EL HUMANISMO Y SU IMPACTO EN EL MEDIOEVO.

EL HUMANISMO Y SU IMPACTO EN EL MEDIOEVO

A lo largo de la historia el humanismo fue conocido como el movimiento de recuperación de la  cultura clásica, y es tomado como un concepto definido de la historia  desde diferentes puntos de vista, el cual se refería a la preocupación por la valoración de los atributos y las relaciones humanas. Se trata también de un concepto utilizado para definir los movimientos culturales y literarios presentes en la Europa del siglo XIV y XV, en el que renace el estudio de la Roma y Grecia clásica, en la que se resalta el valor de lo tradicional  por su importancia en el contexto cristiano. De esto se puede plantear  ¿Qué impacto tuvo este movimiento en el desarrollo de la humanidad en los diferentes ámbitos de la vida? ¿Qué influencia tuvo en la religión?

El humanismo fue un movimiento filosófico, intelectual y cultural que inició en Italia en el siglo XIV con el Renacimiento y se expandió a través de Europa, irrumpiendo con la fuerte influencia que ejerció la Iglesia católica en todos los órdenes de la vida durante la Edad Media, buscando la divulgación de los conocimientos para hacer del hombre un individuo verdaderamente humano y natural, en oposición a lo divino y sobrenatural que constituyeron los objetivos del medioevo, Se trata de una doctrina antropocéntrica, donde el hombre es la medida de todas las cosas. La organización social, por lo tanto, debe desarrollarse a partir del bienestar humano. Esta corriente se opone al teocentrismo medieval, donde Dios era el centro de la vida.

 Principalmente su origen se debe a fue creado como un acto de respuesta a la problemática que vivía la sociedad en este periodo, debido a las malas costumbres adoptadas por la sociedad provoco que esta estuviera en pésimas condiciones.

Sus ideas surgieron a partir de que se empezó a pensar y especular que el hombre o el ser humano como tal podrían convertirse en el centro del universo, Lo que propicio que la sociedad de la época tuviera un impulso generalizado, ya que las personas comenzaron a darse más valor a sí mismas y eso provocó que fueran creyendo en sus capacidades para lograr mayores objetivos, al igual que se empezaron a preguntar porque ellos no podían ser lo más importante de todo.

El humanismo tuvo un fuerte impacto en la literatura y el arte, sin embargo, fue expandiéndose y entrando a países como Inglaterra donde sus influencias llegaron a tomar parte importante tanto en la educación como en la teología, conformándose como una de las causas principales de la Reforma. Fue en este país donde la difusión del movimiento humanista estuvo a cargo de grandes instituciones educativas como las afamadas universidades de Oxford y Cambridge.

A través de sus obras, los intelectuales y los artistas humanistas exploraron temas inspirados en los clásicos de la antigüedad grecorromana, que eran sus modelos de verdad, belleza y perfección. Entre los cuales se destaca Marsilio Ficino, Giovanni Pico Della Mirandola, Erasmo de Rotterdam, Tomas Moro, Francisco Petarca, Dante Alighieri, entre otros. Todos estos grandes exponentes del humanismo intentaron rescatar culturas tradicionales, pensamientos y planteamientos expuestos en periodo clásico, basándose en  el reconocimiento del ser humano como un ser capaz de conocerse a sí mismo y al mundo que lo rodeaba por medio de la razón y nuevas formas de expresión.

En las artes plásticas y en el campo de la Medicina, el humanismo propició obras enfocadas en el estudio de la anatomía y del funcionamiento del cuerpo humano. Por su parte, en las ciencias, se produjo la secularización del saber científico y ocurrieron importantes descubrimientos en diversas ramas del saber, como la Física, las Matemáticas, la Ingeniería o la Medicina.

Por otro lado, La filosofía humanista ofrecía nuevas formas de pensar y reflexionar acerca de las artes, las ciencias y la política, lo cual revolucionó el ámbito cultural y supuso un periodo de transición entre la Edad Media y la Modernidad. Igualmente trata de una actitud que intenta poner especial énfasis en la dignidad y el valor de la persona humana, considerándola como un ser racional capaz de practicar el bien y encontrar la verdad.

En el arte Los rasgos centrales de la estética de la época se rigen por el Neoplatonismo, es decir, el culto a Platón, y se centra en el hombre, la idealización de la realidad, el gusto por las formas equilibradas, o la claridad y el orden en la composición.

El platonismo se combina con las enseñanzas de la filosofía cristiana y de otras procedencias. El fundador de dicha estética fue Petrarca junto a los italianos, y se expresa con un mundo que refleja la belleza del Creador, afirmando que el hombre es inmortal y no puede gozar en la tierra de la hermosura divina, pero la podrá ver en las cosas hermosas que son reflejo de la belleza de Dios. El artista creaba según su propio criterio, pero a veces los moralistas censuraron la libertad con la que procedían.

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