DEBERES MORALES DEL HOMBRE
Enviado por Astri Sabogal • 5 de Diciembre de 2015 • Ensayo • 1.469 Palabras (6 Páginas) • 2.295 Visitas
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Año de la Diversificación Productiva y Fortalecimiento de la Educación
Tema: Deberes morales del Hombre
- Capitulo Primero: Deberes para con Dios
- Capitulo Segundo: Deberes para con nuestros padres
Deberes para con la patria
Deberes para con nuestros semejantes
- Capítulo Tercero: Deberes para con nosotros mismos
Curso: Coaching Organizacional
Aula: 730-A
2015
DEBERES MORALES DEL HOMBRE
- CAPITULO PRIMERO:
- Deberes para con Dios:
Nos basta dirigir una mirada al firmamento y observar esas maravillas y comodidades que Dios creó con su bondad y misericordia y como creador y gobernador del mundo, merece las más profunda adoración y obediencia, por ello estamos obligados a rendirle nuestros homenajes y ruegos.
Nosotros somos seres humildes e imperfectos, sin embargo, Dios, se complace en nuestras alabanzas debido a su majestuosa gloria, así que no podemos excusarnos de adorarle y alabarle.
Debemos dar gracias a Dios desde el momento en que nos levantamos hasta el momento en que nos acostamos, por todo lo que nos dio en el día a día y pidiéndole por nuestros padres, familias, amigos enemigos, etc., por el pan de cada día en nuestra mesa y en el de nuestros semejantes y sobre todo por darnos un día más de vida.
Conclusión:
- El hombre que tiene a Dios en su vida y cumple con los deberes para con él, es siempre el modelo de todas las virtudes, como el ser el padre más amoroso, el hijo más obediente, el esposo más fiel, el ciudadano más útil a su patria.
- Manifestar nuestro amor, gratitud, adoración a Dios debe de ser ejemplo para aquellas personas que nos observan en nuestro día a día, así mismo estos deberes satisfarán nuestros corazones.
- CAPITULO II
- Deberes para con nuestros padres.
Nuestros padres, autores de nuestros días, los que recogieron y enjugaron nuestras primeras lágrimas, desde el momento en que nacemos ellos nos demuestran de mil maneras amor, ternura, protección, así mismo, nuestros primeros años, los privan de los goces de la naturaleza social, ya que se dedican a cuidarnos, atendernos supliendo cada necesidad que tengamos y que nosotros no podemos hacer por sí mismos, ya que aún no tenemos la capacidad ni la fuerza necesaria y podríamos lastimarnos, enfermarnos y hasta morirnos.
El amor infinito de nuestros padres, es un amor sublime, incondicional, sin envidia ni egoísmo, que no tiene precio ni sacrificio que pueda con él; sus enseñanzas, sus deseos por hacernos el bien no mide edad, ya que ellos desde nuestra infancia, nuestra niñez y nuestra juventud, trabajan para alimentarnos, vestirnos, educarnos y facilitarnos todo lo que necesitemos y aun así en nuestra edad adulta ellos siguen ahí preocupados por nuestra felicidad y siguen apoyándonos y empujándonos para ir por el camino del bien dándonos a conocer la misericordia infinita de Dios.
Nosotros, sus hijos, somos el estímulo que les da fuerza hasta en la misma ancianidad.
Debemos amarlos, honrarlos, respetarlos y obedecerlos; estos grandes y sagrados deberes, cuyo sentimiento se desarrolla en nosotros desde el momento en que llegamos al uso de la razón.
El que no ha podido comprender para entonces todo lo que debe a sus padres, tampoco habrá comprendido lo que debe a Dios; y nunca serán felices.
Nuestro respeto debe ser profundo e inalterable, estar con ellos, protegerlos, cuidarlos, amarlos, por más difícil que sea la situación en la que nuestros padres se encuentren, nosotros no debemos apartarnos de ellos; al contrario debemos compadecerlos, llorar sus miserias y colmarlos de atenciones y de contemplaciones así como ellos lo hicieron incondicionalmente con nosotros mientras pudieron.
Conclusión:
- Nuestros padres desde que nacemos, nos aman, protegen, apoyan y nos empujan a salir adelante a pesar de las privaciones que ellos puedan pasar por causa de nosotros.
- El hijo amoroso y obediente, el que honró a sus padres y estuvo con ellos en los momentos difíciles será bendecido y alcanzará la misericordia de Dios al momento de darle cuentas a él.
- Deberes para con la Patria
Nuestra patria, generalmente hablando es toda aquella extensión de territorio gobernada por las mismas leyes que rigen en el lugar en que hemos nacido, donde formamos con nuestros conciudadanos una gran sociedad de interés y sentimientos nacionales.
Debemos saber diferenciar y respetar todos aquellos símbolos o monumentos que represente lo que alguna vez fue importante para nuestra patria.
Debemos dejar huella a través de la historia para que, así mismo, estos sirvan para el bien de las futuras generaciones.
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