La vivienda social requiere que se trabaje con calidad profesional, no con caridad profesional"

Un Arquitecto importante

"La vivienda social requiere que se trabaje con calidad profesional, no con caridad profesional".

-Alejandro Aravena

La carrera de arquitectura es una de las más bellas y las más nobles, es el preocuparse por las necesidades y gustos de los demás, incluso por encima de los gustos propios, es aprender a diseñar espacios confortables, espacios que nos hagan sentir bien.

Todos como arquitectos soñamos con realizar grandes edificios, enormes auditorios, Residencias lujosas y demás, lo cual es bueno, queremos dejar huella y ser recordados, muchos soñamos también con ganar el premio Pritzker; que reconoce al mejor arquitecto mundialmente una vez al año. Generalmente se piensan muchas cosas de los arquitectos, se cree que es muy caro contratar a uno y recurren a personas del ámbito de la construcción, pero sin los conocimientos necesarios para el diseño, normalmente pensamos que solo las personas ricas o con suficiente dinero tienen el derecho y la posibilidad de contratar un arquitecto, por eso las casas de las personas de bajos recursos, son como son, porque nadie se preocupa por ellos.

El arquitecto Alejandro Aravena se dio cuenta de esta situación y decidió hacer algo al respecto, aunque inicio realizando edificios y escuelas, fijo sus ojos en las personas que no podían pagar un arquitecto, pero tenían la necesidad de un lugar digno para vivir. Aravena se dio a la tarea de diseñar casas de interés social, más allá de lo que siempre se diseña, algo diferente y algo innovador, darles a las personas una oportunidad de tener un espacio confortable y cómodo al alcance de su economía, fue como diseño en 2003 las Viviendas sociales Quinta Monroy que fueron construidas en 2004, lo que marco una diferencia entre lo que se creía era una casa de interés social y lo que el creo.

Así fue con el 2010 realizo la construcción de Viviendas sociales en Monterrey, México otro proyecto que cambió por completo un concepto viejo de las viviendas de interés social.

En 2012 se encargó Conjunto de viviendas y centro Comunitario, Lo Barnechea, Santiago, Chile.

Aravena destaco en el mundo por hacer lo que nadie hacía, enfocarse en las personas de bajos recursos y darles una oportunidad diferente para cumplir su sueño de tener un hogar, mas allá de solo tener una casa. Por lo que en 2016 recibió el premio Pritzker en convirtiéndose en el primer chileno que obtiene esta distinción  y en el cuarto latinoamericano, después del mexicano Luis Barragán y los arquitectos brasileños Oscar Niemeyer y Paulo Mendes da Rocha.

Como una acción que no cualquier arquitecto realiza Aravena libero sus planos, de manera gratuita en internet, para que todos los que necesiten utilizarlos lo hagan y puedan tener una vivienda apta.

Me inspiro en este arquitecto porque creo que en México que existe un alto índice de pobreza, hace falta que más arquitectos enfoquemos nuestros ojos a ellos y empecemos a diseñar también pensando en ellos. La mayoría busca proyectos grandes, pero incluso con edificaciones pequeñas podemos dejar huella y podemos hacer un cambio, tenemos que tomar en cuenta todos los sectores y todos los niveles económicos de México.  Tenemos la capacidad de hacer un cambio como arquitectos y creo que Aravena nos mostró que es posible.

Así que yo exhorto a mis compañeros a tomar en cuenta al sector más marginado de México, porque para ser grandes tenemos que iniciar con algo pequeño. Yo creo que el cambio que necesita nuestro país está en manos de todos, pero nosotros como arquitectos tenemos la responsabilidad de apoyar este cambio.

Una persona que me inspira

Tal vez en el dinero encuentres un poco de felicidad, en las amistades encuentres alegrías, en las medicinas la cura para tu enfermedad, pero el amor solo lo encontraras en tu familia.

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