La utilización del término hábito ha estado menoscabándose poco a poco con el tiempo

La utilización del término hábito ha estado menoscabándose poco a poco con el tiempo. Mucha gente relaciona el hábito con la costumbre, volviendo automático esta conducta de la persona y deteriorando su capacidad de juicio y creatividad. Entonces concluimos que no se está entendiendo correctamente el sentido de la definición de hábito.

Entonces, ¿cuál es la verdadera definición del hábito? No es más que una cualidad permanente o una forma en potencia. Esta es una cualidad difícilmente removible y se logra con la repetición de los actos.

Los hábitos son necesarios para lograr la firmeza, prontitud y deleitación al momento de obrar.

Según Aristóteles la mente humana puede perfeccionarse de dos maneras: primero por el conocimiento del objeto y segundo por el conocimiento del método de estudio adecuado al estudio del objeto.

Nos referimos a este segundo tipo de conocimiento cuando hablamos de los hábitos del pensamiento riguroso.

Los hábitos del pensamiento riguroso

Los actos que deben ejercitarse parar lograr los hábitos del recto pensar son: Usar la lógica y el método de descarte.

El hábito de pensar rigurosamente es obtenido debido al ejercicio de ordenamientos del entendimiento como: la definición, la distinción, la relación, la causalidad, la sistematización, la crítica y la síntesis.

El pensamiento riguroso se forma en medida que se generen los hábitos de definir y distinguir rigurosamente.

a) El hábito de la definición

La definición delimita y pone límites a algo, en este caso debe ser el significado del objeto. La mayoría del tiempo enmarañamos significados, sobre todo cuando les imputamos a las mismas palabras y así generamos imprecisiones.

Por medio de esto, se procura resaltar la importancia de acostumbrarnos a definir y así lograr obtener un espíritu científico.

Cuando hablamos de definir nos referimos a decir lo que el objeto es, para esto, debemos tener en claro el significado y el sentido del término cuando se está utilizando dentro de un contexto o de un juicio. Si definimos claramente, logramos saber cuál es la comprensión y extensión de un concepto. La mayoría de los errores se dan debido a una mala comprensión del término.

Es importante que no solo se mencionen las reglas de la definición, sino también es necesario que se practiquen.

Otro punto importante es que al momento de definir no se usen palabras ambiguas y caigamos nuevamente en el error.

b) El hábito de la distinción

La distinción es una operación natural humana que se encarga de separar una cosa de otra.

Prosperamos en el conocimiento a medida que distinguimos y separamos conceptualmente lo que está unido.

Según la lógica lo que se distingue puede negarse, pero no basta una simple negación para progresar en el conocimiento. Un

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