UN MUNDO RENACIDO

UN MUNDO RENACIDO

Era una  mañana  soleada y cálida, donde los colores, el sonido y el olor del lugar sobresalían, un espacio que no podía pasar por desapercibido. Un 14 de abril del 2018 se estableció la Feria Internacional de las culturas amigas, por décima vez instalada en la ciudad de México. A las seis en punto empecé a disfrutar de todo el lugar.

 Un sorprendente lugar representado por la música, la danza, artesanías y lo más emblemático para la  mayoría de los países, la comida. Conforme pasaban los minutos la experiencia y el conocimiento se hacían cada vez más y más presente, pues el contacto humano y la diversificación de culturas desprendieron un sentimiento especial en nosotros mismos ,pues ese fue el propósito de este festival, me fui dando cuenta de todo tipo de personas, de sus creencias, de sus ideologías, de sus habito y de toda su gente maravillosa, pues es lo que hace único el ser humano, no solo  compartir los mismos proceso orgánicos, sino que podemos tener aspectos exclusivos, que creamos a través del tiempo, y que compartimos con otros seres que están acostumbrados a vivir de diferente manera.

Los latidos de una sola especie denotaba en este lugar, diferentes personas de diferente color, origen étnico y diferentes culturas rodeaban esta parte de México, no sólo el sushi de China o la paella de España sobresalían, la papa a la huancaína de Perú, o el Bratwurst de Alemania, sino mucho platillos más que identificaban a más de  un país.

A las 12 de la tarde terminé de recorrer los lugares más comunes y famosos, probando su comida y en muchas ocasiones comprando prendas de vestir, como la shapka-ushanka, también llamado gorro ruso, aprendiendo cosas sorprendentes de cada cultura y de cada individuo.

Pasó el tiempo volando, y cada vez más me adentraba en los espacios de estas culturas, el tiempo era muy valioso, era como si fuese oro puro, pues cada minuto significaba un mundo por recorrer. A las 14 horas me dirigí a las diferentes exposiciones que se instalaron en este lugar, lugar donde mi pupilas se deleitaban con el hermoso arte que se exponen ciaba en tinta china y sobre el buen arte tibbetano : a  la esquina de estas exposiciones un grupo de gente rodeaba a un grupo de mujeres, la curiosidad  hizo que me dirigiera a este sitio ,donde más tarde observé a  mujeres con una belleza impresionante, vistiendo prendas de diseño italiano, me di cuenta que los prejuicios no estaban presentes en mi persona, ya que las modelos tenían diferentes tonos de piel y diferentes estaturas ,pero denotaban una belleza por igual, y no solo  belleza física, sino una belleza espiritual.

A las seis de la tarde, me empezaba a retirar del Zócalo, creyendo que había visto todo, me encontré con un escenario montado, donde mi arte favorito sobresalía, ese arte era la música, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, al escuchar el sonido grave del chelo, provocando una cara de felicidad en mí y al mismo tiempo, una sonrisa rodeaba toda parte de mi cara, sintiéndome por tercera vez consecutiva  vivo, sintiéndome feliz y complacido de toda mi gente.

Por último, decidí que el próximo año regresaré a este festival, pues me ayudó mucho en mui desarrollo humano y en mi personalidad altamente funcional, así como mis relaciones sociales, pues aprendí a eliminar prejuicios y conductas no correctas, ya que todos compartimos un mismo mundo, a pesar de que no somos iguales del todo, (somos únicos),somos seres racionales y capaces de crear un mundo renacido.

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