Ensayo La Mentira Verdad

Ensayo La Verdad Mentira

Este es un evento que se lleva a cabo en la catedral de la plata a las 11 horas del día martes. La cual la llama filosofía en la calle, por un personaje que según él ha analizado los comentarios de San Agustín de Hipona y quiere encontrar la lógica de todo lo dicho por este filósofo. Poniéndole por título “Una pregunta en una comunicación infinita. La comunicación que vuelve a recuperar su ocasión originaria. La pregunta el porqué irrumpiendo en una plaza, en una calle, en un rio y sobre todo con otros. La filosofía clásica determinándose por la ciudad para que se apropie de sus ideas y si se quiere para incorporarse a sí mismo en diferentes perspectivas. Pensarse por fuera del sentido común estableciendo emanciparse, usa esta palabra de manera retorica para tratar de convencer a sus oyentes que se pueden liberar de todos sus temores cuando en realidad el ser humano está atado a sí mismo a muchas debilidades que constantemente luchan dentro de sí mismo un ejemplo de ello es el orgullo.

Las confesiones de San Agustín de Hipona y la propia historia de su conversión al cristianismo como un muro de buscar el convencimiento. Surge la pregunta pueden comulgar la filosofía con la religión. Siempre se ha dicho que cada materia en si misma tiene su propia esencia y es raro que acepte alguna adulteración> La religión en si misma esta en un nivel espiritual mas allá de nuestra propia comprensión, mientras que la filosofía es una creación humana, pensamientos humanos tomados en la reflexión de nuestro entorno.

Como se vinculan la fe y la razón es la pregunta del expositor, a lo cual yo digo no hay ningún vinculo, la fe se acepta sin ningún razonamiento lógico, porque si empezamos a razonar la fe empezamos a filosofar y la religión no quiere filósofos sino creyentes.

El expositor explica a sus oyentes como la humanidad vive la realidad de pensar en sus acciones a si mismo pensando en ese acto que se llama autoconciencia que es la separación que hará el hombre de si mismo respecto al mundo objetivo  y toma conciencia de su relación con el mundo de su propio ser como persona, de su conducta, sus actos, sus pensamientos y sentimientos, de sus deseos e intereses.

Según el expositor en ese momento se da el inicio a la filosofía y estamos de acuerdo el hombre empieza a darse cuenta de su realidad. La filosofía tiene un elemento de exceso que excede mas allá de lo que es lógico en otras palabras trata de explicar lo que de forma aparente no tiene explicación. El ser humano busca conocerse a si mismo lo que la filosofía llama a esto la conciencia de la finitud

Si notamos la respuesta que hacen los presentes son pocos que logran comprender este concepto. ¿Por qué? No han logrado emanciparse y otros no comprenden la pregunta. Surge la palabra escepticismo o incredulidad, falta de confianza en la verdad o eficacia de una cosa. Después hace la pregunta ¿Quién está seguro que no hay algo más? Y otro grupo de personas levanta la mano en demostración de su escaso conocimiento a esta pregunta.

El expositor se sorprende y se hace la pregunta si sus oyentes verdaderamente lo están escuchando y reformula la pregunta ¿Alguien toma la postura no sé, sigo buscando? Y la mayoría levanta sus manos. Lo cual es correcto  porque el hombre tiene que seguir buscando la fuente de donde él viene y si lo logra se dará cuenta que hay algo más.

Luego se presenta una escena donde dos mujeres tocan la puerta de una casa y sale un hombre para atender el llamado pero, cuando escucha que quieren compartir con él la palabra de Dios, inmediatamente cierra la puerta y detrás de la puerta hace la expresión

Y después se muestran varias escenas en las que aparecen la condición de los seres humanos en esta tierra.

Situaciones deproblables. La tercera posición sí, hay algo más allá, esa tercera posición la encontramos en la religión. Algunos tienen el concepto que la religión separa el mundo real y el mundo espiritual que hay dos mundos. Es realidad o es mentira, cada uno de nosotros tiene que descubrirlo por sí mismo. Hay muchos filósofos que son religiosos y en la religión se hace mucha filosofía. Volvamos a aclarar este concepto. Una cosa es la filosofía y otra la religión. Que un filósofo sea religioso no impide  que hable de sus propias creencias siempre y cuando acepte la verdad con fe.

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