Una forma diferente de enfrentarnos al mundo

Fecha: 12-19 de Mayo de 2022

Yuliana Noelia Sepúlveda Velis

Una forma diferente de enfrentarnos al mundo

A diario vivimos un montón de experiencias, y pasamos por un montón de circunstancias distintas, algunas son el mejor momento de nuestras vidas, y otras, creo que preferiríamos olvidarlas, entonces ¿cómo seguimos adelante cuando hay un momento de nuestra vida que preferimos desaparecer?, como lidiamos y continuamos, ¿Seguimos como si nada hubiera pasado? ¿O preferimos reemplazar por completo el recuerdo con otro mejor? ¿No empieza acaso el arte de la narración cuando nos preguntan qué tal estamos, y embellecemos la verdad solo para acabar con las preguntas? Piglia lo dijo “Siempre se han contado historias y se seguirán contando, y si pensamos en el futuro, estoy seguro de que la narración persistirá..” (p.344), porque a través de la narración podemos construir todo un mundo donde vivir, un mundo el cual dirigir, la narración nos empodera y nos hace sentir dueños de nuestras vida, y de ahí surge mi duda ¿Es la narración una forma de enfrentarnos al mundo?

Las personas necesitan una historia que responda a sus preguntas, no están necesitados de verdad, sino de información, si se les da una respuesta coherente con lo que piden, quedan satisfechos, y es en ese momento donde entra en juego la verosimilitud, se puede inventar una historia, siempre y cuando sea muy cercana a la realidad. El narrador está consciente de la pregunta por lo que puede optar por crear una nueva historia desde el inicio, pero si opta por esta opción no tendría una base de la que guiarse, es por esto que hila una historia entre realidad y la ficción, que sea tan cercana a la verosimilitud, que no genere dudas. Esto lo dice Borgues en su cuento Emma Zuns “La historia era increíble, en efecto, pero se impuso a todos, porque sustancialmente era cierta” (p.869), esto deja ejemplificado que las respuestas son más importantes que la verdad, y que cuando tenemos una narración que se escucha y ve tan realista, es difícil dudar de su veracidad.

Desde la primicia anterior podemos enfocarnos en la pregunta inicial, si sabemos que podemos crear una historia, crear nuevos hechos, y que estos hechos sean creíbles, podríamos estar frente a la creación de una realidad paralela, donde para un grupo de personas las circunstancias ocurrieron de la manera en que el narrador lo contó, y de esta forma nace una nueva realidad. Pero qué pasa cuando no es a los demás que le queremos contar una nueva historia, sino que a nosotros mismos ¿Somos capaces de narrar una historia de manera tan realista que seamos capaces de  engañarnos a nosotros mismos? Para esto quiero realizar en análisis de dos textos, “El huésped” de Amparo Dávila y “Un hombre sin suerte” de Samanta Schweblin, ya que son dos cuentos muy abiertos a distintas interpretaciones.

En el huésped se describe una criatura que a primera impresión, podría ser totalmente fantástica, el personaje principal lo describe como “..lúgubre, siniestro. Con grandes ojos amarillentos, casi redondos y sin parpadeo, que parecían penetrar a través de las cosas y de las personas” (Dávila, 1959), es incluso una descripción de algo que parece no humano; además en el cuento se describe que vive encerrado todo el día en un dormitorio oscuro y húmedo, un lugar inhóspito para cualquier persona, pero este ser se siente contento, o al menos eso nos dice la narradora. Es difícil hablar de este texto objetivamente, ya que la historia está contada siempre desde el mismo punto de vista, que es el de una mujer casada desdichada; no sabemos lo que los demás personajes piensan o sienten, solo sabemos lo que ella cree que sienten; de esta manera ¿Podríamos estar frente a una narración fantástica de lo que verdaderamente ocurre? La mujer habla de una vida infeliz, con un marido con el cual no interactúa mayormente, y en un pueblo desolado; luego llega a vivir con ella este ser espantoso, al que al final, después de tanto sufrimiento y luego de que su marido no quisiera sacarlo de su hogar, decide asesinarlo, pero ¿Qué asesinó realmente? Ella era una mujer que sufría diariamente, y luego de la llegada del huésped, sus hijos comenzaron a ser parte de ese sufrimiento, es por esto que ella lucha por defender a sus hijos y a ella misma, pero contra qué, está inconcluso. Desde mi punto de vista el ser descrito es una metáfora, una representación de lo intangible, ella necesitó ver a este mounstro, necesitó sentirlo real para poder enfrentarlo, le contó al lector y a ella misma una historia, y gracias a eso pudo acabar con el sufrimiento, podría ser la representación de su tormentoso matrimonio, la representación de todo lo que sufría cuando su marido se marchaba y la dejaba sola, ella ve al marido como el culpable de esa infelicidad y por esto narra que él llevó al huésped a la casa, él era el que no quería cambiar, es por esto que luego de luchar contra sus miedos durante un viaje de su esposo, un día lo espera con la noticia, “lo ha asesinado”, ha acabado con lo que podría ser la representación física de su matrimonio, podría significar el divorcio. Pero esto es solo un punto de vista de los muchos que pueden existir, es solo un punto de vista que demuestra cómo se puede utilizar la narración para lidiar con el sufrimiento y la lucha.

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