POEMA A LOS NIÑOS HÉROES
Enviado por garzalucero25 • 24 de Junio de 2014 • Síntesis • 761 Palabras (4 Páginas) • 1.431 Visitas
POEMA A LOS NIÑOS HÉROES
Miguel Ángel Pérez Rojas*
Fue un 13 de septiembre
de mil ochocientos cuarenta y siete,
de recordar me conmueve
como si fuera el presente.
Seis entusiastas estudiantes
algunos de ellos casi niños,
demostraron ser valientes
ante fieros enemigos.
Al frente de todos ellos
un inteligente general,
de nombre Nicolás Bravo
que llegó a ser mariscal.
Era una batalla injusta
fue una lucha desigual,
de niños de experiencia escasa
contra un poderoso rival.
Todos los jóvenes cadetes
con coraje y pundonor,
ante sangrientos combates
hacían frente al invasor.
Sobresaliendo Juan Escutia
realizando gran hazaña,
en aquél histórico día
se envolvió con nuestra enseña.
En ese acto de heroísmo
y antes de que fuera tocada,
se arrojó al precipicio
para no ser mancillada.
No cualquier país tiene la dicha
como México, de Niños Héroes,
por eso desde esa fecha
viven en nuestros corazones.
LOS NIÑOS MÁRTIRES DE CHAPULTEPEC
Como renuevos cuyos aliños
un viento helado marchita en flor,
así cayeron los héroes niños
ante las balas del invasor.
Allí fue... los sabinos la cimera
con sortijas de plata remecían;
cantaba nuestra eterna primavera su himno al sol: era diáfana la esfera;
perfumaba la flor..., ¡y ellos morían!
Allí fue... los volcanes en sus viejos albornoces de nieve se envolvían,
perfilando sus moles a lo lejos;
era el valle una fiesta de reflejos,
de frescura, de luz... ¡y ellos morían!
Allí fue... Saludaba al mundo el cielo,
y al divino saludo respondían
los árboles, la brisa, el arroyuelo,
los nidos con su trino del polluelo,
las rosas con su olor ...¡y ellos morían!
Morían cuando apenas el enhiesto
botón daba sus pétalos precoces,
privilegiados por la suerte en esto:
que los que aman los dioses mueren presto
¡y ellos eran amados de los dioses!
Sí, los dioses la linfa bullidora
cegaban de esos puros manantiales,
espejos de las hadas y de Flora,
y juntaban la noche con la aurora
como pasa en los climas boreales.
Los dioses nos robaron el tesoro
de esas almas de niños que se abrían
a la vida y al bien, cantando en coro...
Allí fue... la mañana era de oro,
Septiembre estaba en flor... ¡y ellos morían!
Como renuevos cuyos aliños
un viento helado marchita en flor,
así cayeron los héroes niños
ante las balas del invasor.
No fue su muerte conjunción febea
ni puesta melancólica de Diana.
sino eclipse de Vésper, que recrea
los cielos con su luz, y parpadea
y cede ante el fulgor de la mañana.
...