, se podría afirmar que el principal beneficio que traería la reinserción, sería que la tasa de desempleo en Colombia disminuiría.

        Una cantidad importante de compañías en Colombia sabe que los desmovilizados son seres humanos merecedores de una segunda oportunidad y no tienen problema en contratarlos. En una entrevista realizada al  señor Juan Pablo Castillo, director de asuntos corporativos de Sodexo (compañía que ofrece servicio de incentivos y beneficios) explicó que en su compañía han concluido que las personas del campo o en este caso guerrilleros, son personas comunes que después de realizar cursos o terminar sus estudios son aptos para trabajar dentro de la empresa. Además, comenta que cada seis meses la empresa realiza reuniones para mirar como se esta desempeñando cada persona, hablan de como se sienten y que cosas tienen por mejorar (Bluradio, 2016). Por lo tanto, las empresas pueden considerar la posibilidad de incluir a los desmovilizados en las labores dentro de la misma, siempre y cuando estas personas se comprometan a hacer cursos que sirvan para el cargo que se les será asignado, terminen sus estudios y se les haga un seguimiento constante.

        Claro que lo anterior no es un gran problema, puesto que Frank Pearl, economista y experto en reintegración social de personas y grupos alzados en armas, explicó durante una entrevista ciertas especificaciones del acuerdo de paz que hacen referencia a este tema. Los desmovilizados recibirán un “salario” bajo unas condiciones especificas, “si luego de esos 24 meses iniciales, si no están trabajando o en un proyecto productivo, la persona recibirá hasta 480 mil pesos, pero es necesario que esté estudiando, capacitándose, o que esté en la ruta de la reintegración a la sociedad.” (Pearl, 2016). Por lo anterior, se puede inferir que los desmovilizados deben tener un buen proceso de reinserción y capacitación para que puedan ser activas en la sociedad. Ademas, estas personas necesitan el dinero; por lo que no se pueden arriesgar a que el gobierno se los quite y debido a esto cumplirán con todo lo estipulado. Es necesario que el acuerdo de paz se firme lo antes posible, hasta que esto no ocurra el proceso de reinserción laboral será más complicado, pues mientras la guerra siga, en la mentalidad de los colombianos seguirá la idea de que estas personas son terroristas (www.reintegracion.gov.co, 2014). Entonces, el proceso de paz, la reinserción laboral y la resocialización no serán exitosos.

        El planteamiento del proceso de paz facilitará el proceso de contratación de los reinsertados, pues como lo afirma el secretario general de la ONU “La reinserción Consiste en la asistencia ofrecida a integrantes de grupos armados durante la desmovilización pero antes del proceso de reintegración. A través de ésta se ejecutan medidas asistencialistas de corto plazo, que permiten cubrir las necesidades básicas inmediatas de los desmovilizados y sus familias, tales como pensión, alimentos, ropa, refugio, servicio médico, educación a corto plazo y entrenamiento para el empleo” (Secretario General de la ONU, 2005). De esta manera, los reinsertados tendrán unos derechos. Dentro de estos, se encuentra la educación y el entrenamiento para el empleo, por esta razón, cuando se reintegren tendrán los conocimientos necesarios para cumplir una labor.

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