La Amistad

ENSAYO FINAL

ÉTICA A NICOMOCA LIBRO OCHO DE ARISTÓTELES

SANTIAGO ANDREY MORA POSADA

GRADO: 11-04

I.E.M HUMBERTO MUÑOZ ORDOÑEZ

FECHA: 02/04/2013

AREA: Filosofía

DOCENTE: Especialista Ricardo Felipe Nieto Pavía

AÑO – 2013

“En que se muestra quién se ha de decir amigo, y qué se requiere haber en las amistades de los buenos”

Aclarando y satisfaciendo toda la sed de conocimiento de este plano ensalzado y creado por los pensamientos y mesclas de razón ser entre otros, en si conociendo un poco de esta ética a nicomoca aristotélica y basándome en el libro ocho y el capitulo cinco de esta ética me doy acto para decir que existen infinidades de amistades en aspectos de si es verdad, pero son reales, verdaderas, fieles, sinceras, gratas, compañeras.

No nadie lo sabe hasta que no haya un fondo que tenga fin un fin golpeador un fin acolcho nadito o un fin sin fin, que es el punto en donde se centra esta incógnitas entre esta extensa y mortal vida, en ser voz de profesar o trasmitir con seguridad y con la mayor sabiduría de si en todos estos hábitos y ejercicios en que se definen las amistades llega una circunstancia clara derivada por nuestro saber y saber decir que la amistad es mala o buena en fin ya estamos en un mundo en donde todo el mundo es amigo de lo bonito de lo bueno y escribiendo esto y diciéndolo me refiero hasta las amistades que sin nosotros darnos cuenta si no viendo solo el rostro que oculta la verdad de aquella persona en que se deposita la llamada amistad, debajo de ese rostros encontramos uno de los cuchillos mas filosos que podemos afrontar.

Sabemos que en esta obtenemos caracteres como los del deleite que lo podemos nombrar en esta por los actos bochornosos y activos de algo deseoso que nos impulsa hacer cosas impuras como no las pueden ser; pero es una de los motivos por los que la amistad nos une a personas. Por un lado ese deleite de lo que se vive dentro de esta relación grata, yo opongo un punto entre todo esto en el que declaro de que si esta amistad es digna y acogedora en realidad y con realidad debemos darnos cuenta el de amarla por un vacio lleno de felicidad o “apacibilidad” que logramos obtener de esta, uno necesita de uno mismo como nuestros amigos y personas variadas entre esta sociedad necesitan entre si y de ellos mismos no porque ellos o yo necesitemos, si no en deseo de ese deleite dicho o por el motivo que e nombrado por un momento en el segundo párrafo un habito o ejercicio que por si esto se debe en el poder nosotros juzgar, hablar en eso que es por lo que más se lucha; ahora si es buena o mala, que es definida por lo que podamos obtener según estos.

Miremos aquí algo más contradictorio, en el tema sobre la amistad y el libro ocho pero lo visto ahora será sobre el capitulo catorce, (xlv) y en lo último en que me he querido basar.

...