Espacio Y Sociedad

Espacio y Sociedad.

En un primer momento para el efecto del análisis será exterminada la forma más elemental del intercambio material presente en esta relación que incluye, por un lado, a la sociedad con sus necesidades, trabajo y formas de organización par a la producción, y por otro el espacio, como el sustrato material más inmediato, que se observa en los recursos naturales y en la naturaleza en general. Es necesario enfatizar que no se trata del examen de conexiones entre hombre y cuadro natural, con eventuales relaciones de causalidad entre ellos, sino que, desde el punto de vista de la teoría marxista, se trata de investigar esta relación como intercambio material en el que el trabajo humano es la categoría central. Po r tanto, la óptica es inevitablemente social, lo que presupone desde un inicio una relación permanente de apropiación de la naturaleza por el hombre.

Marx decía que el trabajo es un proceso en el que participa el hombre y la naturaleza, proceso en el que el ser humano con su acción impulsa, regula, y controla su intercambio material con la naturaleza. Pone en movimiento las fuerzas naturales de su cuerpo, brazos y piernas con el fin de apropiarse de recursos de la naturaleza al imprimirles una forma útil para facilitar la vida de del ser humano. Al modificar la naturaleza externa el hombre transforma su naturaleza interna, se le puede decir que humaniza la naturaleza. Y además nos dice Marx que el trabajo es el que diferencia al hombre de los demás animales, y esto se debe a que el hombre proyecta en su mente los objetos que desea obtener antes de iniciar su construcción material y en cambio los animales pueden tener actividades pero solo el hombre trabaja, ya que el trabajo implica previsión y conciencia de la acción.

Para Marx el proceso de trabajo desde el punto de vista de las actividades productivas posee un significado doble los cuales son: el objeto de trabajo y el medio de trabajo. El objeto universal del trabajo son todos los recursos de la naturaleza, incluyendo la tierra, el aire, el agua, subsuelo y demás, en este sentido toda la riqueza producida no es más que el resultado de la transformación de objetos de la naturaleza en objetos que satisfacen las necesidades humanas. Además nos dice que el hombre en sus fases primitivas las sociedades se limitaban a retirar de la naturaleza lo que les era ofrecido de inmediato a lo cual se le denomina actividad de colecta. Otra característica de ese fase es que todavía no se puede hablar de una verdadera apropiación de el espacio, puesto que el propio carácter de la actividad del trabajo determina una cierta movilidad permanente del grupo en su labor cotidiana de colecta.

Después con el desarrollo histórico se empezó a dominar la forma de relación entre la sociedad y el espacio, el intercambio material entre el hombre y la naturaleza se altero. El intercambio con la naturaleza se torna más complejo con la introducción de nuevas mediaciones, en particular las antiguas sociedades agrícolas, aparece aparece ya no solo como objeto de trabajo sino principalmente como medio de trabajo. Entre la naturaleza bruta y los objetos producidos y el consumo se interpone una cierta distancia histórica que es representada por instrumentos de trabajo más sofisticados,

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