Rebelion en la granja ensayo
Enviado por cajaabierta • 1 de Abril de 2016 • Ensayo • 1.666 Palabras (7 Páginas) • 460 Visitas
Rebelión en la granja
Era de noche en la granja Manor y el Sr Jones estaba cerrando las puertas de los graneros, sin embargo por la borrachera que traía olvidó cerrar las ventanas; fue hasta su casa y tomo un último vaso de cerveza, para luego subir a su recamara donde ya se encontraba la señora Jones. Mientras tanto en el granero se estaban empezando a reunir los animales, todos convocados por el cerdo más viejo “mayor” quien quería contarles sobre su sueño de la noche pasada. Fueron llegando poco a poco y contemplaban al gran cerdo acostado en una especie de pedestal improvisado de heno. Cuando ya estaban todos empezó su comunicado, pero no empezó con su sueño, sino con su experiencia de vida; Mayor era uno de los más viejos, con doce años de edad había superado sus propias expectativas de vida, por eso mismo necesitaba que todos sus amigos supieran a lo que se enfrentaban, se dieran cuenta de la vida que les estaba tocando vivir al servicio del hombre, una vida llena de injusticias y crueldades donde no importaba en realidad el bienestar de los animales sino del hombre mismo, Mayor creía que el suelo de Inglaterra era lo bastante fértil como para ofrecer una vida mejor a los animales de ahí, sin necesidad de estar atemorizados por el hombre ni mucho menos servirle; el discurso empezaba a tornarse acalorado conforme avanzaba, estaban entendiendo el punto a que quería llegar, sin embargo tuvo que decirlo: “Revolución”, de eso se trataba todo, de una revolución que beneficiaría a cada bestia, que los haría finalmente libres; concluyó su discurso narrando su sueño, que empezaba con el cuando apenas era un cerdito, con su madre y rodeado de otras cerdas que cantaban tres palabras de una canción, “Bestias de Inglaterra”, por muchos años la había olvidado pero regreso a él en el sueño y se dispuso a cantarlo, poco después ya todos los animales se encontraban cantándola con gran emoción, lo que hizo que el Sr. Jones se despertara y disparara contra el granero creyendo que un zorro había logrado escabullirse en el.
No mucho tiempo después murió mayor, sin quejarse por haber tenido una buena vida, pero los que seguían en la granja no corrían con la misma suerte, su amo jones acababa de perder una gran suma de dinero, lo que lo hizo decaer y dejar sus obligaciones para dedicarse a beber.
Meses después el día de San Juan, el que a pesar de todo se recordaría con gran entusiasmo llegó, una día antes Jones y sus hombres habían ido a celebrar al pueblo y no se les vio hasta el medio día siguiente, olvidaron que no solo ellos necesitaban alimento, los animales tenían tanta hambre después de trabajar arduamente como siempre lo hacían y sin recibir aunque sea una porción de comida, movidos por el hambre rompieron las puertas del almacén y comieron cuanto pudieron, el ruido hizo que Jones y sus hombres salieran con látigos para amansar los animales, lo que no esperaban era que reaccionaran tan violentamente contra ellos , lo que los ahuyentó, una vez que salieron de la vista su vista se quedaron sorprendidos al ver lo que había ocurrido, acababan de echar a los hombres de la granja y ahora les pertenecía, todos estaban muy felices, corrieron por todos lados y celebraron, en una hoguera quemaron todos los látigos del Sr Jones y durmieron profundamente el resto de la noche.
La mañana siguiente se sentían mejor que nunca, comieron dobles raciones y celebraron su victoria de la noche anterior, pero una vez que cesó la celebración empezaron a preguntarse se sucedería con la cosecha, a lo que dos cerdos, Snowball y Napoleón respondieron que la cosecharían ellos mismos, como ahora no había hombres tendrían que hacerlo todo ellos mismos, aunque al principio tuvieron muchas dificultades porque las herramientas estaban adecuadas para los humanos y no para ellos, pero los cerdos idearon formas para que aun así pudiera llevarse a cabo y en un menor tiempo que el que le tomaba a Jones y a sus hombres.
Pasaron los días y todos estaban satisfechos con su nueva vida, comida y descanso adecuado, había una paz que nunca antes se había sentido, cada animal colaboraba sin quejarse en todas las tareas que tuvieran que realizarse, a excepción de los cerdos, quienes habían asumido el mando de la granja y siempre se encontraban en reuniones sobre lo que se haría y como se haría, que comunicaban los domingos por la mañana, el día destinado al descanso y para tomar acuerdos de las próximas semanas.
El resentido señor Jones mientras tanto se encontraba en la taberna del pueblo difundiendo rumores y burlándose de lo que ahora era “granja animal” como la habían bautizado los propios animales, creían que no durarían mucho tiempo sin un hombre que se encargara de hacerlos trabajar, pero no se esperaban que después de un mes de su ausencia las cosas en granja animal fueran bien, claro que se rumoraba lo contrario, pero únicamente por envidia y temor se crearon esas falsas ideas que ellos mismos habían visto que no eran verdad. Molesto Jones reunió a una docena de hombres que fueron armados con palos hacia la granja, con el fin de recuperarla y poner en su lugar a los animales, sin embargo no contaban con que ellos estuvieran preparados para un ataque de su antiguo amo, así comenzó la lucha en el granero de las vacas, algunos animales salieron heridos, pero nada comparado con los golpes que se habían llevado los hombres, aunque Snowball había sido herido con la escopeta de Jones y una oveja había muerto, estaban ahora más felices que nunca al haber ganado su segunda batalla.
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