LA MORALIDAD Y LA VOLUNTAD DE DIOS
Jenma3 de Febrero de 2014
8.829 Palabras (36 Páginas)532 Visitas
INTRODUCCIÓN
El 19 ele abril de 1993, alrededor de 80 miembros de una secta religiosa llamada la Rama Davidniana se quemaron en su hogar comunal en Waco, Texas al final de un asedio iniciado por el FBI y otras organizaciones militares del gobierno de los EE.UU. La persecución se inició por la preocupación del FBI sobre las armas que el grupo había acumulado. El FBI también estaba preocupado porque el líder de 34 años de los davidnianos estaba abusando sexual y psíquicamente de los niños del grupo. Durante el asedio Koresh admitió ser el padre de más de ü niños con diferentes esposas que estaban alrededor de los 12 o 13 años cuando se embarazaron. En sesiones de estudio de la Biblia anteriores Koresh enseñó que las muchachas más jóvenes del grupo tendrían e privilegio de tener relaciones sexuales con él una vez que alcanzaran 1< pubertad. Koresh también disciplinó duramente a los niños golpeándolo: o privándolos de comida. El FBI estaba cada vez más frustrado por 1; negativa de los davidnianos de rendirse y, el 51° día del sitio el FBI inicio el asalto en contra del hogar comunal. Antes que rendirse, los davidniano: se quemaron ellos mismos y murieron.
La teología de la Rama Davidniana es compleja, pero muchas de su creencias se derivan en su creencia de profecías inspiradas por Dios. D acuerdo con esta doctrina, encontramos en la Biblia alguna profecía divina, que anticipan los eventos conducentes al fin del mundo. Otro mensajes divinos, sin embargo, vienen de profetas recientes —incluyendo a mismo David Koresh. Koresh creyó que, como profeta, tenía una posición única para conocer el plan de Dios para el mundo. En un mensaje grabad durante el asedio, explica que los santos de Dios conocen cómo descubrí lentamente la verdad de Dios, un precepto a la vez:
... si ella (i.e., la novia de Dios) tiene la rectitud de los santos, nosotros como santos, ¿no deberíamos conocer correctamente cómo dividir la Palabra ó Dios (línea por línea, precepto por precepto; pata ver aquí, allí; y un poco aquí otro poco allí) la Verdad de Dios? (Mensaje grabado en Marzo 2, 1993).
Más específicamente, Koresh creía que el plan de Dios implicaba una confrontación entre la Iglesia y el gobierno de los EE.UU — lo cual era la razón para acumular armas. También creía que Dios lo dirigía para engendrar niños con sus varias esposas jóvenes.
Un componente subyacente de las profecías de Koresh es que Dios es la ley El mismo y puede ordenai las cosas como a Él le acomode. Esto parece incluir la habilidad de Dios para crear estándares morales. Aunque a veces Dios podría decirnos que cooperemos con nuestros gobiernos, en otras ocasiones podría decirnos que resistamos a nuestros gobiernos con fuerza militar. Aunque a veces Dios puede darnos reglas específicas respecto al matrimonio y a tener hijos, en otras veces podría instruir a una persona especial —tal como David Koresh- para desafiar estas reglas en formas que ordinariamente encontraríamos repugnantes. Las posiciones teológicas tales como el llamado de Koresh nos hacen pensar más profundamente sobre la relación entre la moralidad y la voluntad de Dios. ¿Dios simplemente inventa las reglas morales como a Él le acomoda o Dios mismo responde a un estándar más alto? Una tradición muy duradera en la filosofía cristiana sostiene que Dios en verdad crea las reglas como un asunto de su voluntad libre. Veremos los argumentos centrales a favor y en contra de esta posición.
Platón y el enigma del Eutifrón. El asunto filosófico que rodea a la moralidad y la voluntad de Dios salió por primera vez a la luz con el filósofo griego Platón (428-348 a.C.) en su diálogo Eutifron. En este diálogo, un personaje llamado Eutifron está preparado para entregar a su padre a las autoridades por tratar mal y causar la muerte de un esclavo. En la Grecia antigua, se esperaba que los hijos mostraran lealtad incondicional a los padres; y, así, Eutifrón estaría violando el código estándar de moralidad. Sin embargo, Eutifrón cree que está siguiendo la voluntad de los dioses y, por lo tanto, está haciendo lo correcto. En su camino al juzgado, Eutifrón se Encuentra con Sócrates y los dos empiezan a debatir sobre la conexión entre la moralidad y la obediencia religiosa. Sócrates entonces le plantea esta cuestión a Eutifrón: "¿Son buenas las cosas buenas porque los dioses las aprueban, o los dioses las aprueban porque son buenas?” En este acertijo, Sócrates presenta dos opciones respecto a la relación entre los dioses y la moralidad. La primera opción es que algo llega a ser bueno cuando los dioses desean que sea bueno. Por ejemplo, los dioses podrían desear que los hijos mostraran una lealtad incondicional a sus. padres; y, porque lo desean así, es por lo tanto
moralmente bueno y obligatorio que los hijos mostraran una lealtad incondicional a sus padres. Desde este punto de vista, los dioses inventan la moralidad y, en un sentido, los dioses crean la moralidad desde el comienzo, completamente, sin ninguna fuente de guía. Si los dioses desearan que algo fuera moralmente bueno, entonces simplemente ello llega a ser moralmente bueno.
