El dialogo basado en las leyes morales

EL DIÁLOGO BASADO EN LAS LEYES MORALES

“El diálogo, basado en sólidas leyes morales, facilita la solución de los conflictos y favorece el respeto de la vida humana. Por ello el recurso de armas para dirimir las controversias representa siempre una derrota de la razón y de la humanidad” Juan Pablo II.

Hablando de un diálogo basado en sólidas leyes morales, es un diálogo en el cual se afianzan aún más los valores, se valora de mayor forma el respeto, en todas y cada una de sus caras o representaciones, sobre todo en el respeto a la vida y el derecho a la libre opinión, con este se busca expresar todo pensamiento de forma libre, más no imponer pensamientos, debido a esto es que es algo complicado poder acudir a este tipo de diálogo, considerando que solo el hecho de dialogar es algo difícil, como todos sabemos una de las partes solo busca manejar una verdad, una verdad que solo esa parte reconoce, más no la verdad verdadera; ¿es posible el tener este tipo de diálogo sin sinceridad?, está más que claro de que esto es imposible, debido a que la leyes morales se rigen por el bien, así que lógicamente estas se guían por la moral, sabemos que la moral es lo que nos permite distinguir entre las acciones que son correctas y las que no.

Por lo tanto, dadas las circunstancias actuales, no se puede dar un diálogo sincero y respetuoso, trayendo como consecuencia el hecho de que este no se pueda dar, más incertidumbre de la que se vive en estos días, observando como una de las partes, para no dejar a la vista otro punto que no sea el suyo, comienza a ver al otro que opine diferente, como enemigo, como un problema al que se le debe buscar la salida fácil, dejando de verlos como las personas que son, queriendo resolver este problema a la fuerza, utilizando las armas como recursos, en vez de la razón, terminado con vidas e irrespetando así el derecho de la misma, simplemente buscando oprimir a quien no comparta su óptica, dejando en claro que solo me dejo llevar y absorber por una ideología y el hecho de que estoy renunciando a la razón, a la capacidad que tengo como ser humano de pensar y a su vez apagando mi humanidad, siendo una persona a la cual no le tiembla el pulso a la hora de apuntar y decidir disparar contra cualquiera de mis iguales, solo para imponer un pensamiento, esto solo demuestra que como ser humano le has dado muerte a tu razón, tanto como a sus sentimientos.

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