¿Te gustó, sí o no? ¿por qué?, primer argumento, segundo argumento, conclusión: Don Juan Tenorio

DON JUAN TENORIO.

José Zorrilla

1.- ¿Te gustó, sí o no? ¿por qué?, primer argumento, segundo argumento, conclusión:

Si, en definitiva, el texto fue de mi agrado; esto se debió a que anteriormente había visto la obra teatral y desde ahí me había gustado, me parece una obra muy buena, me agrada la forma en la que el autor al principio te da a entender que Don Juan Tenorio es un mujeriego sin sentimientos y que jamás ha llegado a sentir “amor” por alguna mujer, sino que simplemente juega con ellas y después las deja, pero que al final nos muestra que a pesar de que una persona sea así, nunca es tarde para cambiar, abrir los ojos y comenzar a hacer lo correcto, esto lo notamos cuando realmente parece que Don Juan si está profundamente enamorado de Doña Inés, tanto que hasta va a llorarle a los pies de una estatua que esta sobre sus restos; esta obra nos muestra que ni la persona más vil y despiadada puede “zafarse” de las garras del amor, que pronto llega esa persona que lo hace cambiar para bien y que lo hace colmarse de una felicidad infinita.

Este fue un libro que en ciertas partes me confundió, sobre todo en el momento en el que aparece Doña Inés y Don Juan Tenorio parece que está enamorado de ella, pero al mismo tiempo parece que no; esto me provoco un gran conflicto debido a que no podía deducir con claridad si en realidad la amaba o sólo estaba jugando con sus sentimientos; al final llegue a la conclusión de que, si la amaba, pero que uno como lector llega a “hacerse bolas” por la reputación que precede a Don Juan.

En este pequeño texto no tuve mucho conflicto para entender lo que el autor quería decir, creo que esto se debió a que lo leí en voz alta e intentando hacer la voz de cada uno de los personajes, aparte de que me concentré muchísimo en dicha lectura y me logré sumergir bastante o al menos lo suficiente como para entenderla “bien”. No puedo negar que en ciertas ocasiones tuve que auxiliarme de un diccionario para entender varias palabras plasmadas en la lectura, a pesar de eso, creo que ya no tengo que ir tan seguido al diccionario pues hay muchas palabras que ya conozco porque ya he visto en alguna de las lecturas anteriores. Opino que esta clase de lecturas son muy buenas para nosotros debido a que ayudan a ampliar nuestro vocabulario y nuestro conocimiento sobre algunas de las obras clásicas más importantes de España.

2.- Describe a los personajes:

- Don Juan Tenorio: Es el protagonista de la historia, es un personaje que al principio de la obra se muestra como alguien valiente, vil, cruel, egocéntrico, un mentiroso y un mujeriego, pero mientras más avanza la obra se va descubriendo quien es en realidad Don Juan o al menos va mostrando la poca humanidad que le queda al enamorarse de verdad de Doña Inés de Ulloa y al momento de aceptar todos sus errores y asumir las consecuencias de sus actos; él es hijo de Don Diego Tenorio. Podemos decir que de este personaje se extrae el término “Don Juan” con el cual se busca describir a un hombre que juega con los sentimientos de las mujeres, que las enamora y después las abandona.

- Doña Inés de Ulloa: Es una mujer de 17 años, ella es muy noble, muy pura, no conoce el mundo pues jamás ha salido del convento en el que se haya desde que era muy joven, de cierta manera podemos observar que su inocencia la vuelve un poco ilusa, pues ciegamente se enamora de Don Juan y hasta llega a morir a falta de su amor; ella carece de pecado, simplemente es una mujer “santa”; ella es hija de Don Gonzalo de Ulloa. Al final cuando Don Juan huye y la deja, ella tiene que regresar al convento en el cual muere de tristeza a falta del amor de Don Juan.

- Don Luis Mejía: Es un gran amigo de Don Juan. Durante su famosa apuesta se fue a Flandes donde se unió a un grupo de bandidos a los que más tarde traiciono y robo todo su botín. Cometió la mayoría de sus hazañas en Francia, pero perdió la apuesta con Tenorio y posteriormente su vida a manos de éste. El en cierto punto de la historia se enamora de Doña Ana de Pantoja y muere en manos de Don Juan pues esté lo reta porque le ha quitado la pureza a Doña Ana, robándosela una noche antes de que se casen.

