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El Individuo en la Sociedad, según Simmel


Enviado por   •  31 de Enero de 2021  •  Ensayo  •  1.826 Palabras (8 Páginas)  •  158 Visitas

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LICENCIATURA EN SOCIOLOGÍA

MATERIA: SOCIOLOGÍA CLÁSICA II

ASESOR:  JOVITA GALICIA REYES

           

GRUPO:  9521

ALUMNO:  BRACAMONTE  ZARDENETTA  JAVIER  IGNACIO

ACTIVIDAD:  5.  EL INDIVIDUO EN LA SOCIEDAD. (GEORG SIMMEL)

FECHA: 9 DE MAYO 2020

EL INDIVIDUO EN LA SOCIEDAD

Desde la perspectiva que plantea Georg Simmel

(Nota: Las negritas, las cursivas, los subrayados y los resaltados en azul, son míos con la intención de resaltar o explicar palabras y conceptos.)

“Sería falso decir que el hombre toma primero el mundo de un modo completamente objetivo, y sólo después, gradualmente, su sujeto cobra la conciencia de ser un yo que se contrapone al mundo y lo refleja. Por el contrario, aquella primera imagen es tan poco objetiva como subjetiva, está más allá de esta oposición en el estado indiferenciado de la simple percepción; sujeto y objeto se desarrollan al mismo compás, porque sólo el uno por el otro, en su relación recíproca, pueden alcanzar su sentido”. (Simmel, 1946: 104)

EL INDIVIDUO DA ORIGEN A LA SOCIEDAD

Simmel considera que desde el individuo se crea la sociedad y se forman lo que él llama “formas de la sociedad” o “formas sociales”, él distingue entre formas y contenidos, no da la sociedad como algo dado, algo que ya esté y sea externo al individuo sino que el individuo es el que la crea.

Podemos considerar a Simmel como un pensador opuesto a Durkheim porque si en la relación individuo-sociedad Durkheim va a colocar a la sociedad primero determinando al individuo, Simmel lo hará a la inversa, el individuo va a determinar la sociedad  y luego va a crear formas que acaban  determinando al individuo.

¿CÓMO ES QUE CREAMOS LA SOCIEDAD?

Las interacciones entre individuos, entre grupos, las acciones recíprocas,  crean las formas sociales, es decir, crean la sociedad.  Esta repercusión recíproca de la interacción siempre surge de determinados impulsos o en función de determinados fines.

Relaciones microsociológicas generan relaciones macrosociológicas, es decir, el individuo termina creando con su propia interacción formas que lo superan, lo exceden, lo dominan, formas como el dinero, la burocracia, las relaciones de dominación, conflicto, sociabilidad y normas.

Las interacciones individuales están en el origen de la sociedad. Para él, el origen de la sociedad, que son las interacciones individuales, son lo que llama los “contenidos” de la sociedad.

De las “formas” de la sociedad se deriva la cultura objetiva, es la cultura que, partiendo de nosotros, se convierte en un objeto y ya no la podemos dominar.

“...en toda sociedad humana se puede distinguir su contenido y su forma, y el de que su propio significado constituye la repercusión recíproca de la interacción de los individuos”. (Simmel, 2003: 77)

Él, por “contenidos” de la sociedad se refería a lo más íntimo del individuo, a los impulsos, sentimientos, objetivos e intereses, lo que pertenece al orden de la libertad del individuo. Con estos objetivos e intereses creamos relaciones individuales de uno al otro y eso crea el orden, la forma de la sociedad como si fuera un proceso que se nos escapa de nuestro control.

“En si mismas, estas materias con las que se llena la vida, estas motivaciones que la impulsan, aún no son de índole social” (es el contenido, la materia que el individuo va a usar para llevar a cabo y estructurar la socialización)”. “Los instintos eróticos, los intereses materiales, los impulsos religiosos, los fines de la defensa y el ataque, el juego y el trabajo lucrativo, la prestación de ayuda, la enseñanza e incontables otros, hacen que el ser humano entre con los otros en una relación de estar juntos, de actuar unos para otros, en una correlación de circunstancias, es decir que ejerce efectos sobre otros y surte efectos por parte de estos. Estas repercusiones recíprocas significan que los portadores individuales de estos impulsos causantes y fines forman una unidad, o sea una “sociedad”. “Todo aquello que en los individuos, en los lugares inmediatamente concretos de toda realidad histórica está presente como impulso, interés, finalidad, inclinación, estado psíquico y movimiento, de tal manera que a partir de ello (causalmente) o con ello se produce el efecto sobre otros y se recibe estos efectos (interacción recíproca), esto lo llamo el contenido, en cierto modo la materia de la socialización”. (Simmel, 2003: 78)

Según Simmel el hombre crea formas que se le escapan y que después ya no domina aunque él mismo las haya creado, por ejemplo cuando utiliza el ejemplo el dinero: como consecuencia de las interacciones individuales creamos el comercio realizado a través del sistema del trueque pero luego, a partir de nuestra libertad, generamos una “forma” que es el dinero, y el dinero se independiza luego de nosotros mismos y termina por transformarnos, por transformar nuestra propia vida y ya no podemos dominarlo, se transforma en lo que Simmel llama una “forma de la sociedad”, pero aquí el punto en el que hay que poner atención es que lo hicimos con base y en uso de nuestra libertad….y esa es la paradoja:  que la libertad, al generar una forma de la sociedad genera pérdida de la independencia; cuanto más libertad tienen los individuos, más crean formas y después esas mismas formas  se independizan de ellos y los dominan y en consecuencia pierden más independencia el individuo.

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