El Modelo ético Que Estamos Buscando

“Hoy en día, la pregunta de cómo hemos de vivir se nos plantea de modo más agudo que nunca. Hemos salido de los ochenta –años conocidos como <<la década de la codicia>> – pero todavía no hemos determinado la naturaleza de los noventa.”

Peter Singer, (1993) pág. 21

Transcurriendo el año 2013, recogemos las cosechas de dicha década de codicia. La realidad latinoamericana y en especial, la colombiana nos son más que el resultado de unos pensamientos evidenciados y promulgados de las épocas e imperios anteriores. La continua búsqueda de la felicidad a través del dinero y del interés propio dejan como resultado familias rotas, personas al poder corruptas, falta de sentido de pertenencia, entre otros. Sería una tarea ardua que iría más allá del objetivo del presente documento, exponer la gran cantidad de problemáticas en nuestro país, debido al deseo de la sociedad de parecerse a la mencionada década de codicia. Por tal motivo, se abordará tan solo uno de gran importancia que es la falta de sentido de pertenencia a la luz de temas tratados por Singer y lo que hoy en día vemos en los medios de comunicación y vida cotidiana.

La codicia, definida como el deseo o apetito ansioso y excesivo de bienes y riquezas, no puede hacer parte del carácter de un ser humano sin que haya sido construida a lo largo de su vida. Eso quiere decir entonces, que nadie se hace codicioso de la noche a la mañana, sino que, por una serie de acontecimientos e influencias, esta característica se va adquiriendo, y más adelante, dará sus frutos. Pero ¿Cómo puede ocurrir eso? ¿Cómo la gente se va volviendo codiciosa? Nosotras, como futuras docentes no podemos ignorar la importancia de la crianza de los personas desde el mismo momento de la concepción; por eso, para intentar responder estas preguntas, debemos remontarnos a la niñez y el contexto en que nos criamos para encontrar las raíces y posibles soluciones.

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