LA ÉTICA COMO HORIZONTE DE PLENITUD

LA ÉTICA COMO HORIZONTE DE PLENITUD

INTRODUCCIÓN

La orientación de la plenitud es la orientación de lo que se puede considerar nuestro bien superior. La palabra que se ha utilizado para determinar esta propiedad es suerte. La vida de la ética se define entonces como una aspiración. La ética es el saber que trata de guiarnos al conocimiento de nuestra plenitud como personas.

Aristóteles con su idea de que la felicidad es la meta exigida por nuestra naturaleza y la cual deseamos constantemente, en este caso el conflicto de esta ética empieza cuando nos cuestionamos el significado de ser feliz a lo que como conclusión resulta que Aristóteles expone que la felicidad suprema seria la actividad contemplativa (Araos San Martín , 2003) mientras que Epicuro nos va a seguir refiriendo que la ética se orienta a la felicidad, pero en este caso con ideas nuevas como por ejemplo Epicuro habla de modo muy explícito que la felicidad es más un placer o sea en otras palabras la evitación del dolor ya que es nuestra inclinación natural. (Lenis Castaño, 2015)

Es necesario partir de la experiencia propia y de los hechos para alcanzar el máximo grado de perfección y virtud en cualquier actividad. De este modo, se alcanza la felicidad o la bondad, a la que se llega por muchos caminos.

Por la cual surge la siguiente pregunta ¿qué nos quiere dar a entender la ética como horizonte de la plenitud?, por la cual se explicará en los siguientes párrafos.

DESARROLLO

Para toda la filosofía antigua el objeto de la moral es lo que nos permite definir y alcanzar el soberano bien que es el fin supremo de nuestra actividad. Este fin es un bien perfecto, acabado, que se basta a sí mismo y que nos llena totalmente. Aunque todos concuerden en decir que sea la felicidad, o eudaimonía, Aristóteles advierte en la Ética nicomaquea que cada hombre la concibe a su manera. Para liberarse de este subjetivismo, es preciso buscar cuál es el bien propio del hombre. (Margot, 2007).

La felicidad es un bien supremo porque es buscada por sí misma y por ninguna otra cosa, siendo al mismo tiempo la razón explicativa de la búsqueda de otros bienes, con el fin de que aquello para lo que se realiza o provoca el cambio; es el propósito y meta del cambio.

La virtud es la disposición a hacer el bien que se adquiere con la práctica, lo decisivo no es el aprender si no poner en acción todo lo que ya conocemos. El habito porque el ser humano se hace bueno y por el cual realiza sus actividades. La virtud humana es lo que lleva a la felicidad, el habito por el que el ser humano se hace bueno y por el cual realiza sus actividades. La virtud humana es la actividad especifica humana; es el elemento racional que todo ser humano posee.

Si el hombre es un ser libre que siempre se hace, capaz de transformar al mundo, y a él mismo por el trabajo que realiza, ¿no puede adaptar la realidad a los valores humanos? Se trata entonces de un caminar hacia la verdad, obra histórica en la que participan todas las generaciones. (Huitrón Villegas , 2018). La felicidad ya no está ligada a la contemplación de un orden perfecto e inmóvil; debe ser construida por todos, para todos, en una historia del devenir. Esto no significa que el individuo deba abandonar toda búsqueda personal, pero la realización del bien común debe poder acrecentar para cada hombre las condiciones favorables para su propia felicidad.

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