Igualdad de genero en el transporte publico
Enviado por Dany Luna • 22 de Septiembre de 2016 • Monografía • 1.215 Palabras (5 Páginas) • 350 Visitas
Universidad Nacional Autónoma de México
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales
Comprensión de Textos y Expresión Oral
- Caso:
Ud. Es un asesor del jefe de gobierno de la Ciudad de México, debe formular una política pública de igualdad de género en el transporte público.
- Postura:
Primero que nada hay que establecer que el hombre y la mujer son iguales ante la ley, por lo tanto, la igualdad de género no se logra a través de la separación entre hombres y mujeres en el transporte público. Igualdad no es tener sectores específicos para el uso exclusivo de un solo sexo. Entonces hemos concordado que estamos en contra de esta implementación en el servicio de transportes.
- Tesis o hipótesis:
La CDMX lleva un tiempo empleando una política pública de “igualdad de género” en el transporte público. Esta política se creó gracias a las constantes quejas sobre acoso, especialmente hacia las mujeres en el transporte público. En el caso específico de las acciones orientadas hacia el sexo femenino, se encuentran los privilegios de los que gozan en el transporte público: desde hace varios años, los primeros dos vagones del Metro, durante las horas de máxima demanda, son reservados exclusivamente para mujeres, con el fin de garantizar un espacio seguro y libre de amenazas como acoso sexual, tocamientos y miradas lascivas. Lo mismo ocurre en algunos autobuses de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP), que, pintados de color rosa y bajo el programa denominado “Atenea”, son autobuses a los cuales sólo pueden abordar mujeres, niños y personas de la tercera edad. En el Metrobús, la parte delantera del autobús es igualmente reservada para mujeres y personas de la tercera edad o con discapacidades físicas. Finalmente, en los últimos días se ha implementado un nuevo “sistema de seguridad”, que consta de repartir silbatos a las mujeres en los alrededores de la ciudad, esto con la finalidad de que si son acosadas, puedan dar aviso con tan solo soplar de él. En este caso, los silbatos no se dan abasto, no tendría por que solo ser en los alrededores de la ciudad y por sentido común, no hay el personal suficiente para atender a este nuevo llamado de auxilio.
Todas estas acciones pueden parecer un gran esfuerzo y un gran logro en materia de protección a la mujer, sin embargo esto no es lo que se está fomentando. La división de hombres y mujeres en el transporte público es, una separación absurda, que mas que una solución al trato digno de las mujeres, está reflejando desigualdad, y más que un esfuerzo por eliminar de raíz el problema del acoso, es una forma de evitar atender el problema, separando a la ofendida del ofensor, pretendiendo que de esta forma en el lado azul no pasa nada por ser todos azules y en el lado rosa tampoco pasa nada, por la misma razón.
- Argumentos:
La negación a ver que el acoso va más allá de hombres contra mujeres, de igual modo de mujeres contra hombres, y en otros casos, entre los mismos sexos existe un acoso. En este tema también entra en juego la seguridad e integridad de las personas con expresiones de género distintas, que se ven discriminadas por la necesidad de escoger en qué lado del tren ir, sin tener seguridad garantizada en ninguno de los dos.
Otro factor importante, afectado por estas medidas, es que la capacidad de los vehículos en muchos casos se ve seriamente reducida ya que la distribución uniforme de los pasajeros se vuelve imposible. Basta con ver el Metro y como los vagones delanteros, aunque van llenos, no lo van al grado de los traseros, de los “mixtos”, y en el caso de los autobuses de la RTP, que de por si tiene muy pocas unidades en sus rutas, de 2 autobuses que pasan cada hora en muchas de las rutas, uno es Atenea. Gran parte de los usuarios que podrían ser atendidos por el autobús RTP, se quedan sin recibir el servicio por no tener las características físicas necesarias para poder abordar la unidad, esto para nada es una forma eficaz ni eficiente de enfrentar un problema como ciudad, al contrario, dado que las personas se concentran en un solo lugar concentradas, donde varios son aplastados e incomodados, dan respuesta con riñas e insultos.
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