Amparo de la casa Hombre y espacio – Otto Friedrich Bollnow

El Amparo de la Casa

Hombre y espacio – Otto Friedrich Bollnow

En el texto se muestra la importancia de la casa como como punto de partida para la vida del hombre, se referencian muchos de los acontecimientos importantes que puede obtener para desarrollar su vida en general, es el lugar donde se es, donde se habita y donde se mantiene el concepto de hogar, es el lugar al cual se puede regresar sin importar el pasar de los años.

Ésta es el centro de nuestro mundo, nos vincula al ser individual que somos, nos rodea de lo familiar y se opone a la lejanía por la misma pertenencia que se tiene con ella, por eso el amor también es indudable… Existe también el inminente desarraigo del hogar en el cual el hombre encuentra su espacio para existir, defendiendo así su lugar de cualquier ataque exterior; construye y habita su hogar logrando una relación interna con la misma, aprende a habitar.

Se comprende perfectamente el acto de habitar como el modo en que el hombre vive en la casa, es altamente fundamental para la vida del ser humano, pero es más que un simple estar, es estar arraigado y tener sentido de pertenencia en él, también es demasiado importante en la vida del hombre porque esta determina su relación con el mundo. Es la casa misma la que brinda este calor y esta seguridad que es necesaria para generar paz, porque se siente como un medio de cobijo y refugio, los muros y el techo crean una especie de lugar habitado que muestran exactamente cuál es el lugar interior y exterior. El espacio exterior es el que siempre está activo, donde hay obstáculos, donde hay que defenderse y mostrar resistencia y el interior es donde hay tranquilidad y paz de la que el hombre puede tener seguridad y presentar alerta ante inminentes amenazas, es el espacio que se designa completamente a la relajación.

En cada habitación del hogar se muestra el concepto que tiene la casa, esta aísla el caos porque es el elemento estable. El hombre sería un ser disperso sin hogar ya que no tiene las raíces ni la resistencia para el mundo exterior que lo tiene bajo ataque constante, además de que como brinda seguridad permite al hombre entregarse a la fantasía… En la casa real se siente la paz y la libertad de habitar como persona, pero la casa real no existe porque siempre existe la posibilidad de que haya otro lugar.

El hombre necesita tener de un hogar porque de lo contrario su descomposición es inevitable, existe el miedo de ser echado de la casa y de la patria, pero con esto también aumenta el habitar y el crear cobijo en otra casa, se desnaturaliza porque no tiene el lugar de paz donde está protegido del mundo al cual se expone constantemente para cumplir lo que debe, pero cuando lo hace debe tener también la posibilidad de regresar al amparo de su casa sin embargo cada hogar es  amenazado por lo cual no se obtiene una seguridad definitiva, pero conocer los peligros no libra al hombre de lugar y defender continuamente su hogar, lo único por lo que se afecta con la pérdida de la casa es la existencia misma y si la misión fuera construir cada vez luego de la destrucción éste no sería capaz sin la confianza del mundo y de la vida, sin la confianza en lo que traerá el futuro… Sin una extrema confianza a la vida no es posible que el hombre exista y mucho menos que sea, construya y habite.

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