- Doña Ana de Pantoja: Prometida de Don Luis Mejía, la cual, a tan solo unas horas de contraer matrimonio con Don Luis, se “mete” con Don Juan engañada, pues ella pensaba que era Don Luis.

- Don Diego Tenorio: Padre de Don Juan Tenorio, este deshereda a Don Juan pues se entera de la clase de persona que es su amado hijo, se decepciona de él y ordena que al momento de morir su gran mansión sea destruida para que en ese terreno se construya un panteón en el que se hallen los restos de las personas a las que mato Don Juan o a las que llego a “herir” y también dice que Don Juan es el único que no puede ser enterrado ahí, aparte de que tiene prohibida la entrada al panteón.

- Don Gonzalo de Ulloa: Él es el padre de Doña Inés de Ulloa, el cual cuando se entera como es Don Juan y a cuantas mujeres a engañado decide romper el trato hecho ya para que su hija, Doña Inés, despose a Don Juan; en una parte de la historia Don Juan le roba a su bella hija y cuando Don Gonzalo va en busca de ella para arrebatársela a Don Juan este lo mata para impedir dicho acto.

3.- Desarrolla la historia, hablando del inicio, nudo y desenlace:

La historia comienza cuando en el pueblo donde pasa la historia aparece un joven que lleva puesto un antifaz negro, este llega a una "taberna" y ahí se sienta en una mesa y se pone a escribir algo que al parecer es una carta para alguien, mientras hace esto varias personas que van llegando a la taberna y el dueño se le quedan viendo, entonces en eso llega un señor que es el comendador y pregunta por el dueño del lugar y cuando el comendador descubre quién es, le pregunta que sabe de la apuesta de Don Juan y Don Luis a lo que el dueño contesta que sólo sabe qué hace un año hicieron una apuesta y que se iban a ver esa noche en esa taberna antes de la última campanada de las 8:00 para ver quién había ganado, pero había dicho que no estaba muy seguro de que vinieran, que porque ninguno de los dos había llegado, entonces el dueño dejaba a el comendador y se iba, entonces llegaba otro señor y se sentaba en la mesa de la izquierda y ahí se quedaba muy silencioso; en eso el señor que estaba sentado en la mesa del centro con un antifaz, le hablo a su mozo y le ordeno que llevara la carta a alguien (nadie escucho porque se lo dijo al oído), después de que se fue el mozo, también se fue el Señor del antifaz. Después llego otro señor con antifaz justo cuando sonó la primera campanada de las 8:00 y después llego el otro, entonces se encontraron y comenzaron a dialogar entre ellos hasta que llegaron al punto de quitarse el antifaz y ver quiénes eran, en ese momento todos se dieron cuenta de que era Don Juan y Don Luis, después de eso se sentaron en una mesa que estaba en el centro y comenzaron a hablar sobre la apuesta mientras todos los que habían ido a escuchar que pasaba con la apuesta los observaban fijamente, se estaban diciendo a cuantas mujeres habían conquistado, enamorado y abandonado a lo largo del año, además de cuantas actos ilícitos o valientes habían hecho, al final de dialogar sobre ello, llegaron a la conclusión de que el ganador era Don Juan Tenorio, después de que acabaron de contar sus anécdotas inmediatamente se levantó de su asiento el señor comendador y le dijo a Don Juan que antes de su partida él le había prometido en matrimonio a su hija, Doña Inés, a su padre Don Diego, pero que después de haber escuchado todas las cosas que dijo haber hecho Don Juan ya estaba arrepentido y le dijo que jamás dejaría que su hija se desposará con alguien así, que antes la mataría, a lo que Don Juan respondió con un reto, le dijo que le robaría a su hija entonces y entonces discutían un rato y después se iba el comendador, seguidamente de la otra mesa se levantaba el señor misterioso y decía que él era Don Diego Tenorio, el padre de Don Juan, entonces él le decía que estaba muy decepcionado de lo que era su hijo y le decía que desde ese momento ya no era nada de él porque no merecía su áloe ni nada de él después de todo el daño que causo.

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