Ética en los medios audiovisuales

Alumno: Romero Zavala, Lizardo Rafael

Ética en los medios audiovisuales

Cada vez es mayor la población que cuenta con acceso a medios audiovisuales, tales como televisión nacional o de paga, plataformas de “streaming” y sitios web de contenido variado, y videojuegos, que también están considerados dentro de este amplio grupo es inevitable considerar que dichos contenidos influyen en la forma de pensar de la sociedad que lo consume, y a medida de su aumento también aumenta el contenido que podría no ser apropiado para los infantes (0-13 años), es por eso que es necesario una ética que establezca ciertos límites respecto a lo que se vaya a transmitir a los consumidores, ya que si se aplica de la manera correcta se lograría tener una comprensión de valores gradual según el individuo se vaya desarrollando.

Es necesario aclarar que existe contenido para específicos sectores o públicos objetivo, siendo: edad, sexo, ubicación, formación educativa, poder adquisitivo clase social y hábitos de consumo, siendo las clasificaciones más usuales edad y sexo; estas clasificaciones separan a grandes rasgos partes de la población que mostraran interés al contenido que se haga específicamente para ellos. Estás separaciones de contenido son fácilmente distinguibles ya que a medida que la edad del público objetivo va en aumento, las restricciones en cuanto a lo que se puede mostrar en ellas van en descenso, siendo así que para el contenido infantil es casi imposible encontrar personas proclamando groserías o en medio de actos violentos, caso contrario al contenido para adultos donde se pueden tocar temas más complejos como sexualidad, asesinatos, etc.

Los niveles de censura al contenido de cada país ha ido cambiando con el tiempo, siendo que en estas últimas décadas, se habla mucho de lo políticamente correcto, y, aunque no es algo que se limite solo a los medios de comunicación audiovisual, es algo que ha estado calando cada vez mas en los contenidos que se nos hace llegar, hay una línea muy delgada dentro de lo que políticamente correcto, fuera de esos límites se encuentra el contenido que ofende puede ofender a ciertos sectores de la población y habrán personas que trataran de censurarlo; se define políticamente correcto exactamente a eso, tomar todas las medidas necesarias para evitar ofender o poner en desventaja a una persona o agrupación de personas que comparten ciertas características, el propósito, dar visibilidad a sectores minoritarios que pueden ser separados por etnia, orientación sexual, nacionalidad, o género, y, aunque este ideal pudiese tener muy buenos resultados, llevado a la práctica no siempre resulta como se espera, ya que al darle a cierto personaje la característica particular de pertenecer a cierta minoría y hacer ver cómo es que esa minoría es tratada de manera distinta, se suele dejar de lado los otros aspectos que hacen interesante al personaje.

En el caso del contenido provisto por televisoras se puede tener muchas opciones en el caso de si se contrata un servicio de cable, donde existen canales específicos para infantes, niños y adolescentes, donde se regula bastante lo que los niños vayan a aprender viéndoles, en el caso de la televisión nacional, es casi nula la presencia de canales exclusivamente dirigidos hacia los niños, siendo que algunos canales destinan cierto espacio para caricaturas o programas educativos, sin embargo los demás espacios están dirigidos a otro público objetivo, pues se presentan temas más complejos pudiendo los niños ver algunos de estos programas pero con compañía de un adulto para que pueda explicarle las cosas que podrían ser confusas para el niño, tales son los casos de las miniseries, documentales y películas; luego existe contenido poco útil en cuanto a contenido del que se pueda aprender algo, tales como los programas concurso, reality shows y los programas de farándula, donde se puede ver contenido claramente poco ético, siendo el más notable el de los programas de farándula, donde sin consentimiento alguno se transgrede la privacidad de personas con cierto nivel de popularidad, exponiendo detalles de su vida privada y juzgando rigurosamente acciones que les afectan poco o nada a los que reportan estas “noticias”.

Es también un caso de falta de ética las series donde se retratan tragedias humanas, donde se muestran hechos históricos que marcaron a parte de la población y darle una perspectiva “cliché” buscando atraer la atención de todo tipo de público, dejando de lado la premisa principal con la que se concibió al proyecto en primer lugar, mostrando una falta de interés por mostrar empatía hacia los que sufrieron tal situación sino un claro deseo de lucrar y apelar a esquemas básicos; o el caso de programas “reality” que se disfrazan de programas concurso para poder atraer a todo tipo de público, donde se muestra una gran falta de valores, pero valiéndose de eso mismo para conseguir mas audiencia, y logrando que su mercancía y alcance suba, teniendo un gran éxito en el público infantil y adulto, quienes no dudan en seguir mirando estos programas e idealizar a personas con poco criterio ético y moral.

...