Ensayo De Tratado De Los Delitos Y Penas

Inicialmente el libro plasma el origen de las penas, la necesidad de su existencia y de su incursión en la sociedad, el autor trata de rememorar ideas de Jacobo Rousseau, añadiendo que elementalmente toda sociedad debe estar cubierta por leyes, que todos los ciudadanos sin excepción, sin importar su clase social, oficio o profesión deben sujetarse a ellas, debido que solo así es posible que el hombre pueda encaminarse a llevar una vida pacífica y en sociedad tranquila, el autor trata de explicarnos que todos los individuos renuncian un tanto a su libertad para conformar una sociedad y vivir de acuerdo a las normas de convivencia que esta requiere, si los hombres no renunciasen parcialmente a su derecho de libertad plena y hacer lo que quieran, la convivencia se tornaría prácticamente imposible, debido a que posiblemente una nación viviría constantemente en guerra y sin un medio de control para sus habitantes.

El propósito de renunciar a ciertas libertades permite a una sociedad constituir la soberanía de una nación, reflejando que la soberanía es la potestad que tienen los pueblos para auto determinarse, pero también la capacidad de basarse en leyes y reglas que sus gobernantes y sus gobernados son capaces de respetar, la soberanía principalmente esta al mando de los gobernantes y sus representantes, pero cuando en ocasiones incurre que algunos hombres no están dispuestos a sujetarse a normas establecidas por la sociedad, es necesario aplacar este incidente, es por ello la necesidad de establecer penas que eviten que comportamientos antisociales y tiránicos sigan ocurriendo dentro de una sociedad.

El derecho a castigar pertenece al gobernante quien es el encargo de evitar que ciertos hombres incurran en prácticas riesgosas para la sociedad y que alteren la seguridad y paz pública, como principio general que el autor señala es que la sociedad debe ser encaminada a un principio de vida pacífica, y cuando esta se ve alterada

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