Como se da la Sobre verdad y mentira en sentido extramoral

REPORTE DE LECTUR: SOBRE VERDAD Y MENTIRA EN SENTIDO EXTRAORDINARIO

Por: adda magali vazquez nolasco, estudiante de criminologia

Mientras leía, pasaban tantos recuerdos e interrogantes por mi cabeza, que no puedo dudar que es una lectura donde deja muchas preguntas para realizar cada uno en su vida, y así replantear la nociones de verdad que podemos tener.

-Mamá si Dios creó al hombre y a la mujer entonces ¿Quién creó a Dios?- esa fue una interrogante que en una ocasión un niño le realizó a su mamá y esta no supo cómo responder. Con la lectura toma sentido todo esto, debido a que él niño no estaba criticando un ente sino quería comprender lo incomprensible, debido a que se le había estado enseñando que todo tiene nombre, concepto, significado y sentido para la vida, que eso era cierto y la mentira era mala. Si nos ponemos reflexivos seguimos siendo niños, ya que día a día nos pasan tantos actos fortuitos o hechos, que buscamos respuestas de por qué nos sucede tales acontecimientos en nuestra vida, desafortunadamente las respuestas ya no lo da nuestra libertad de pensar, sino en la actualidad es Facebook o Google nos da la respuesta, es decir, dejamos que otros piensen por uno mismo, ya que es más fácil, no se necesita mucho esfuerzo, y sobre todo nos evita el sufrimiento, ya que si nos va mal o nos pasa un hecho doloroso o que nos causa sufrimiento y googleamos que hacer en esos casos nos saldrá frases, imágenes o links emotivos que nos dirán no eres el único, o ante tal hecho no decaigas que a la vuelta está la solución, todo arcoíris tiene su final, entre otras respuestas que las hacemos verdades absolutas en nuestra vida, y así hemos ido interpretando la vida durante más de 100 años, ya que es aproximadamente el tiempo que la televisión ha estado en nuestra vida y nos ha dicho que es verdad, que es mentira, que es bueno, quien es el malo, o que necesito para ser feliz.

Desde que los animales inteligentes inventaron el conocimiento nos hemos vuelto pobres, precarios e inútiles, ya que estamos en la era de la información, tenemos tanta información que ya no generamos nueva sino nos quedamos con lo que vemos, leemos o escuchamos.

Pareciera que la inteligencia y la información ha provocado la fase de estupidez en la humanidad, lo alarmante es que la volvemos moda, modismo, verdad y por ende moral. Vemos que lo inmoral ahora es moral, un claro ejemplo son las telenovelas, series, videos que internet nos bombardea y nos indica que es lo socialmente aceptado y se tiene que repetir o tenemos que realizarlo para poder integrarnos a la sociedad moderna, es por ello que hemos inventado términos como influencers, o tendencias, y así podemos comprender porque tantas personas repiten lo llamada Chanlle, ya que es lo aceptado, lo bueno. Esto debido a que el intelecto, es el medio para asegurar la supervivencia del individuo, debido a que repetir la estupidez social nos hace moralmente aceptado o socialmente aceptados, por ende estamos integrados en un mismo mecanismo de función, lo que nos brinda estabilidad y dicha estabilidad felicidad, aunque la felicidad sea momentánea, cambiable y cuantificable.

Nos la pasamos fingiendo, engañando, halagando, la mentira y el fraude, la hipocresía, la simulación, el vivir con brillo ajeno, el enmascaramiento, el convencionalismo falaz, el hacer comedia ante si mismo (y auto humillarse) y los demás, en una palabra, el constante revoleteo alrededor de la sola llamada “Vanidad” es hasta tal punto regla y ley que, casi, no hay nada tan inconcebible como el hecho de que entre los hombres haya podido desarrollarse un honesto y puro impulso a la verdad, que ello ha conllevado a que lleguemos a una conciencia orgulloso, narcisista, individualista y tan necesita de likes, me encantan, de comentarios o halagos, tan superficial y tan vacía.

Siempre se quedará con ilusiones, en vez de verdades. Es decir que a través del lenguaje repetimos metáforas que nos ilusionan haciéndonos creer que son verdades que la damos como únicas y absolutas, creyendo que comprendemos un fenómeno sin darnos cuenta únicamente tenemos más que metáforas de la cosas, es decir una explicación que ni a la verdad se acerca, pero es fácilmente concebible, medible y razonable.

La génesis del lenguaje del lenguaje no preside la lógica y que todo el material con que trabaja y construye luego el hombre dedicado a la verdad, el investigador, el filósofo, proviene, si no del reino de la Utopía. Es decir, nuestra vida se basa en verdades utópicas, verdades que nos hacen prisioneros de los monstruos socialmente estúpidos.

Toda palabra adquiere inmediatamente categoría de concepto por la circunstancia de que no ha de servir para recordar la experiencia, es por ello, que de niño nos enseñan a través del proceso onomatopéyico los conceptos de la palabra que lo asimilamos con emociones para que la amígdala almacene la información y así no se pierda dicho concepción, lo difícil de este proceso es que podemos saber que una concepción es errónea, tonta, estúpida o sin sentido pero por la cuestión emotiva la hacemos pasar como verdad para poder excitar el cerebro y libere las sustancias indicadas que nos brinde felicidad, aunque sea momentáneo, y es ahí por qué constantemente estamos consumiendo los productos, las series, las telenovelas, los videos, o repitiendo los chanlle, ya que en estado permanente de estupidez la reacción de estabilidad emocional es más duradera, aunque nuestro cerebro se adapta y tendremos que aumentar la estupidez, es el mismo proceso que sucede cuando nos acostumbramos a un medicamento o alguna droga.

Nos pasamos construyendo arquetipos de acuerdo con el cual están conformados, dibujados, coloreados, recortados, pintados todo ente que nos rodea, aunque no sea los mismos los hacemos pasar por un mismo género, que nos ayuda a comprender un conjunto pero no a un individuo.

Es por ello que pasamos por alto lo individual y concreto, para poder llegar a un concepto, sin darnos cuenta que la Naturaleza no sabe de formas, dibujos, colores, ni de conceptos, por ello podemos mencionar que las multitudes se mueven, se rigen y viven día a día por metáforas,

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