Tecnicas Que Facilitan La Comunicacion Humana

TÉCNICAS QUE FACILITAN LA COMUNICACIÓN HUMANA.

ESCUCHAR ES IMPORTANTE

El ser humano tiene una habilidad notable que ninguna otra especie posee: la habilidad para “sintonizar” y “desintonizar” lo que escucha. Esta habilidad también puede ser una gran desventaja.

Somos tan buenos para desintonizar lo que no deseamos oír, que muchos no hemos aprendido a sintonizar y captar lo que realmente se dice. Gran parte de lo que se dice es lo suficientemente importante para tomar un poco más de tiempo y considerar la habilidad para sintonizar y desintonizar en el momento oportuno. Esta habilidad se conoce como escuchar efectivamente.

Escuchar no es una habilidad natural, requiere entrenamiento para llegar a incrementarse.

Oímos desde el nacimiento, pero oír sonidos es diferente de escuchar palabras, “escuchar mensajes” no verbales y “escuchar los símbolos” de tal modo que los interpretemos correctamente.

Escuchar es el proceso de tratar de entender y comprender lo percibido; por consiguiente, es una parte de nuestro proceso mental.

Considérese que una persona normal habla a la velocidad de aproximadamente 125 palabras por minuto; sin embargo, puede escuchar, como promedio, aproximadamente cuatro veces la misma rapidez. Esto significa que la persona tiene mucho tiempo para pensar en otras cosas a la vez que escucha. Por ello, es común que cuando escuchamos, soñemos despiertos, discutamos interiormente, planeemos interiormente las respuestas, interpretemos los mensajes recibidos, anticipemos lo que van a decirnos e incluso inventemos cosas y completemos mensajes. Todos estos factores impiden escuchar activamente a quien se dirige a nosotros, lo cual provoca distorsiones en la comunicación en la comprensión del otro y en sus significados.

Para escuchar activamente, es necesario estar realmente presente, o sea, estar con y para la otra persona.

La presencia debe ser no sólo física, sino también psicológica, lo cual quiere decir estar ahí con el cuerpo, la mente, las emociones y los sentimientos, abiertos a la experiencia del encuentro con otro ser humano.

Algunos elementos importantes que facilitan escuchar activamente son los que siguen:

 Actitud corporal.

 Parafrasear y reflejar.

 Concentración.

 Respeto.

 Aceptación.

 Comprensión empática.

ACTITUD CORPORAL

Conscientes de que nuestro cuerpo envía continuamente mensajes, podemos afirmar que la posición corporal, la dirección de la mirada, el tono de voz, etc., indican interés o desinterés que tenemos en la persona que nos habla, así como en lo que nos comunica.

El primer paso que nuestro cuerpo debe dar para escuchar realmente al otro es observar atentamente.

La observación constituye una de las técnicas más antiguas para el estudio de la conducta, y también un instrumento importante en la comunicación humana; mediante ella podemos formarnos una imagen clara, precisa y objetiva de las cosas, las personas y las situaciones.

Observar a la persona que escuchamos es prestarle atención con todos nuestros sentidos centrados en ella.

Cuando la mirada anda errante, cuando todo lo que está a nuestro alrededor es lo que capta nuestra atención, el mensaje que enviamos es el de falta de interés por la persona que nos habla.

PARAFRASEAR Y REFLEJAR

Parafrasear es poder repetir, de cuando en cuando, las palabras clave que nos fueron dichas, y expresar con palabras propias lo que hemos comprendido del mensaje o la comunicación escuchada.

Reflejar, aunque puede compararse con el símil de servir como espejo a la persona que habla, no quiere decir repetir como loro lo que se nos dijo; sería como hablar a una grabadora que reproduce los mensajes fielmente, y no con una persona. El reflejo supone la comprensión del mensaje recibido y la expresión de sus contenidos más relevantes para el que habla.

CONCENTRACIÓN

Si deseamos escuchar, es necesario mantenernos concentrados en lo que se nos dice. Con mucha frecuencia, una palabra o un pensamiento que se nos expresa desata nuestra imaginación y ésta vuela a miles de kilómetros o de años de distancia.

RESPETO

Respetar a la persona es confiar en su capacidad para resolver sus problemas y descubrir la forma de salir adelante y solucionar las situaciones conflictivas que se le presentan.

Faltamos al respeto en el momento en que llevamos a la persona a sentir, pensar, responder o actuar como nosotros queremos que lo haga.

La respetamos al permitirle ser ella misma, responsabilizarse por su vida y en ese proceso podemos acompañarla.

ACEPTACIÓN

La aceptación de los sentimientos,

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