ARGUMENTOS EN CONTRA Este Mundo Describe Una Forma De Vida Totalmente Antinatural, Los Seres Humanos Han Dejado De Serlo Y Han Pasado A Convertirse En Personas Formados En Probetas De Laboratorio, Donde Se Ha Decidido De Antemano Qué Clase De Persona V

ARGUMENTOS EN CONTRA

Este mundo describe una forma de vida totalmente antinatural, los seres humanos han dejado de serlo y han pasado a convertirse en personas formados en probetas de laboratorio, donde se ha decidido de antemano qué clase de persona va a ser en el futuro. La persona como tal, ha desaparecido.

Las personas son producidas en serie, como si de una cadena de montaje de automóviles se tratasen. No existe el sentimiento, cualquier sentimiento de un ser humano hacia otro, los padres, la familia y el hogar han desaparecido para siempre. Los niños son manipulados desde que son embriones, como si fuesen ratas de laboratorio y les condicionan a vivir la existencia que han determinado para su futuro. La libertad y el libre pensamiento, son una mera utopía, ni tan siquiera la mente puede vagar libremente en las horas de reposo, pues hasta los sueños son manipulados por los mandatarios del país.

En este mal llamado “mundo feliz”, no existe la posibilidad de que nadie pueda aspirar a más, a tener ambiciones, a superarse así mismo, sus destinos los han decidido antes de que naciesen ya que les ha sido negado hasta el más mínimo sentimiento que pueda inquietar a los dirigentes de “mundo feliz”. Este gobierno es totalitario y dictatorial, les da todo lo que necesitan en pequeñas dosis para que no puedan pensar y se den cuenta de que les falta lo más importante en el ser humano, el afecto, y la libertad, dos carencias que se unen a la falta de democracia en “mundo feliz”.

Va contra la naturaleza el manipular a las personas genéticamente como se narra en este libro. Aunque hoy en día todos conocemos los avances en Biología a través de la Tecnología, aunque las clonaciones se han realizado y llevado a cabo con éxito, confío en la inteligencia del hombre y espero que no lleguemos a extremos de los que luego tengamos que lamentarnos.

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