La Falacia.

Falacia.

La determinación de falacia nos dice que es la mentira o engaño con que se pretende dañar a una persona, esta palabra en un término más lógico es la realidad que se le da a una falsedad para elaborar una implementación de daño a una persona a tal grado que la persona llegue a darle una ponderación mas verdadera que falsa.

A mi parecer esta palabra tiene una generalidad demasiada extensa, puesto que no podemos definir a una sola rama de lo que nos dice la definición. Lógicamente tiene su estructura y limitantes pero podemos decir alguna falacia a la cual se le denomina como una verdad casual, esto implica que la gravedad del engaño no alcanza a herir o hacer un gaño aparente.

Existen diversos tipos de falacias:

Argumento dirigido a las personas o argumento dirigido a la mayoría: Es un argumento falaz que concluye que una proposición debe ser verdadera porque muchas personas lo creen así. Es decir, recurre a que «si muchas personas lo creen así, entonces será así.

Este tipo de falacia nos muestra como la palabra tiende a ser cotidiana en la sociedad misma a tal grado de accionarla de manera masiva, así es cuando la retorica de la ética entra en cuestión; si la mayoría cree en una falacia entonces podemos decir que es verdad en cuanto no se entre en el origen de la misma. Dándonos como referencia que la ética entra en un dilema de la esencia misma de la palabra.

Existe otro tipo de falacia que es la argumentum ad náuseam este tipo de falacia nos dice que es un tipo de falacia dirigida a las emociones, en el que las personas creen es más posible que una afirmación sea cierta (o sea aceptada como verdad) cuanto más veces haya sido oída.

Una de las razones por las que la falacia tiende a argumentarse como verdadera es con la constante repetición de la falsedad como afirmación a la cual este tipo de falacia tiende a inclinar a que crean que lo que dice es la verdad absoluta cuando por el origen de tal no lo sea, este tipo lo utilizan mucho los políticos o personas que tienen que convencer a un cierto grupo de personas a hacer una acción.

Apelar a la autoridad o argumento dirigido a la autoridad: Esta falacia lógica consiste en basar la veracidad o falsedad de una afirmación en la autoridad, fama, prestigio, conocimiento o posición de la persona que la realiza. Un tipo especial de esta falacia es la falacia donde se considera más veraz una afirmación porque la persona que la realiza es rica o por el contrario en argumentum ad lazarum porque el pobre o de menor clase quien la realiza.

Aquí otra de las más indignantes a mi parecer es donde la falacia va con un fin de alevosía y ventaja ante la acción correspondiente; nos dice que el poder de una jerarquía social tiene la errónea idea que por ser rico alguna persona de un estatus alto va a tener la razón de lo que dice y predice como si los hechos con los que se basa la verdad de la afirmación sean realidad y burlen a la autoridad o en consecuente que la persona de una nivel económico bajo tenga las pruebas para decir que lo que dice una gente con cierta “autoridad” sea mentira.

Recurrir a la tradición: Es una falacia lógica típica en la que una tesis es proclamada como correcta basándose en que ésta ha sido tradicionalmente considerada correcta durante mucho tiempo. En definitiva, «esto es correcto porque siempre se ha hecho de esta manera». Este argumento hace dos suposiciones:

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