La monogamia en el ser humano

La monogamia en el ser humano.

Monroy Espíndola Ingrid Citlalli.

1. Desarrollo

Partimos de la idea de que la monogamia es un modelo de relaciones afectivo-sexuales o afectivas basado en la exclusividad sexual o afectiva por un periodo de tiempo indefinido entre dos personas. Este modelo relacional está tan arraigado a nuestra sociedad desde hace décadas, es muy común ver este tipo de relaciones afectivas a nuestro alrededor que llevan este modelo.

La monogamia como evolución.

Desde el punto de vista evolutivo, tener una misma pareja por el resto de la vida resulta una idea mala. Teniendo en cuenta que el esperma es abundante y no tarda mucho en producirse, un macho no lo beneficia lo suficiente al invertir en una sola hembra, a la que le llevará un largo periodo de tiempo en reproducirse. Una hembra también puede beneficiarse de tener una gran variedad de parejas, si sus hijos tienen distintos padres, algunos pueden estar mejor protegidos si se presenta una enfermedad.

Pero, hablando de enfermedades, en un artículo de la revista Nature Communications, nos habla de que las enfermedades de transmisión sexual (ETS) puede haber sido un factor importante para que surja la monogamia en las sociedades sedentarias.

Cuando los humanos pasamos de ser nómadas a ser sedentarios, las ETS tomaron un gran poder dentro de estas sociedades en crecimiento. Esto quiere decir, que, en una pequeña sociedad de nómadas, las ETS no eran una gran amenaza porque estas no tenían la oportunidad de llegar lejos en el tiempo evolutivo. Por otro lado, en sociedades sedentarias, las poblaciones se expandieron rápidamente, por lo que una infección en un grupo poligínico contagiaba rápidamente hasta convertirse endémica.

También, surge la idea de que la monogamia dio origen con el fin de prevenir el infanticidio. Al ser los niños más vulnerables cuando dependen sólo de su madre, ella se centra única mente en su crianza mientras posterga otras concepciones, mientras que los machos rivales sólo pueden obtener otro apareamiento si matan al infante. La participación de los machos en la crianza abrevia a su vez el periodo de dependencia infantil y permite que las hembras estén disponibles para la reproducción más rápido.

Hoy contamos con mecanismos para resolver cualquier conflicto del que hablamos con anterioridad. Tenemos mecanismos para prevenir el infanticidio, las mujeres no necesitan un padre para criar a sus hijos, hay métodos eficaces para prevenir las ETS, etc.

La monogamia en la psicología.

Partiendo desde un punto de vista más actual, ¿existe algún mecanismo en nuestro cerebro que nos oriente hacia la monogamia? Los seres humanos no somos monógamos de la misma forma en la que lo son algunos animales, debemos considerar que existe la monogamia sexual y la monogamia social. La monogamia sexual implica no tener relaciones sexuales con otras personas que no sean tu pareja, mientras que la social implica tener una sola pareja con la que convivimos.

Nuestro cerebro no entiende la atracción sexual y el amor como un “todo”. Hay muchos estudios que han probado que los circuitos neuronales que activan el deseo sexual se encuentran en una región del cerebro llamada “ínsula anterior”, mientras que en la “ínsula posterior” es el que responde a los sentimientos de amor y nos permite seleccionar a la persona con la que queremos comprometernos.

Si lo vemos desde el famoso amor romántico, nos han contado que, en una relación de pareja monógama, el deseo sexual y el enamoramiento perdurará para siempre, pero esto es mentira. Algunas personas pueden sentirse desilusionadas al ver como decae a medida que la relación avanza y es por eso por lo que la infidelidad se ve como una opción, ya que con el sexo generamos dopamina y esta sustancia puede producir experiencias más intensas de las que nos proporcionan las conductas diarias. Todo lo mencionado, está relacionado con una investigación de la Universidad de Binghamton, Nueva York.

La monogamia como sistema político-social

        La ciencia describe dos mecanismos posibles que desencadenaron la formación de la monogamia: La estabilidad emocional de estar con una sola pareja y la estabilidad de un sistema entero buscando la formación de familias que permitan un núcleo social. En ese sentido, la monogamia es un sistema político-social que fue construido para controlar y apoderarse del cuerpo ajeno; constructo que se va desarrollando junto con el capitalismo y la revolución científica con la que se sigue tratando de autosustentar y autojustificar.

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