RELIGIÓN Y POLÍTICA EN EL LEVIATÁN DE THOMAS HOBBES

RELIGIÓN Y POLÍTICA EN EL LEVIATÁN DE THOMAS HOBBES

El autor menciona como pocos libros representan una época de forma profunda y que al mismo tiempo influencien a las nuevas generaciones como lo ha hecho el Leviatán.

La descripción del leviatán que nos ofrece las sagradas escrituras señala: “No tiene en la tierra semejante ;Para no conocer el miedo ha sido hecho. Los más fuertes le temen, ¡Él es rey de todas las bestias feroces!”

Hobbes establece que entre el leviatán bíblico y el estado no trata de ponderar su maldad si no, más bien de difundir temor entre los hombres.

Hay dos versiones publicadas del Leviatán diciendo que el Leviatán es el resultado del trabajo intelectual de su autor por casi 50 años. Hobbes consagró su vida a escribir y escribir el mismo libro y también fue modificando partes sustantivas en su obra con el fin de hacer de ella una teoría satisfaciendo las necesidades de su época pero al mismo tiempo traspasando las barreras del tiempo y espacio.

Durante un cápitulo, Hobbes hace una crítica a Brambhall en contra de la definición hobbesiana de ateísmo ya que le sirvió para aclarar el lugar que ocupan los ateos dentro del orden social y para determinar las medidas que el Estado debía tomar con ellos para poder asegurar su propia estabilidad .

La respuesta que tuvo Hobbes hacia las críticas de Bramhall fueron que el tema religioso no constituía un tema secundario dentro del marco general de la obra y tampoco era producto de una buena posición política, al contrario fue fuente permanente de inspiración y cuestionamiento ya qué 3 agregados introducidos en la versión Latina quitaron la estructura del Leviatán y determinaron las fronteras entre el poder divino, el poder eclesiástico y el poder civil. Menciona que hay que tener presente que la mitad de la extensión del Leviatán está dedicada al tratamiento de la naturaleza y los derechos de un Estado Cristiano.

En De Cieve, que es un escrito antes del Leviatán describe cómo los deberes de los hombres son primero como hombres, segundo como ciudadanos y tercero como cristianos y dentro de estos deberes están incluidos los elementos del derecho natural, el derecho de genes, el origen y la fuerza de la justicia.

En el capítulo X del Leviatán, Hobbes desarrolla una conceptualización de la idea de poder y dice que es como la tendencia que manifiestan los hombres de sacar el mayor provecho de lo que tienen con el fin de asegurar su bienestar en el futuro, es lo que mueve todas las acciones humanas, a veces es visible y a veces está oculto. También establece la división entre el poder natural y el poder instrumental o sea entre las facultades corporales mentales.

El deseo de poder viene de la necesidad de poner a salvo la vida la competencia y la desconfianza y que el valor de una persona varía dependiendo de la necesidad de lo que el otro esté dispuesto a dar.

Por otro lado Hobbes explica que hay dos tipos de Estados existentes: el político y por adquisición; cada uno de ellos les antedece el pacto y la fuerza. Él soberano que se ha hecho al poder por medio de la fuerza disfruta de los derechos ilimitados que aquel que ha alcanzado el poder por medio de un pacto. A diferencia de Rousseau, Hobbes, describe los poderes ilimitados del soberano diciendo que es ilimitado y que el absolutismo como forma de Gobierno es posible.

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