La segunda opción en el acertijo anterior es que las cosas buenas son objetivamente buenas, y los dioses simplemente las reconocen como "tales. Por ejemplo, podría ser objetivamente bueno y obligatorio que los hijos mostraran una lealtad incondicional a los padres, y los dioses simplemente se adhieren a este estándar moral. Desde este punto de vista, la moralidad está fundada en un estándar pre-existente de bondad moral, sobre la cual los dioses mismos no tienen control y que los mismos dioses deben adoptar. Lo genial del acertijo de Platón es que —asumiendo que Dios tiene un interés en la moralidad- las únicas dos opciones disponibles para explicar la conexión entre Dios y la moralidad son: o Dios la inventa desde el comienzo o Dios se atiene a un estándar pre-establecido. Más aún, dado que no podemos adherirnos a las dos opciones al mismo tiempo, estamos entrampados en escoger una o la otra. Platón mismo creyó que la moralidad está fundada en estándares externos y pre-existentes y, así, Platón se quedó con la segunda opción. Muchos filósofos después de Platón siguieron su liderazgo y sostuvieron que existía un estándar de moralidad independiente y eterno.
EL VOLUNTARISMO TRADICIONAL
Durante la Edad Media, los filósofos cristianos pensaron sobre la conexión entre Dios y la moralidad y consideraron más seriamente la posibilidad de que Dios pudiera ser el autor de los estándares morales. Los filósofos que debatieron este asunto fueron todos ellos partes de la tradición de la ley natural de la filosofía moral. Esto es, todos ellos sostuvieron aproximadamente que Dios se adhiere a estándares morales específicos y los fija en la naturaleza humana. Nosotros luego descubrimos las leyes naturales de la moralidad a través de nuestra conciencia o por reflexionar sobré nuestras inclinaciones humanas naturales. Aunque los filósofos de la ley natural concordaron sobre estos puntos básicos, estuvieron en desacuerdo sobre de dónde Dios .obtuvo los estándares
morales, para empezar. Tomás, por ejemplo, creyó que, aunque Dios se adhiere a los principios morales de la ley natural, Dios no es literalmente el autor de los mismos. En cambio, los principios morales son leyes racionales que existen independientemente de Dios. Dios simplemente adopta los principios morales porque, cómo ser racional, Dios tiene un parentesco con lás nociones racionales tales como los principios morales. Dado que Dios creó a los humanos como criaturas racionales, entonces tenemos también la capacidad de captar racionalmente estos principios morales. Esta posición comúnmente es llamada intelectualismo, en la medida en que enfatiza la visión de que los principios morales se emiten desde el intelecto de Dios. Otros filósofos medievales tuvieron la visión opuesta llamada voluntarismo, la cual sostiene que los principios morales de la ley natural no son principios racionales independientes. En cambio, son creaciones de la voluntad de Dios. En años recientes, la posición voluntarista también lleva el nombre de teoría del mandato divino.
El voluntarismo de Scoto. uno de los grandes defensores del voluntarismo en la Edad Media fue el filósofo escocés Juan Duns Escoto (c.1266-1308). Hay dos componentes en lá doctrina de Escoto. Primero, Escoto creyó que Dios tenía una voluntad genuinamente libre en el sentido de que Dios podría haber deseado cosas diferentes de las que realmente deseó. Supongamos, por ejemplo, que Dios deseó crear el planeta Marte en un punto específico del tiempo. En el preciso momento en que Dios deseó crear Marte, Dios podría haber deseado en cambio no crearlo. La noción de Escoto de la voluntad de Dios es sustancialmente más fuerte que las opiniones de la voluntad de Dios sostenidas por los filósofos intelectualistas antes de él. Tomás, por ejemplo, creyó que la voluntad de Dios está íntimamente ligada a las habilidades racionales de Dios, de manera que cuando Dios deseaba algo, el desearía, por lo tanto, cosas que fueran racionales. Para Tomás, cuando Dios deseó crear las leyes de la moralidad, lo hizo así porque tales leyes envuelven una forma racional y ordenada para que los seres morales conduzcan sus vidas. Escoto, sin embargo, cree que la noción de Tomás de la voluntad de Dios es inadecuada dado que constriñe la voluntad de Dios con razones o causas previas. Una voluntad genuinamente libre para Escoto es sin constricciones.
El segundo componente de la doctrina de Escoto es que Dios tiene poder absoluto en el sentido de que Dios puede crear cualquier cosa que desee, en tanto que no envuelva una contradicción lógica.
...