Olvidar y ser olvidado. ¿Qué ocurre cuando una persona es olvidada?

Olvidar y Ser Olvidado

¿Qué ocurre cuando una persona es olvidada? ¿Sólo se va? ¿Desaparece?

De alguna forma es así, cuando una persona es olvidada, desaparece para la persona que olvidó. Es como si nunca hubiera existido, y, en algún momento, cuando se habla del tema, reaparece como un recuerdo lejano. Suficiente para recordar, muy poco para revivir.

En Memorias de un amigo imaginario por Matthew Dicks, el autor nos regala un ejemplo bastante fantasioso, pero extremadamente claro de cómo nosotros mantenemos vivas a las personas que nos rodean. Y que si en algún momento llegamos a olvidarlas, no existirán más para nosotros.

El libro narra la “vida” de Budo, el amigo imaginario de Max. Max tiene algunos problemas para socializar con las personas, lo que su mamá llama “situación especial” pero que su padre no está dispuesto a aceptar.

Budo tiene mucha suerte para ser un amigo imaginario, tiene la forma casi exacta de un humano, una capacidad enorme de aprender, e incluso puede atravesar puertas.

Desafortunados sucesos llevan a Budo a un arduo recorrido para rescatar a Max. Y aunque al amigo imaginario le da mucho miedo que su vida termine, teme más porque la de Max corra algún riesgo.

Budo debe convencer a Max de que él no es real, y de que tiene que salvarse a sí mismo. Dándole a su amigo el valor necesario para escapar del peligro, Budo se pone la soga al cuello, elimina cualquier esperanza de sobrevivir.

Para el final del libro, Max es mucho más autosuficiente de lo que era. Ya no le afectan los cambios, y sonríe muy a menudo. Y aunque Budo no lo desee así, se desvanece como la nieve cuando llega la primavera

¿Cuál es la razón por la cual Max olvida a Budo?

Sencillo, no lo necesita más.

Entonces, caemos en la cuenta de que para no olvidar a alguien, debemos  necesitarla.

En ocasiones así son las cosas, cuando ya no necesitamos a alguien, se desvanece. No de una forma literal, pero sí de nuestra vida.

Es difícil el simple hecho de imaginarlo, pero llegará un momento en el que todos seremos olvidados, no habrá nada ni nadie que nos recuerde, nadie que llore o ría por nosotros.

Poco a poco olvidamos a las personas, comenzamos con sus rasgos físicos, su voz, continuamos con su actitud y los momentos especiales que compartimos. Así hasta que olvidamos por completo.

“Miro a Max. Mi amigo. El niño que me creó. Quisiera enojarme con él por haberse olvidado de mí, pero no puedo. Lo quiero. Cuando yo deje de existir, nada tendrá importancia, pero creo que en cierta manera seguiré queriendo a Max.”-(pág. 421)

Lo contrario ocurre cuando una persona fallece, físicamente se va, pero tratamos de mantenerla viva mediante recuerdos.

Un ejemplo de esto es el libro del famoso escritor John Green BUSCANDO A ALASKA. A la mitad de la historia, el entrañable personaje Alaska Young fallece, dejando un gigante misterio bajo su muerte.

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