Ensayo sobre El Judeocidio

Ensayo sobre El Judeocidio

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Karime Lòpez

        6to semestre        

Se abordará uno de los temas que más impacto ha tenido y que ha marcado para siempre de una manera u otra a todo el mundo fue el Holocausto, en contra de judíos, propiciado por Hitler y los nazis. Catástrofe que se convirtió en un Judeocidio en donde se vieron sumamente afectados los ya antes mencionados.

Indudablemente el impacto de este hecho fue de mayor trascendencia en la civilización judía, ya que esta se vio decayente por los ideales dementes de Hitler. Pero siempre se ha enfocado este hecho desde cierta perspectiva sin profundizar mucho en el tema. Sería muy interesante preguntarse cómo surge esta actitud de hostilidad nazi y analizar las consecuencias de los actos de tal catástrofe sobre la civilización judía.

Se le ha identificado al llamado judeocidio con los lugares donde se efectuaron asesinatos masivos, todos estos provocados por la policía militar alemana, aquellos encargados de mantener las marchas en orden formadas por grupos numerosos de judíos los cuales eran trasladados desde los campos de concentración y de exterminio hacia Alemania. El principal objetivo de los Nazis era aniquilar a la raza judía, ya que les convenía pues lograrían que estos fuesen obligados a trabajar para sustentar un régimen que los iba a matar.

En 1933, Hitler es elegido como Canciller de Alemania. Más tarde ese año, en febrero 27 se le otorgan los poderes a Hitler, quien ahora dispone de las herramientas necesarias para dar inicio a su plan de pureza racial. Un mes después de ser otorgado el poder al partido Nazi, se abren los primeros centros de concentración en Alemania, esto dio inicio a una cadena de brutalidad humana que avergonzara al mundo por el resto de la historia, el “nazismo.”

Durante este periodo las personas se encontraban bajo un régimen que establecía una rutina de control, eran secuestrados y detenidos para los campos de concentración los cuales dependían de cierta disciplina para modificar la manera en que se relacionaban judíos y alemanes, por medio de leyes, no obstante, siguieron las demostraciones de violencia y discriminación hacia judíos, aparte de privarlos de sus propiedades las cuales les fueron otorgadas al Estado: además de que los medios de comunicación y de las escuelas aumentaran aún más estas demostraciones de abuso, se hablaba de los judíos como los portadores de infecciones, siendo esto así, se consideraba que la destrucción de los mismos significaría limpieza en todos aspectos.

Por último, el pensamiento filosófico alemán de la época, fue uno de los más importantes, ya que, al tratarse de pensamiento y filosofía, nos indica a la vez que ya los alemanes empezaban a tener una concepción propia de la insignificancia y denigración que era ser judío, sobre esto hay mucha tela de donde cortar, podríamos empezar citando a algunos críticos para podernos dar cuenta de cómo este factor fue tan importante que conformó el sello de la hostilidad hacia los Judíos, por ejemplo “para Kant, el judaísmo impedía todo desarrollo de la libertad humana; para Hegel, el judaísmo era un espíritu negativo que se oponía a la concepción de lo bello y lo bien que formaba la esencia de la tradición griega en la cultura cristiana”. No se puede permitir que las semejantes brutalidades cometidas durante el Judeocidio, se vuelvan a repetir, y para esto debemos analizar este evento histórico a profundidad y comprender las fallas que dieron paso a un movimiento asesino. Lo que me lleva a recordar La “Matanza de Tlatelolco” crimen en el cual el Estado mexicano tuvo responsabilidad, y por el cual los señalados como supuestos responsables aún no pagan, cumplió 44 años de haberse perpetuado, no se sabe la cifra exacta de los y las estudiantes que perdieron la vida, tampoco se ha publicado una lista oficial con sus identidades. La Estela que se localiza en la Plaza de las Tres Culturas, en ese conjunto habitacional de la Ciudad de México, registra los nombres de 20 personas, y termina con un fragmento de un poema de Rosario Castellanos: “y muchos otros compañeros cuyos nombres y edades aún no conocemos “. Aquella tarde y noche del 2 de octubre de 1968, no sólo se arrebató la vida de decenas, cientos o miles de personas, sino también -coinciden los líderes sobrevivientes, se cortó de tajo con la rabia ideológica juvenil.

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