Manifiesto comunista. La lucha de clases es la historia de todas las sociedades hasta nuestros días

“El Manifiesto Comunista”

Karl Marx

Editorial: Sarpe, Madrid (1983)

Capítulo: “Burgueses y Proletariado”

La lucha de clases es la historia de todas las sociedades hasta nuestros días.

A lo largo de la historia, en las épocas históricas anteriores, las sociedades organizadas en completa diferenciación y que poseen escalas graduales de condición social, hablamos de los estamentos, en donde bajo estas organizaciones político-sociales se implantó la figura del opresor-oprimido, los que se encuentran en constante lucha. Luchas que terminaron siempre con una revolución transformadora de la sociedad o con el hundimiento de las clases dominantes en cuestión.

La modernidad social burguesa, sale de entre las cenizas de lo que fue el feudalismo. Pero esta burguesía no termina aquí con las contradicciones de clase, sino que sustituye a las viejas condiciones de dominación y opresión por unas nuevas. Aunque esta burguesía simplifica las contradicciones de clase, quedando solo la burguesía y el proletariado.

“De los siervos de la Edad Media surgieron los vecinos libres de las primeras ciudades; de este estamento urbano salieron los primeros elementos de la burguesía.” (Marx, edic.1983)

Hechos históricos como el “descubrimiento de América” y la circunnavegación de África, ayudaron a la burguesía en ascenso un nuevo campo de actividad donde poder desempeñarse. Se abren nuevos mercados, los que con ellos aceleraron el desarrollo del elemento revolucionario de la decaída sociedad feudal.

La demanda industrial creció tanto que la organización feudad industrial no daba a vasto, y su puesto lo ocupa la manufactura. El estamento medio industrial suplantó a los maestros del gremio, la división del trabajo se desarrollaba ahora en el mismo taller y ya no entre las corporaciones.

Los mercados crecían de tal forma que los manufactureros tampoco daban a vasto, el lugar del estamento medio industrial ahora lo vienen a ocupar, los industriales millonarios; los burgueses modernos.

La gran industria crea el mercado mundial, en el cual avanzan aceleradamente en su desarrollo del comercio, de la navegación y de los medios de transporte. Todo este desarrollo también influyó a que la burguesía fuera multiplicando cada vez más sus capitales.

La burguesía moderna es producto de grandes transformaciones en el proceso de desarrollo y una serie de revoluciones en los modos de producción y cambio.

Después del establecimiento de la gran industria y del mercado universal, la burguesía se impone como la hegemonía exclusiva del poder político en el Estado representativo Moderno.

La burguesía a lo largo de la historia ha tenido un rol revolucionario, “(…) la burguesía ha destruido las relaciones feudales, patriarcales, idílicas.” (Marx, edic.1983)

A aquellas profesiones que eran divinizadas, fueron bajados a lo terrenal y la burguesía los convirtió en sus servidores asalariados.

La burguesía ha transformado a las relaciones familiares en simples relaciones de dinero, despojándolas de todo sentimentalismo.

La burguesía no puede sino existir bajo la revolución en los modos de producción, las relaciones de producción y con ellas las relaciones sociales.

Mediante la explotación del mercado mundial, la burguesía recorre todo el mundo para dar mejor salida a sus productos, dándole un carácter cosmopolita a la producción. Destruye la base de la industria nacional, ahora ya no se necesita materia prima indígena sino que se necesita materia prima traída desde los lugares más recónditos del mundo y ahora esa materia prima también se convierte en una necesidad para el resto del globo y con esto entonces, se produce una interdependencia del comercio mundial.

La burguesía trata de amoldar a su semejanza a todas las naciones del mundo, con el modo de producción burgués. La burguesía ha creado grandes urbes, ha aglomerado a la población y ha concentrado la propiedad en manos de unos pocos, ha puesto al servicio de la ciudad al campo, el oriente a occidente, los pueblos campesinos a los pueblos burgueses. La consecuencia a todo esto, es el centralismo político.

La burguesía a lo largo de todo su dominio de clases ha sido capaz de crear fuerzas productivas más abundantes que en todas las generaciones pasadas juntas.

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